Veinticuatro presos, en huelga de hambre en Guant¨¢namo

Veinticuatro presos de Guant¨¢namo se encuentran desde hace seis semanas en huelga de hambre por razones que var¨ªan dependiendo de quien de la versi¨®n. Seg¨²n el general John Kelly, jefe del Comando Sur del Ej¨¦rcito de Estados Unidos, los presos se sienten ¡°frustrados¡± por el fracaso de la Administraci¨®n norteamericana para cerrar el campo de detenci¨®n. Sin embargo, la semana pasada, un grupo de 50 abogados que representan a los prisioneros enviaron una carta al secretario de Defensa, Chuck Hagel, en la que le ped¨ªan que tomara medidas para acabar con la huelga de hambre que comenz¨® el pasado 6 de febrero, despu¨¦s de que los presos se quejaran de que se les hab¨ªa confiscado fotos y correspondencia al registrar sus celdas y que durante esos registros los soldados dieron un trato irrespetuoso a sus copias del Cor¨¢n.

El general Kelly ha calificado esas acusaciones de ¡°tonter¨ªas¡± e insiste en que la huelga se debe al cansancio y la frustraci¨®n por sentirse abandonados. ¡°El Cor¨¢n no ha sido maltratado o abusado de ninguna manera¡±, declar¨® esta semana el general ante el Comit¨¦ de Servicios Armados de la C¨¢mara de Representantes en Washington. El militar a?adi¨® que tan solo los int¨¦rpretes, que son musulmanes, tocan los Coranes y que ¨¦l es muy consciente ¨Ctras tres destinos en Irak- de lo sagrado que es el libro para los creyentes.

No es la primera vez que se da una huelga de hambre en Guant¨¢namo desde que se concibi¨® en enero de 2002 para alejar de las leyes norteamericanas a los combatientes enemigos capturados en la guerra contra el terrorismo de la Administraci¨®n George W. Bush tras el 11-S. En septiembre de 2005, al menos 200 detenidos de la base militar estadounidense en Cuba iniciaron ese tipo de huelga, lo que en su momento represent¨® m¨¢s de la tercera parte del total de los reclusos.

En la actualidad, la prisi¨®n tiene 166 reos, la mayor¨ªa de los cuales llevan encerrados sin cargos desde que se cre¨® el centro de detenci¨®n ¨Cm¨¢s de 11 a?os- y la mitad de ellos tienen el visto bueno de las autoridades militares para ser transferidos o liberados. Dentro del laberinto kafkiano que es el agujero negro de Guant¨¢namo, una vuelta de tuerca m¨¢s se da en el hecho de que la gran mayor¨ªa de los presos que podr¨ªan ser libres ma?ana son ciudadanos de Yemen y Washington no quiere enviarlos a su pa¨ªs de origen debido a la inestabilidad de esa naci¨®n.

La prisi¨®n tiene 166 reclusos, la mayor¨ªa de los cuales llevan encerrados sin cargos desde que se cre¨® el centro de detenci¨®n en enero de 2002

Los abogados de los presos que participan en la huelga de hambre han dejado saber que la salud de sus clientes se est¨¢ deteriorando de forma alarmante y que algunos de ellos han perdido entre 10 y 15 kilos. Tanto es as¨ª, que los m¨¦dicos de la c¨¢rcel est¨¢n obligando a esos reclusos a ingerir l¨ªquidos insert¨¢ndoles tubos a trav¨¦s de la nariz y la laringe. Dos de los reos en huelgas presentaban serios cuadros de deshidrataci¨®n, apunt¨® Robert Duran, portavoz del centro de detenci¨®n.

El general Kelly, que asumi¨® su cargo el pasado noviembre, insiste en la teor¨ªa de la frustraci¨®n y dice que los prisioneros ¡°comen algo, aunque no mucho¡±. El militar tambi¨¦n apunta a que es muy dif¨ªcil saber qu¨¦ preso se alimenta y cual no ya que hacen sus almuerzos de forma comunal, lo que complica saber qui¨¦n no ha tomado nueve comidas consecutivas, lo que define una huelga de hambre en Guant¨¢namo. Kelly apunt¨® a que, a veces, esos presos toman tentempi¨¦s en sus celdas.

¡°Creo que quieren remover el avispero¡±, dijo Kelly, ¡°que los medios sepan de su situaci¨®n¡±. En su opini¨®n, el anuncio en 2009 de Barack Obama nada m¨¢s asumir la presidencia de que iba a cerrar Guant¨¢namo en el plazo de un a?o les hizo concebir esperanzas. Pero el Congreso bloque¨® los esfuerzos para el cierre y ha hecho imposible la reubicaci¨®n de los presos en c¨¢rceles norteamericanas. Tras su reelecci¨®n, Obama no hizo menci¨®n de Guant¨¢namo ni es su discurso inaugural de enero ni en el del estado de la Uni¨®n en febrero, que fue visto por algunos presos por televisi¨®n. Adem¨¢s, en enero, la oficina del Departamento de Estado encargada de la reubicaci¨®n de los presos de Guant¨¢namo fue cerrada.

Mantener abierto el centro de detenci¨®n de Guant¨¢namo cuesta cada a?o 114 millones de d¨®lares, lo que equivale a cerca de 690.000 d¨®lares por preso, seg¨²n datos oficiales. Eso representa unas 20 veces m¨¢s de lo que la Oficina de Prisiones de Estados Unidos gasta por preso en sus c¨¢rceles de m¨¢xima seguridad.