Rumbo a Siria Kal¨¢shnikov en mano

Kal¨¢shnikov en mano, cinta negra en la frente, chaleco militar y ropa de camuflaje, varios j¨®venes se entrenan en el campo de refugiados palestinos de Ein El Helwe, en el sur de L¨ªbano. En medio de una plantaci¨®n de bananas, a medio d¨ªa y bajo la mirada de un grupo de ni?os que se re¨²nen a varios metros de prudente distancia, se preparan ya sin esconderse los combatientes de las facciones islamistas que m¨¢s tarde se unir¨¢n a los rebeldes sirios. Es una imagen que se reproduce cada vez m¨¢s abiertamente en diferentes zonas del L¨ªbano, mientras las divisiones entre sun¨ªes y chi¨ªes libaneses se agrandan con Siria como de tel¨®n de fondo.

En la localidad de Ersal son sun¨ªes los que se entrenan, para unirse a los rebeldes sirios. En el resto del valle de la Bekaa son los miembros de Hezbol¨¢ los que cruzan habitualmente la frontera en apoyo al r¨¦gimen de Bachar el Asad, arrastrando con ellos diariamente al L¨ªbano un paso m¨¢s adentro en la guerra civil siria. Hezbol¨¢ controla militarmente tanto el sur del pa¨ªs en la frontera con Israel, como el este, en la frontera con Siria. Desde all¨ª, la milicia ha organizado su apoyo a las tropas de El Asad en la reciente toma de la localidad siria de Qusair.

La regi¨®n del valle de la Bekaa es por la que hist¨®ricamente Ir¨¢n ha abastecido en armamento a la milicia chi¨ª con el apoyo log¨ªstico de Siria y con el fin ¨²ltimo de combatir a Israel. El reciente bombardeo israel¨ª de dos cargamentos en las inmediaciones de Damasco con destino a Hezbol¨¢ se suma a los del Ej¨¦rcito rebelde para reducir la capacidad armament¨ªstica de la milicia.

De la periferia chi¨ª de Beirut, Hassan considera seguir los pasos de su hermano y ¡°luchar en Siria contra los terroristas que est¨¢n ejecutando a chi¨ªes¡±. Para ¨¦l, en la veintena y estudiante de farmacia, perder al r¨¦gimen de El Asad supondr¨ªa ¡°debilitar la resistencia y por lo tanto la oposici¨®n a Israel¡±, el motivo mismo por el que naci¨® y perdura desde 1982 la milicia chi¨ª Hezbol¨¢.

Sobre el terreno se cifran entre 2.000 y 2.500 los combatientes que han cruzado la porosa frontera para combatir en Siria. El n¨²mero de milicianos ca¨ªdos, enterrados como m¨¢rtires, no deja de aumentar. Subhi Al-Tufaili, antiguo secretario general de Hezbol¨¢, cifr¨® recientemente en 138 los hombres de su milicia muertos en Siria. A esos hay que a?adir los 30 milicianos muertos desde el domingo en Qusair.

Es en la ciudad siria de?Qusair donde Hezbol¨¢, miembro de la coalici¨®n pol¨ªtica que gobierna al L¨ªbano, proporciona el mayor apoyo al r¨¦gimen de El Asad y sufre las mayores p¨¦rdidas. ¡°En?Qusair se libra desde hace meses la gran batalla donde centenares de hombres de Hezbol¨¢, junto con el Ej¨¦rcito sirio, lucha contra rebeldes, incluidos libaneses y miembros del Frente Al Nusra¡±, asegura Abu Abdal¨¢, liban¨¦s a cargo de reclutar j¨®venes para mantener la resistencia de Quseir.

La localidad de Ersal, excepci¨®n sun¨ª en medio de la Bekaa, que es mayoritariamente chi¨ª, proporciona campos de entrenamiento para libaneses y descanso para rebeldes sirios, que eventualmente cruzan de vuelta a?Qusair para luchar. ¡°El ej¨¦rcito sirio ha tenido que retirar sus efectivos de la frontera con L¨ªbano para reforzar los combates en la periferia de Damasco. Ahora es Hezbol¨¢ quien suple y patrulla dentro de L¨ªbano para impedir el pasaje de rebeldes y armas en la Bekaa¡±, asegura Mohamed Khatteb, combatiente del Ej¨¦rcito Libre Sirio (ELS) y encargado de abastecer a los hombres de armamento.

Los bombardeos cruzados contra cargamentos de lado a lado de la frontera sirio-libanesa se han convertido en un tr¨¢mite habitual desde el inicio del conflicto. El Ej¨¦rcito sirio bombardea los convoyes de armas enviados por grupos sun¨ªes-libaneses para abastecer a los rebeldes sirios. Por su parte, el ELS ataca desde Siria las posiciones de Hezbol¨¢ que se repliegan al L¨ªbano tras el combate.

En un discurso hace dos semanas, el l¨ªder de Hezbol¨¢, Hasan Nasral¨¢, mostr¨® por vez primera un apoyo militar t¨¢cito al r¨¦gimen sirio, al asegurar que ¡°Siria proveer¨¢ a Hezbol¨¢ con armas capaces de cambiar el juego¡± y de ¡°alimentar a la resistencia en las zonas del Gol¨¢n ocupadas por Israel¡±. Esas declaraciones han desatado duras cr¨ªticas por parte de la oposici¨®n libanesa, que exige a Hezbol¨¢ que se decante bien por los intereses del L¨ªbano o por los de Siria. Y ello ante unos comicios previstos para junio, que corren el riesgo de ser pospuestos de nuevo.