La OTAN decidir¨¢ en una cumbre la presencia en Afganist¨¢n despu¨¦s de 2014

Estados Unidos y la OTAN decidir¨¢n el a?o pr¨®ximo en una cumbre las condiciones definitivas para la retirada de las tropas extranjeras de Afganist¨¢n, prevista para finales de 2014, y la dotaci¨®n de fuerzas que quedar¨¢ en ese pa¨ªs para entrenar a los soldados afganos y evitar el colapso del Gobierno actual.

La decisi¨®n fue anunciada al t¨¦rmino de una reuni¨®n en Washington entre el presidente norteamericano, Barack Obama, y el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen. A¨²n no se ha fijado fecha exacta ni lugar para la celebraci¨®n de esa cumbre, con la que se pondr¨¢ fin a una misi¨®n de m¨¢s de una d¨¦cada iniciada tras el ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001.

EE UU, que actualmente tiene alrededor de 62.000 soldados en Afganist¨¢n, ha asegurado que continuar¨¢ su presencia all¨ª hasta el final del a?o pr¨®ximo, pero no ha anunciado a¨²n el ritmo de la retirada. Algunos pa¨ªses de la OTAN ¨Cen total hay unos 34.000 hombres y mujeres- han optado por una salida antes de esa fecha, mientras que otros se han comprometido a continuar en la misi¨®n hasta el ¨²ltimo d¨ªa.

La Administraci¨®n norteamericana intenta que la retirada se haga de la forma m¨¢s coordinada posible y ha solicitado la colaboraci¨®n de Rasmussen para que la OTAN asuma esa coordinaci¨®n hasta el final de la operaci¨®n.

Ser¨¢ una misi¨®n muy diferente, un misi¨®n no de combate con un n¨²mero de tropas significativamente m¨¢s bajo¡± Anders Fogh Rasmussen, secretario general de la OTAN

Otro punto de controversia sobre la presencia en Afganist¨¢n es el del papel que la Alianza Atl¨¢ntica tendr¨¢ a partir del 1 de enero de 2015, cuando la misi¨®n est¨¦ ya formalmente concluida. EE UU ha anticipado que mantendr¨¢ un n¨²mero determinado de soldados exclusivamente dedicados a operaciones espec¨ªficas antiterroristas y para la instrucci¨®n del Ej¨¦rcito afgano, pero no ha encontrado hasta ahora mucho apoyo entre otros miembros de la OTAN para colaborar en esa labor.

La cumbre convocada este viernes podr¨ªa servir para elaborar una estrategia com¨²n de cara a despu¨¦s de 2014. ¡°Ser¨¢ una misi¨®n muy diferente, un misi¨®n no de combate con un n¨²mero de tropas significativamente m¨¢s bajo¡±, dijo este viernes Rasmussen.

Cuando se fij¨® el final de 2014 para el t¨¦rmino de la misi¨®n actual, se contaba con que Afganist¨¢n tendr¨ªa ya un Ej¨¦rcito capaz de defenderse por s¨ª solo y habr¨ªa remitido la presi¨®n militar de los talibanes. Lo cierto es que ninguna de esas dos cosas han ocurrido, al menos en la dimensi¨®n esperada. El Ej¨¦rcito afgano est¨¢ todav¨ªa en un estado bastante precario y sigue siendo f¨¢cil de infiltrar por los radicales. Varios de los soldados de la OTAN muertos en los ¨²ltimos meses lo han sido a manos de tropas regulares afganas.

En cuanto al avance de los talibanes, aunque ¨¦stos no han conseguido poner la situaci¨®n militar a su favor, no se descarta que puedan hacerlo en cuanto salgan las fuerzas extranjeras. Para evitarlo, se cuenta con la posibilidad de unas negociaciones de paz en Afganist¨¢n antes de la retirada de la OTAN. Este mismo jueves, sin embargo, el mando talib¨¢n en Pakist¨¢n rechaz¨® esas negociaciones como reacci¨®n a la muerte de uno de sus principales l¨ªderes por un ataque de drones de EE UU.