El Gobierno de Morsi quiere acelerar las negociaciones con el FMI

Mientras la clase pol¨ªtica egipcia contin¨²a enzarzada en una encarnizada lucha por el poder, la econom¨ªa del pa¨ªs se encamina hacia el abismo. Para evitar la bancarrota, el Gobierno egipcio conf¨ªa en llegar pronto a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para recibir un pr¨¦stamo urgente por un valor de 4.800 millones de d¨®lares (cerca de 4.000 millones de euros). Seg¨²n declar¨® ayer el primer ministro, Hisham Kandil, el Ejecutivo est¨¢ preparado para acelerar las negociaciones con la instituci¨®n internacional de forma inmediata.

¡°A causa de la situaci¨®n dom¨¦stica, tuvimos que posponer [las conversaciones], y estamos haciendo una evaluaci¨®n de las mismas. Estaremos en el camino adecuado muy pronto¡±, declar¨® Kandil en un acto celebrado por una asociaci¨®n empresarial. ¡°Hemos invitado otra vez a una delegaci¨®n del FMI para retocar el programa, y poder as¨ª avanzar con nuestro proyecto nacional para manejar el d¨¦ficit presupuestario¡±, a?adi¨®.

En noviembre, el Ejecutivo egipcio lleg¨® a un acuerdo con el Fondo para recibir el cr¨¦dito a cambio de aplicar un programa de reformas profundas. Sin embargo, apenas unas semanas despu¨¦s, el propio Gobierno egipcio solicit¨® al ¨®rgano director del FMI aplazar la inminente votaci¨®n sobre el pr¨¦stamo debido a la en¨¦sima crisis pol¨ªtica que atravesaba el pa¨ªs. En una acci¨®n que comprometi¨® seriamente su credibilidad, a principios de diciembre el Gobierno se ech¨® atr¨¢s en su decisi¨®n de subir varios impuestos tan s¨®lo unas horas despu¨¦s de hacer p¨²blico el anuncio.

Con un d¨¦ficit p¨²blico previsto para 2013 superior al 12% del PIB, Egipto est¨¢ financiando su deuda en los mercados internacionales a un tipo de inter¨¦s que oscila entre el 13% y el 16%, una carga insostenible incluso a medio plazo. Adem¨¢s, el banco central est¨¢ quemando sus reservas de divisas a marchas forzadas para sostener el valor de la libra egipcia, que en las ¨²ltimas semanas ha iniciado una pronunciada devaluaci¨®n.

¡°El pr¨¦stamo del FMI es importante no tanto por su cantidad, sino porque env¨ªa una se?al a los mercados de que el pa¨ªs est¨¢ comprometido con un programa serio de reducci¨®n de su d¨¦ficit p¨²blico¡±, explica Omneia Helmy, directora de la fundaci¨®n Egyptian Center for Economic Studies.

Adem¨¢s, varios pa¨ªses, entre ellos Arabia Saud¨ª, han condicionado la aportaci¨®n de ayuda a las menguantes arcas egipcias a un acuerdo con el Fondo. No es el caso de Catar, el principal aliado regional de El Cairo desde que el presidente Mohamed Morsi asumi¨® las riendas del gigante ¨¢rabe. En su visita de la semana pasada, el primer ministro Hamad Bin Jasim dobl¨® la asistencia financiera catar¨ª hasta los 5.000 millones de d¨®lares, un salvavidas que permitir¨¢ a Egipto capear el temporal durante las pr¨®ximas semanas.

En este delicado contexto, Morsi acaba de reemplazar al ministro de Finanzas y al director del Banco Central. El nuevo ministro es Morsi al Sayed al Hegazy, un catedr¨¢tico especializado en banca isl¨¢mica. Y Hisham Ramez, hasta ahora n¨²mero dos del Banco Central, pasa a dirigirlo.