La descalificaci¨®n de dos candidatos calienta la campa?a electoral iran¨ª
El presidente Ahmadineyad tacha de "opresi¨®n" la descalificaci¨®n de su jefe de gabinete, a quien confiaba en colocar al no poder optar ¨¦l mismo a un tercer mandato
La campa?a electoral iran¨ª arranca con pol¨¦mica. Ninguno de los dos prominentes candidatos descalificados ha encajado bien la decisi¨®n del Consejo de Guardianes. Pero mientras Esfandiar Rahim Mashaei, el controvertido jefe de gabinete del presidente Mahmud Ahmadineyad, ya ha anunciado que va a recurrir, el veterano Ali Akbar Hachemi Rafsanyani guarda silencio y deja que sean sus simpatizantes quienes aireen su malestar. No necesita vociferar la evidente contradicci¨®n de que un hombre que fue la mano derecha de Jomeini en el establecimiento de la Rep¨²blica Isl¨¢mica y dos veces su presidente haya sido considerado no apto para volver a ese cargo.
Ahmadineyad ha defendido a su protegido y tachado su descalificaci¨®n como un acto de ¡°opresi¨®n¡±, en un comentario colgado en su p¨¢gina web esta ma?ana. Anoche, el portavoz de la Oficina Electoral del Ministerio del Interior, Solad Mortazavi, oficializ¨® la filtraci¨®n que hab¨ªa circulado durante todo el d¨ªa al confirmar que s¨®lo ocho de los 686 aspirantes inscritos para las presidenciales del 14 de junio hab¨ªan recibido la aprobaci¨®n del Consejo de Guardianes. Mashaei no estaba entre ellos, lo que supone un rev¨¦s para las ambiciones del presidente, que no puede presentarse a un tercer mandato y confiaba en colocar a su aliado.
Tanto Ahmadineyad como Mashaei han hecho saber que van a recurrir al l¨ªder supremo, quien tiene la ¨²ltima palabra en todos los asuntos pol¨ªticos. Eso s¨ª, a pesar de los rumores, el frustrado candidato ha dejado claro que intenta ¡°resolver la cuesti¨®n con buena voluntad¡± y por ¡°las v¨ªas legales¡±, seg¨²n informa la agencia Fars. De antemano, y ante la posibilidad de esta situaci¨®n, ya hab¨ªa declarado que no pensaba ¡°armar barullo en la calle, porque con des¨®rdenes callejeros no se consigue nada¡±.
Sus palabras parecen una referencia a las manifestaciones que desat¨® la reelecci¨®n de Ahmanineyad en 2009 y que es justamente lo que la nomenclatura iran¨ª quiere evitar en esta nueva convocatoria restringiendo la participaci¨®n a candidatos no s¨®lo leales al r¨¦gimen sino a su n¨²cleo m¨¢s duro. Rafsanyani se neg¨® a condenar aquellas protestas, las mayores que ha vivido el pa¨ªs desde la revoluci¨®n de 1979, e incluso fue acusado de alentarlas por algunos de los muchos enemigos que se ha buscado a lo largo de su dilatada carrera pol¨ªtica. Ahora, a pesar que intent¨® recomponer su relaci¨®n con el l¨ªder supremo, le tachaban de candidato encubierto de los reformistas.
Pero el veterano pol¨ªtico es un pilar del r¨¦gimen. Una hija de Jomein¨ª, Zahra Mostafavi, ha salido en su defensa y en una carta abierta al l¨ªder supremo, Ali Jamenei, le ha pedido que intervenga para ¡°remediar ese error¡±. Sin duda, la decisi¨®n del Consejo de descartar la candidatura de Rafsanyani reduce la credibilidad del proceso electoral. Mientras la descalificaci¨®n de Mashaei era generalmente esperada, la del veterano pol¨ªtico, considerado uno de los pilares del r¨¦gimen, ha supuesto un golpe para muchos iran¨ªes. Y no porque no hubiera indicios de que tal era el objetivo de los tradicionalistas que monopolizan el poder.
La lista de los finalmente aprobados incluye al jefe negociador nuclear, Said Yalili; al alcalde de Teher¨¢n, Mohamed Qalibaf; al expresidente del Parlamento Gholam-Ali Haddad-Adel; al exministro de Exteriores Ali Akbar Velayati, y otros cuatro candidatos de relleno. Todos ellos figuras conservadoras de probada lealtad al l¨ªder supremo, Ali Jamene¨ª, y al sistema de velayat-e-faqih que justifica la capacidad de veto de la m¨¢xima autoridad sobre las instituciones elegidas. Qalibaf, Velayati y Haddad-Adel, agrupados bajo la Coalici¨®n Principalista de los Tres, han dicho que se retirar¨ªan de la campa?a si el Consejo aprobaba la candidatura de Yalili.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.