La oposici¨®n guineana denuncia el acoso del r¨¦gimen de Obiang ante las elecciones

Las calles de las principales ciudades del pa¨ªs llenas de polic¨ªas, militares e incluso tanques, un mitin del partido de la oposici¨®n al que acude un helic¨®ptero de la Gendarmer¨ªa Nacional y sobrevuela a escasos metros sobre las cabezas de los participantes, p¨¢ginas web y cuentas de Facebook bloqueadas y una decena de opositores intimidados y detenidos por intentar organizar una manifestaci¨®n. Esas son las im¨¢genes que muestran las televisiones y las agencias y webs informativas estos d¨ªas de Guinea Ecuatorial, donde el pr¨®ximo domingo se celebran elecciones legislativas y municipales de las que nadie duda cu¨¢l ser¨¢ el resultado: una nueva y aplastante victoria del Partido Democr¨¢tico de Guinea Ecuatorial (PDGE) del presidente Teodoro Obiang, el jefe de Estado que m¨¢s tiempo lleva en el poder de toda ?frica 34 a?os el pr¨®ximo agosto) y que gobierna este peque?o pa¨ªs con mano de hierro.

Las detenciones de los ¨²ltimos d¨ªas, que a veces duran unas pocas horas y casi siempre d¨ªas o semanas sin las m¨ªnimas garant¨ªas procesales y tienen por principal objeto la intimidaci¨®n, han llamado la atenci¨®n de la comunidad y la prensa internacional, pero el acoso a opositores es algo muy frecuente en este pa¨ªs y se intensifica en cada proceso electoral. ¡°Los ciudadanos de Guinea Ecuatorial nunca han participado en unas elecciones justas y democr¨¢ticas¡±, asegura Tutu Alicante, director de la ONG EGJustice, que, junto a Human Rights Watch y Amnist¨ªa Internacional, ha hecho p¨²blico un comunicado advirtiendo de que no se dan las circunstancias de libertades y respeto a los derechos fundamentales para que pueda haber unas elecciones cre¨ªbles.

En este ambiente de enorme hostilidad y con el r¨¦gimen bloqueando la aparici¨®n de partidos independientes, solo hay un grupo pol¨ªtico de oposici¨®n al que se permite concurrir a los comicios. Se trata de Convergencia para la Democracia Social (CPDS), cuyo secretario general, Pl¨¢cido Mic¨®, es el ¨²nico diputado que aparece como voz cr¨ªtica en la C¨¢mara de Representantes del Pueblo (Parlamento).

El resto de la oposici¨®n ha sido debilitada por el propio r¨¦gimen, est¨¢ fuera del juego pol¨ªtico o se encuentra en el exilio, la mayor¨ªa de ellos en Espa?a. Pero con un censo electoral inaccesible, la junta electoral controlada desde el poder, la ausencia de observadores internacionales, la falta de medios financieros y, sobre todo, con la intimidaci¨®n y el miedo como arma pol¨ªtica del PDGE y de sus partidos sat¨¦lites, el CPDS tiene escasas opciones. Por poner un ejemplo, el r¨¦gimen promueve el voto patri¨®tico (mostrar la papeleta) y a quien no lo hace se le acusa de votar a la oposici¨®n.

Hay mucha tensi¨®n. Esto puede estallar en cualquier momento" Wenceslao Mansongo, portavoz del opositor CPDS

?Para qu¨¦ unas elecciones entonces? ¡°Pues para mostrar un rostro democr¨¢tico de cara a la galer¨ªa, todo es una farsa¡±, aseguran desde la oposici¨®n. Wenceslao Mansongo, responsable de Relaciones Externas del CPDS, ha sufrido en persona el acoso y la c¨¢rcel. ¡°Decidimos presentarnos a las elecciones para demostrar al mundo que dentro de Guinea Ecuatorial hay personas decididas a enfrentarse a la dictadura a pesar de todas las dificultades y la represi¨®n. La comunidad internacional nos ayudar¨¢ cuando nos vea actuar, no cuando estemos esperando la providencia divina con los brazos cruzados¡±, asegura Mansongo.

