El Papa Francisco le tiende la mano a la comunidad jud¨ªa
L¨ªderes jud¨ªos de todo el mundo consideran una buena noticia la elecci¨®n de Bergoglio como Papa El presidente de Israel, Sim¨®n Peres, le invita a visitar el pa¨ªs como hicieron tres predecesores
Horas despu¨¦s de ser elegido Papa, Jorge Mario Bergoglio envi¨® una carta al rabino jefe de Roma, Riccardo Di Segni, en la que le comunicaba que espera ¡°poder contribuir al avance en las relaciones de las que jud¨ªos y cat¨®licos han gozado desde el Segundo Concilio Vaticano¡±. Segu¨ªa as¨ª con la tradici¨®n de conciliaci¨®n de ambos credos de sus dos predecesores directos, Juan Pablo II y Benedicto XVI. Este ¨²ltimo, retirado ahora como Papa em¨¦rito, mantuvo ese acercamiento, pero irrit¨® a algunos grupos jud¨ªos por algunas decisiones tradicionalistas en su pontificado.
En sus a?os como obispo de Buenos Aires, Bergoglio tuvo excelentes relaciones con la comunidad jud¨ªa argentina. Visit¨® sinagogas, y en 2005 firm¨® una carta en la que se ped¨ªa que se hiciera justicia por el atentado contra la Asociaci¨®n Mutual Israelita de Argentina en 1994, en el que murieron 85 personas. La justicia argentina requiere a ocho iran¨ªes, de los que sospecha que tomaron parte en el ataque. El 28 de febrero el Gobierno de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner aprob¨® un acuerdo conciliador con las autoridades de Ir¨¢n para investigar conjuntamente el ataque.
Estoy seguro de que el Papa Francisco seguir¨¢ siendo un hombre dialogante, capaz de construir puentes con otros credos"
Rabinos y l¨ªderes jud¨ªos de todo el mundo han saludado ya la elecci¨®n de Bergoglio. ¡°El hecho de que los cardenales hayan elegido a este Papa es en s¨ª mismo un avance en las relaciones con los jud¨ªos, por la personalidad conciliadora del cardenal Bergoglio, por su car¨¢cter humilde y gran espiritualidad. Con su ejemplo puede inspirar a los creyentes de todo el mundo a avanzar en esas relaciones¡±, asegura el rabino David Rosen, director de asuntos interreligiosos del Comit¨¦ Jud¨ªo Americano. ¡°El desaf¨ªo pendiente, ahora, es llevar esos cambios en las alturas a las bases de creyentes en comunidades en las que la presencia jud¨ªa no es muy fuerte, como Espa?a¡±, a?ade.
Inmediatamente tras la elecci¨®n papal, el presidente de Israel, Sim¨®n Peres, invit¨® a Bergoglio a visitar el pa¨ªs, como han hecho tres Papas antes: Pablo VI, Juan Pablo II y Benedicto XVI. Este ¨²ltimo, que se vio forzado a servir en las Juventudes Hitlerianas durante la II Guerra Mundial, visit¨® el campo de concentraci¨®n y exterminio de Auschwitz en 2006, desde el que dijo que los nazis, al ¡°destruir Israel, con el Holocausto, quer¨ªan romper en mil pedazos la ra¨ªz primaria de la fe Cristiana¡±.
El hecho de que los cardenales hayan elegido a este Papa es en s¨ª mismo un avance en las relaciones con los jud¨ªos" Rabino David Rosen, Comit¨¦ Jud¨ªo Americano
A pesar de su perfil conciliador, hubo algunas asperezas, m¨¢s bien de forma, entre Benedicto XVI y la comunidad jud¨ªa. Por un lado, Joseph Ratzinger perdon¨® en 2009 a cuatro curas seguidores del obispo integrista Marcel Lefebvre, que abjuraba del aperturismo del Concilio Vaticano II. Los llamados lefebvrianos no creen en el di¨¢logo interreligioso y son conocidos por detestar tanto a jud¨ªos como musulmanes. Uno de los perdonados, el brit¨¢nico Richard Williamson, hab¨ªa llegado a negar la existencia de las c¨¢maras de gas en el holocausto.
Adem¨¢s, en 2007 el Papa present¨® un documento con el que facilit¨® la celebraci¨®n de la misa en lat¨ªn seg¨²n el antiguo rito tridentino, en el que se incluye el rezo: ¡°Oremos tambi¨¦n por los jud¨ªos, para que nuestro dios y se?or ilumine sus corazones, y que reconozcan a Jesucristo, el salvador de todos los hombres¡±. Hasta 1962 en esa misa se oraba tambi¨¦n por ¡°los p¨¦rfidos jud¨ªos¡±, aunque Juan XXIII elimin¨® permanentemente esa referencia antisemita.
Esas decisiones no empa?aron permanentemente las relaciones de Benedicto XVI con los l¨ªderes jud¨ªos del mundo. ¡°El Papa Benedicto XVI se esforz¨® mucho en las relaciones entre cat¨®licos y jud¨ªos, y esperamos que ahora se prosiga en la construcci¨®n de esos cimientos que ya existen para el di¨¢logo interreligioso¡±, asegura Allan J. Jacobs, presidente de B¡¯nai B¡¯rith, una de las organizaciones de servicios jud¨ªos m¨¢s antiguas del mundo.
¡°Estoy seguro de que el Papa Francisco seguir¨¢ siendo un hombre dialogante, capaz de construir puentes con otros credos¡±, dijo Ronald S. Lauder, presidente del Comit¨¦ Mundial Jud¨ªo, en un comunicado. ¡°Siempre ha tenido los o¨ªdos atentos a nuestras preocupaciones. Al elegir a un hombre con tanta experiencia, alguien conocido por su apertura de mente, los cardenales han enviado una importante se?al al mundo¡±, a?adi¨®.
En realidad, la mejora de las relaciones entre Roma y el juda¨ªsmo se cimienta en el Concilio Vaticano II. De ¨¦l eman¨® el documento Nostra Aetate, promulgado por Pablo VI, en el que se asegura que ¡°aunque las autoridades de los jud¨ªos, con sus seguidores, reclamaron la muerte de Cristo, sin embargo, lo que en su Pasi¨®n se hizo, no puede ser imputado ni indistintamente a todos los jud¨ªos que entonces viv¨ªan, ni a los jud¨ªos de hoy. Y, si bien la Iglesia es el nuevo Pueblo de Dios, no se ha de se?alar a los jud¨ªos como reprobados de Dios ni malditos, como si esto se dedujera de las Sagradas Escrituras¡±.
El rabino Rosen considera, sin embargo, que esos cambios doctrinales y en la c¨²pula vaticana aun no han penetrado en todas las bases del catolicismo. ¡°En Espa?a y en Latinoam¨¦rica -a excepci¨®n de Argentina y Brasil- hay pocas comunidades jud¨ªas. Los jud¨ªos no est¨¢n en el radar de los fieles o del clero. En esas bases no se tiene una constancia permanente de documentos como Nostra Aetate, o de los cambios en la ense?anza cat¨®lica, y las posturas oficiales respecto al juda¨ªsmo e Israel¡±, asegura. ¡°El desaf¨ªo ahora es que los cat¨®licos internalicen esos cambios¡±, a?ade.
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