Muere en un accidente a¨¦reo el exgeneral golpista paraguayo Lino Oviedo
El tambi¨¦n candidato presidencial viajaba en helic¨®ptero con otras dos personas
El general retirado y candidato presidencial paraguayo Lino Oviedo falleci¨® la madrugada del domingo a los 69 a?os al estrellarse el helic¨®ptero en el que viajaba cuando atravesaba la provincia paraguaya del Chaco.
Nada m¨¢s confirmase la noticia, el presidente del pa¨ªs, Federico Franco, expres¨® su p¨¦same ¡°a la familia del general, a los adherentes de su partido y a todo el pueblo paraguayo por la p¨¦rdida de uno de los h¨¦roes militares¡± de la ¡°gesta libertaria del 2 y 3 de febrero de 1989¡±. El mandatario alud¨ªa as¨ª al golpe de Estado que acab¨® con las tres d¨¦cadas de dictadura de Alfredo Stroessner. Oviedo regresaba a Asunci¨®n, tras participar en un mitin electoral en la ciudad de Concepci¨®n, acompa?ado de su guardaespaldas y el piloto, quien presumiblemente cambi¨® el rumbo de la nave a causa del mal tiempo. Franco declar¨® tres d¨ªas de duelo en Paraguay por la muerte del militar.
H¨¦roe del golpe que derroc¨® a Alfredo Stroessner hace ayer 24 a?os, Oviedo fue una de las figuras m¨¢s controvertidas de la escena pol¨ªtica paraguaya: condenado, exiliado y rehabilitado, en los ¨²ltimos a?os lider¨® el tercer partido pol¨ªtico de Paraguay. El 21 de abril pr¨®ximo iba a volver a intentar su sue?o de alcanzar la presidencia paraguaya al frente de la Uni¨®n Nacional de Ciudadanos ?ticos (UNACE), una escisi¨®n del Partido Colorado con la que obtuvo el 21,89% de los votos en las presidenciales de abril de 2008, que gan¨® Fernando Lugo.
Lino C¨¦sar Oviedo Silva naci¨® en Juan de Mena (provincia de Cordillera, en el centro de Paraguay) en septiembre de 1943. Se form¨® como militar en Alemania y era coronel cuando forz¨® la rendici¨®n de Stroessner, al que amenaz¨® con una granada y una pistola. Ascendido en 1993 a la comandancia del Ej¨¦rcito, en abril de 1996 se declar¨® en rebeld¨ªa contra el entonces presidente, Juan Carlos Wasmosy, antiguo socio suyo en el Partido Colorado, que le encarcel¨® y proces¨® por sedici¨®n.
El presidente Federico Franco ha decretado tres d¨ªas de duelo en Paraguay
Comenz¨® entonces una d¨¦cada de causas judiciales, exilio, desapariciones y periodos de c¨¢rcel durante la que promovi¨® su figura pol¨ªtica al frente de la UNACE, originalmente una corriente dentro del Partido Colorado. En 1998 el Gobierno de Wasmosy le conden¨® a diez a?os por insubordinaci¨®n, lo que supuso su inmediata inhabilitaci¨®n pol¨ªtica y baja en el Ej¨¦rcito. Ra¨²l Cubas, el candidato que le sustituy¨® en la UNACE, gan¨® las elecciones de mayo de 1998 y le rehabilit¨®, aunque meses despu¨¦s la Corte Suprema anul¨® el decreto de Cubas y orden¨® que Oviedo reingresara en la c¨¢rcel.
El 23 de marzo de 1999, la democracia paraguaya atraves¨® sus peores horas desde la ca¨ªda de Stroessner: el asesinato del vicepresidente Luis Mar¨ªa Arga?a, ac¨¦rrimo enemigo de Oviedo, cuando promov¨ªa un ¡°juicio pol¨ªtico¡± para la destituci¨®n del presidente Cubas desencaden¨® violentas protestas.
Oviedo fue acusado de instigar estos sucesos, conocidos como el ¡°marzo paraguayo¡± pero logr¨® huir¡ª antes de que Cubas presentara su dimisi¨®n¡ª con destino a la Argentina de Carlos Menem, que le ofreci¨® asilo pol¨ªtico.
De nuevo el h¨¦roe se convirti¨® en villano: expulsado del partido, hubo quien vio su sombra tras el asesinato de Arga?a y el Gobierno pidi¨® su extradici¨®n a Argentina, que la deneg¨®. Recluido en Patagonia, conspir¨® abiertamente contra el Gobierno de Luis Gonz¨¢lez Machi. Cuando Menem acab¨® su mandato, Oviedo pas¨® a la clandestinidad y pronto se le acus¨® de estar tras una nueva intentona golpista, en mayo de 2000, r¨¢pidamente sofocada. El Gobierno brasile?o orden¨® su detenci¨®n y le mantuvo encarcelado durante a?o y medio, aunque se neg¨® a extraditarlo a Paraguay.
Al quedar en libertad, Oviedo anunci¨® la conversi¨®n de su movimiento UNACE en partido pol¨ªtico y su intenci¨®n de presentarse a las presidenciales de 2003. Sin embargo, la Corte Suprema ratific¨® la anulaci¨®n de sus derechos c¨ªvicos pero Oviedo no se arredr¨®. El 29 de junio de 2004 regres¨® a su pa¨ªs sabiendo que iba ¡°derecho a la c¨¢rcel¡±. ¡°Me liberar¨¦ y gobernar¨¦ el Paraguay¡±, prometi¨® poco antes de ingresar en una c¨¢rcel militar de Asunci¨®n para cumplir la condena de 10 a?os por la intentona golpista de 1996 contra Wasmosy.
En los a?os siguientes, una serie de fallos judiciales confirmaron y anularon las distintas condenas por los procesos abiertos en su contra, hasta que finalmente la Corte Suprema le otorg¨® la libertad el 31 de julio de 2007, cuando se cumpl¨ªa la mitad de su condena, tras aceptar el testimonio de altos mandos militares que negaron los hechos. Libre y rehabilitado, Oviedo no descart¨® una alianza con Fernando Lugo para intentar acabar con el Gobierno colorado¡ª que llevaba seis d¨¦cadas en el poder¡ª pero finalmente present¨® su propia candidatura con UNACE y obtuvo el tercer puesto en las presidenciales.
Poseedor de una gran fortuna amasada a la sombra del general Andr¨¦s Rodr¨ªguez, que se hizo con la Presidencia tras la ca¨ªda de Stroessner, una comisi¨®n del Congreso brasile?o vincul¨® su enriquecimiento al narcotr¨¢fico, acusaci¨®n que Oviedo neg¨® siempre.
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