M¨¢s de 60 muertos en una cadena de atentados con coches bomba en Damasco

Una cadena de ataques con coches bomba en Damasco provoc¨® este jueves 64 muertos y m¨¢s de 200 heridos, seg¨²n estimaciones tanto del Gobierno de Siria como de la oposici¨®n. Uno de los veh¨ªculos explot¨® a escasos metros de las oficinas centrales del partido Baaz, del presidente Bachar El Asad, y mat¨® a 56 personas. Aunque los rebeldes, levantados en armas desde 2011, han efectuado numerosas incursiones en Damasco en los pasados meses, en pocas ocasiones le han asestado un golpe tan duro al coraz¨®n del r¨¦gimen, en el centro mismo del basti¨®n en el que resisten El Asad y su Gobierno.

Seg¨²n la agencia oficial de noticias de Siria, Sana, antes de las 11.00 de este jueves (las 10.00 en la Espa?a peninsular) los rebeldes detonaron un coche cargado con m¨¢s de una tonelada de explosivos en la transitada calle Al Thawra, a s¨®lo de unas manzanas del edificio del partido del r¨¦gimen. Esa misma agencia difundi¨® fotos de los momentos posteriores al ataque, en las que se ve¨ªan cuerpos mutilados y calcinados, rodeados de coches en llamas. Cerca de ese edificio se halla una escuela, por lo que seg¨²n el r¨¦gimen entre los muertos y heridos se hallan ni?os. A pocos metros se encuentra tambi¨¦n la embajada rusa.

Otros dos coches estallaron en puestos de control del Ej¨¦rcito en el cercano barrio de Barzeh, seg¨²n el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos. En uno de esos dos ataques fallecieron ocho personas, de las que tres eran civiles. Sana atribuy¨® los ataques a ¡°grupos terroristas¡±, los t¨¦rminos que el Gobierno suele emplear para referirse a los rebeldes. Adem¨¢s, la agencia inform¨® este jueves de que las autoridades arrestaron a un hombre que conduc¨ªa un coche ¡°cargado con calentadores de agua cil¨ªndricos con explosivos en su interior¡±, en lo que podr¨ªa haber sido un cuarto ataque, frustrado.

En los casi dos a?os de levantamiento en Siria han muerto 70.000 personas, en su mayor¨ªa civiles, seg¨²n un recuento de la Organizaci¨®n de Naciones Unidas. Han huido del conflicto 855.000 sirios, sobre todo a Jordania, L¨ªbano, Irak y Turqu¨ªa. La mayor¨ªa viven en condiciones insalubres, sin acceso a agua potable y atenci¨®n sanitaria. Al campo de refugiados de Zaatari, en Jordania, llegan unos 5.000 desplazados cada d¨ªa. Este jueves, el ministro jordano de Asuntos Exteriores, Naser Yudeh, dijo que la situaci¨®n de los refugiados podr¨ªa devenir en una "tragedia humanitaria".

El mayor grupo opositor, la Coalici¨®n Nacional Siria, conden¨® el atentado en un comunicado en el que dijo que ¡°los actos que tengan como fin matar a civiles o violar los derechos humanos son repudiables y criminales, sean los que sean sus responsables y justificaciones¡±. Los l¨ªderes de ese grupo abrieron este jueves una reuni¨®n de dos d¨ªas en El Cairo, en Egipto, para debatir posibles v¨ªas de di¨¢logo con el r¨¦gimen. Los rebeldes sirios forman un grupo extremadamente heterog¨¦neo, infiltrado por numerosas c¨¦lulas islamistas dadas a ataques con explosivos contra la poblaci¨®n civil.

En los 23 meses de conflicto en Siria los rebeldes se han hecho fuertes en el noroeste del pa¨ªs; frente a la zona de los Altos Gol¨¢n ocupada por Israel, y en varias barriadas circundantes a Damasco. En las pasadas semanas han intensificado sus ataques en la capital. S¨®lo en la primera mitad de febrero el Frente al Nusra, formado por yihadistas e islamistas radicales, dice haber atacado all¨ª en 17 ocasiones, siete de ellas con explosivos.

M¨¢s de 60 muertos en una cadena de atentados con coches bomba en Damasco

El r¨¦gimen respondi¨® a los ataques de este jueves bombardeando con aviones la ciudad de Deraa, al sur, donde comenzaron las protestas contra El Asad en 2011. Seg¨²n el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, el objetivo atacado era un hospital de campa?a, en el que fallecieron 18 personas, entre ellas 10 civiles. La fuerza a¨¦rea siria tambi¨¦n bombarde¨® las zonas aleda?as a la academia de polic¨ªa de Khan Asal, en la provincia de Alepo que, al norte, es una de las plazas fuertes de los rebeldes.