Un fiel consejero de Obama en materia antiterrorista

El d¨ªa en que Barack Obama recibi¨® por primera vez un informe en el que se le notificaba que la CIA pod¨ªa haber localizado al terrorista m¨¢s buscado, Osama Bin Laden, en un complejo residencial en Pakist¨¢n, John Brennan se encontraba junto a ¨¦l en el Despacho Oval. A lo largo de los meses, Brennan, como m¨¢ximo consejero en materia antiterrorista, asesor¨® al presidente en una operaci¨®n en la que Estados Unidos dar¨ªa caza a Bin Laden, una d¨¦cada despu¨¦s de los ataques del 11 de septiembre de 2001. En la c¨¦lebre foto en la que la plana mayor del Gobierno estadounidense presencia en directo la emisi¨®n de la operaci¨®n en la que muri¨® Bin Laden, Brennan se halla tras la Secretaria de Estado y el jefe del Pent¨¢gono, con circunspecci¨®n y gesto tenso, en uno de los momentos cruciales para la historia y la seguridad de la naci¨®n.

Esta es la segunda ocasi¨®n en la que Brennan, de 57 a?os, aspira a un puesto que Obama cree que es naturalmente suyo. Entr¨® en la CIA, como analista, en los a?os 80. Fue director de misi¨®n a Arabia Saud¨ª en los 90 y jefe de gabinete del exdirector de la Agencia John Tenet entre 1999 y 2001, para luego pasar a ser director de su Centro Nacional Antiterrorista entre 2004 y 2005. Cuando Obama tom¨® posesi¨®n de su cargo, en 2009, pens¨® que no hab¨ªa nadie con las credenciales de Brennan para dirigir la CIA, despu¨¦s de los oscuros a?os de las transferencias de combatientes enemigos a c¨¢rceles secretas y al centro de detenci¨®n de Guant¨¢namo, y del pol¨¦mico programa de interrogatorios coercitivos, con t¨¦cnicas como el ahogamiento fingido o la privaci¨®n del sue?o, meticulosamente dise?adas por el Gobierno de George W. Bush.

La experiencia de Brennan, sin embargo, result¨® ser un lastre con el que Obama no contaba. Precisamente durante los a?os en que Brennan fue un asesor y alto funcionario en la CIA, EE UU dise?¨® e implement¨® esas t¨¦cnicas de interrogaci¨®n que los activistas a favor de los derechos humanos equiparan con la tortura. No ayud¨® al presidente una entrevista que Brennan hab¨ªa dado en 2007 al canal de televisi¨®n CBS, en la que hab¨ªa dicho: ¡°De esos interrogatorios se ha obtenido mucha informaci¨®n que la Agencia ha empleado contra terroristas convencidos. Han salvado vidas. Y no olvidemos que esos son terroristas reincidentes responsables por el 11-S, que no han mostrado arrepentimiento por la muerte de 3.000 inocentes¡±.

El puesto de director de la CIA debe ser sometido a ratificaci¨®n por el Senado, y, ante la pol¨¦mica, Brennan decidi¨® retirar su nombre de consideraci¨®n. El presidente acab¨® nombr¨¢ndole Asesor de Seguridad Interior, un puesto de confianza para el que no se necesita pasar por el Congreso. En la primera legislatura de Obama, Brennan ha supervisado gran parte del programa de ataques con ¡®drones¡¯, o aviones no tripulados, en Pakist¨¢n, Yemen y Somalia, que tanto da?o ha hecho a la descabezada c¨²pula de Al Qaeda. Adem¨¢s, es en gran parte responsable de la atenci¨®n de EE UU sobre las incursiones del yihadismo en el norte de ?frica, especialmente en Mal¨ª, donde recientemente se ha robustecido el grupo Al Qaeda en el Magreb Isl¨¢mico.

En los pasados cuatro a?os, Brennan ha logrado redimirse en parte ante los activistas a favor de los derechos humanos gracias a su defensa del cierre del centro de detenci¨®n de Guant¨¢namo, una vieja promesa electoral hasta ahora incumplida por el presidente Obama. ¡°No vamos a traer m¨¢s gente a Guant¨¢namo¡±, dijo Brennan en una conversaci¨®n con periodistas en 2011. ¡°La pol¨ªtica oficial de esta Administraci¨®n es que se va a cerrar Guant¨¢namo, y a pesar de algunos obst¨¢culos legislativos que se han colocado en nuestro camino, vamos a seguir persiguiendo ese fin¡±. Brennan tiene a su favor el no tener afiliaci¨®n pol¨ªtica alguna, y haber servido bajo presidentes dem¨®cratas y republicanos en su larga trayectoria en la inteligencia norteamericana.