La fuerza de Teodoro Obiang procede del petr¨®leo. Guinea Ecuatorial es un pa¨ªs peque?o, uno de los m¨¢s peque?os de ?frica, pero posee una rica plataforma costera de donde salen unos 300.000 barriles de crudo al d¨ªa. Los contratos firmados con las grandes petroleras estadounidenses, como Exxon-Mobil y Chevron-Texaco, entre otras, hacen que la mayor parte del oro negro viaje hacia Estados Unidos, lo que, en buena medida, ha blindado al dictador, que es una especie de amigo inc¨®modo de las potencias occidentales.

Hace dos semanas, Obiang estuvo de visita en Washington. Sin embargo, no fue invitado al Departamento de Estado, como es habitual, y solo fue a encontrarse con ¨¦l a su hotel un representante de segundo nivel del Gobierno. Las evidencias de falta de democracia, arbitrariedades y violaciones de los derechos humanos son enormes, pero el petr¨®leo, cuyos beneficios van a parar casi en exclusiva a Obiang y su familia, el clan de Mongomo, manda.

As¨ª las cosas, los ¨²nicos cambios parece que solo pueden venir desde dentro del r¨¦gimen. Los constantes rumores, nunca confirmados, sobre el fr¨¢gil estado de salud del presidente, a punto de cumplir 71 a?os, han disparado las especulaciones sobre un posible relevo en el poder. ¡°Su enfermedad es conocida por los ecuatoguineanos, sabemos de sus viajes a cl¨ªnicas extranjeras para tratarse¡±, asegura un opositor residente en Malabo. Y el mejor posicionado para sucederle es su propio hijo, Teodoro Nguema Obiang, conocido como Teodor¨ªn, quien cuenta sobre todo con el aval de su madre y primera dama.

De hecho, la ¨²ltima reforma constitucional impulsada por el propio jefe del Estado y aprobada en 2011 mediante refer¨¦ndum no solo vino a reforzar el poder omn¨ªmodo de Obiang, adem¨¢s de crear un Senado para el que ahora se eligen por primera vez representantes, sino que cre¨® la figura de un vicepresidente segundo responsable de Defensa que recay¨® en la persona de Teodor¨ªn. Sin embargo, en Guinea Ecuatorial y dentro del propio entorno de Obiang hay muchas personas que le consideran poco apto para suceder a su padre. En su contra juegan sobre todo los problemas que est¨¢ teniendo con la justicia francesa y estadounidense, que rastrean el origen de sus lujosas propiedades, que van desde un jet privado hasta un chal¨¦ en Malib¨². El a?o pasado, la Fiscal¨ªa de Par¨ªs emiti¨® una orden de arresto contra ¨¦l por malversaci¨®n de fondos p¨²blicos.

Entre los aspirantes alternativos a la jefatura del Estado se encuentra el propio hermano del dictador, Armengol Ondo Nguema, uno de los hombres m¨¢s influyentes del clan de Mongomo y jefe de la seguridad nacional, clave para garantizar la continuidad del r¨¦gimen.

Pero mientras en palacio afilan discretamente los cuchillos para una hipot¨¦tica sucesi¨®n que en realidad nadie sabe cu¨¢ndo llegar¨¢, lo cierto es que los ecuatoguineanos siguen sufriendo el ambiente irrespirable de un r¨¦gimen monol¨ªtico. El pasado martes, el propio Teodoro Obiang ofrec¨ªa una rueda de prensa en la que se mostraba ¡°satisfecho¡± del desarrollo de la campa?a, asegurando que ¡°hemos podido superar algunas deficiencias que sufr¨ªamos en el pasado¡±, y acusaba a la prensa europea de difundir informaciones falsas sobre su pa¨ªs. Sin embargo, el opositor Mansongo revela otra realidad: ¡°El Gobierno quiere impedirnos hacer campa?a, intenta acallarnos y a la vez pretende dar la apariencia ante el mundo de que estamos ante un proceso pac¨ªfico. Pero no es as¨ª, hay mucha tensi¨®n, esto puede estallar en cualquier momento¡±.