Dos misiles lanzados por radicales de Gaza alcanzan el ¨¢rea de Tel Aviv

El intercambio de proyectiles sobre los cielos de la franja de Gaza y el sur de Israel crece en intensidad. No hay visos de que el enfrentamiento vaya a amainar. Al contrario. Los cohetes palestinos alcanzaron incluso el ¨¢rea metropolitana de Tel Aviv, en el centro del pa¨ªs. El primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, advirti¨® al mundo en ingl¨¦s, para que no hubiera dudas, que "Israel est¨¢ preparado para hacer lo necesario para proteger a sus ciudadanos". Sus palabras indicaban que a la operaci¨®n Pilar Defensivo con la que Israel aspira a "destruir los arsenales y eliminar a los l¨ªderes [del grupo islamista Ham¨¢s]" le queda todav¨ªa camino por recorrer. Al menos 19 palestinos y tres israel¨ªes han muerto desde que el mi¨¦rcoles un asesinato selectivo israel¨ª matara al jefe militar de Ham¨¢s y desatara un ciclo de violencia sin precedentes en los ¨²ltimos cuatro a?os.

El dirigente de Ham¨¢s, Jaled Meshal, tampoco ofreci¨® un mensaje mucho m¨¢s conciliador. "Continuaremos la resistencia", dijo en una conferencia en Jartum. Poco despu¨¦s, la Yihad Isl¨¢mica se atribu¨ªa el lanzamiento de un misil de fabricaci¨®n iran¨ª en direcci¨®n a Tel Aviv, donde sonaron las sirenas, por primera vez desde la guerra del Golfo, desatando el p¨¢nico. "Hemos ampliado el radio de la batalla para alcanzar Tel Aviv", dijo la Yihad isl¨¢mica en un comunicado. Uno de los proyectiles cay¨® en el mar, y otro en una zona deshabitada en la periferia de la ciudad, pero el ministro de Defensa, Ehud Barak, advirti¨® a los palestinos que "pagar¨¢n un precio" y confirm¨® la movilizaci¨®n de 30.000 reservistas.

En Gaza, las calles amanecieron ayer desiertas. Los habitantes apenas se atrev¨ªan a salir de sus casas m¨¢s all¨¢ de lo imprescindible. La noche anterior, en cuanto las noticias de la muerte de Ahmed Yabari, el jefe de Ham¨¢s, se propagaron por la franja, la poblaci¨®n se concentr¨® en las tiendas para hacer acopio, sobre todo, de gasolina, pan, queso y leche. "Fuimos corriendo al supermercado. Hoy ya no hemos salido. No es seguro", dice Farah Abu Qasem, una maestra encerrada con su familia en su casa de Deir el Balah, en el centro de la franja. Como ella, muchos habitantes temen que lo peor est¨¦ por llegar.

El Ej¨¦rcito israel¨ª lanz¨® desde el aire octavillas a la poblaci¨®n, en las que ped¨ªa a los residentes que "por su propia seguridad, eviten su presencia en las proximidades de agentes e instalaciones de Ham¨¢s". La advertencia resulta casi de imposible cumplimiento en la franja de Gaza, uno de los lugares m¨¢s densamente poblados del mundo y donde las comisarias u otros centros oficiales se encuentran pared con pared con los edificios residenciales. Prueba de ello es que en los ¨²ltimos ataques considerarlos "quir¨²rgicos" por Israel murieron diez civiles, dos de ellos menores. Adem¨¢s, unos 150 han resultado heridos.

Las columnas de humo se elevaron durante todo el d¨ªa, repartidas por distintos puntos de la franja. Daban testimonio de los misiles que han destrozado "hasta 200 lugares de actividad terrorista", seg¨²n la versi¨®n del Ej¨¦rcito israel¨ª, que segu¨ªa atacando anoche con intensidad. Son lugares en el que los grupos armados palestinos almacenan armamento y desde donde lanzan cohetes como los que el jueves mataron a tres israel¨ªes en Kyriat Malaji, al sur de Israel e hirieron a un ni?o de gravedad. M¨¢s de 270 proyectiles han salido disparados de Gaza desde el mi¨¦rcoles, seg¨²n el recuento israel¨ª. M¨¢s de 130 fueron interceptados por la llamada c¨²pula de acero , sin llegar a su destino.

Los l¨ªderes israel¨ªes mientras, no acaban de concretar si habr¨¢ una invasi¨®n terrestre de la franja ni si se encuentran, como temen muchos habitantes en Gaza, a las puertas de una reedici¨®n de la operaci¨®n Plomo Fundido , la que arras¨® la franja en las navidades de 2008. Los observadores coinciden en se?alar que las circunstancias han cambiado. No solo porque la primavera ¨¢rabe encumbr¨® al islamismo pol¨ªtico en Egipto. Sino tambi¨¦n porque seg¨²n Efraim Halevy, exdirector del Mossad, "Ham¨¢s y los otros grupos aprendieron la lecci¨®n de Plomo Fundido . Se han reorganizado. Est¨¢n m¨¢s preparados", opina por tel¨¦fono. "Las circunstancias ahora son m¨¢s complejas", a?ade.