Una ONG pide a Rousseff que hable de su pasado como torturada

Al tiempo que la prensa mundial daba la noticia de la muerte de uno de los dictadores m¨¢s crueles de Am¨¦rica Latina, el exgeneral argentino Jorge Rafael Videla, Amnist¨ªa Internacional (AI) ped¨ªa a la presidenta brasile?a Dilma Rousseff que, en el marco del primer a?o de trabajo de la Comisi¨®n de la Verdad, cuente su experiencia como militante torturada durante la dictadura militar y se comprometa ante los brasile?os a acabar definitivamente con la tortura.

¡°?Cual no ser¨ªa el impacto si la presidenta Dilma Rousseff contara su experiencia en p¨²blico!¡±, cuestiona el an¨¢lisis sobre los trabajos de la Comisi¨®n de la Verdad que est¨¢ por concluir sus investigaciones sobre las sombras de la dictadura militar brasile?a (1964-1985).

La opini¨®n de AI sobre los trabajos de dicha Comisi¨®n ¡ª¡°la ¨²ltima de las 40 creadas en los ¨²ltimos 30 a?os¡±¡ª no es del todo positivo. La ONG hubiese preferido que, por ejemplo, las audiencias p¨²blicas con extorturadores se difundieran a trav¨¦s de la televisi¨®n y que la presidenta hubiese tenido un papel m¨¢s protag¨®nico. Tambi¨¦n critica que Brasil, en relaci¨®n con otros pa¨ªses, se tard¨® en crear esta comisi¨®n.

Sin embargo, AI reconoce que la Comisi¨®n de la Verdad de Brasil ha conseguido resultados positivos, como la revelaci¨®n de los actos violentos cometidos contra pueblos ind¨ªgenas o el esclarecimiento del atentado contra el periodista Vladimir Herzog, que revel¨® que se hab¨ªa tratado de un asesinato y no un suicidio, como indicaba la versi¨®n oficial.

Para AI, la Comisi¨®n de la Verdad podr¨ªa ser una ¡°oportunidad ¨²nica de romper con los patrones de violaciones de los derechos humanos¡± que, afirma, ¡°a¨²n persisten en muchas instancias del Estado¡±.

El problema de la Comisi¨®n de la Verdad de Brasil es que ya no pueden ser condenados los torturadores a¨²n vivos ya que, al acabar la dictadura, el Gobierno democr¨¢tico les concedi¨® una amnist¨ªa. Pese a que algunos han tildado de anticonstitucional este acuerdo, bajo el argumento de que los cr¨ªmenes de lesa humanidad no prescriben, el Supremo brasile?o ha fallado a favor de mantenerla.

La Comisi¨®n se limita solamente a esclarecer los hechos violentos ocurridos en aquellos a?os, para consuelo de muchos familiares que a¨²n no saben d¨®nde est¨¢n los restos de sus seres queridos.

Los militares que est¨¢n colaborando con el Gobierno se quejan de que la Comisi¨®n no ha querido investigar los cr¨ªmenes cometidos por los grupos de extrema izquierda que quer¨ªan entonces, seg¨²n ellos, instaurar en Brasil, una dictadura del proletariado al modo de Cuba, donde muchos de aquellos guerrilleros fueron a entrenarse militarmente.