EE UU demora un a?o la aplicaci¨®n de una parte esencial de la reforma sanitaria
El retraso de la medida que penaliza a los empresarios que no aseguren a los empleados se considera una victoria de los republicanos
El Gobierno de Estados Unidos ha decidido demorar en un a?o la entrada en vigor de las disposiciones de la reforma sanitaria que sancionaban econ¨®micamente a los empresarios que no aseguraran a sus empleados. La decisi¨®n de posponer una parte esencial de la nueva legislaci¨®n de salud impulsada por el presidente Barack Obama supone una importante concesi¨®n a la patronal y al Partido Republicano, que hab¨ªa advertido de la incapacidad de la Administraci¨®n de aplicar la legislaci¨®n y de su efecto perjudicial para los propietarios de las peque?as y medianas empresas.
De acuerdo con la ley, a partir del 1 de enero de 2014, todos los titulares de empresas con m¨¢s de 50 empleados estaban obligados a dar cobertura sanitaria a todos ellos a tiempo completo o pagar una multa de 2.000 d¨®lares anuales por cada trabajador no asegurado. La decisi¨®n de retrasar un a?o la media se anunci¨® a ¨²ltima hora de la tarde del martes a trav¨¦s de la p¨¢gina web del Departamento del Tesoro, encargado de la aplicaci¨®n de esta parte de la reforma sanitaria, justificando la iniciativa en las dificultades de los empresarios para adaptarse a la nuevas reglas. ¡°Estamos escuchando a los titulares de los negocios", explic¨® poco despu¨¦s Valerie Jarrett, la principal asesora de Obama, en su blog.
A partir del 1 de enero de 2014, todos los titulares de empresas con m¨¢s de 50 empleados estaban obligados a dar cobertura sanitaria a todos ellos a tiempo completo o pagar una multa de 2.000 d¨®lares anuales por cada trabajador no asegurado
La decisi¨®n no afecta a la mayor¨ªa de las empresas de EE UU -el 96%, seg¨²n la Casa Blanca- que emplea a menos de 50 trabajadores, y que ya estaba exento de la obligaci¨®n de ofrecer cobertura m¨¦dica a toda su plantilla, y tampoco perjudica a otras disposiciones esenciales de la ley, como la que penaliza a los particulares que no hayan contratado una p¨®liza m¨¦dica en 2014, pero supone un duro rev¨¦s para la Casa Blanca, ya que cuestiona su capacidad para poder ejecutar una de las leyes estrella del primer mandato de Obama y supone un obst¨¢culo para las aspiraciones dem¨®cratas en las elecciones al Congreso de 2014, ofreciendo a los republicanos nueva munici¨®n sobre la ineficacia de los progresistas con la que atacar durante la campa?a a los candidatos m¨¢s d¨¦biles.
Los pol¨ªticos republicanos m¨¢s cr¨ªticos con la reforma sanitaria de Obama reaccionaron inmediatamente al anuncio del Gobierno. El portavoz de la C¨¢mara de Representantes, John Boehner, asegur¨® en un tuit que la ¡°Obamacare [la forma peyorativa con la que la oposici¨®n se refiere a la nueva legislaci¨®n de salud] es un tren descarrilado¡±. El l¨ªder de la minor¨ªa en el Senado, Mitch McConnell, emiti¨® un comunicado en el que puntualizaba que la ¡°Obamacare es muy costosa y no est¨¢ funcionando como la Administraci¨®n hab¨ªa prometido¡±.
La Administraci¨®n preve¨ªa, gracias a esta medida, reducir el d¨¦ficit en 5.000 millones de d¨®lares
La respuesta dem¨®crata ha sido mucho m¨¢s t¨ªmida. A trav¨¦s de su portavoz, Harry Reid, el l¨ªder de la mayor¨ªa dem¨®crata en la c¨¢mara Alta, se?alaba que con esta decisi¨®n la Administraci¨®n demostraba su ¡°deseo de ser flexible¡± y puntualizaba que ¡°es mejor aplicar la ley bien que hacerlo r¨¢pido¡±. Este martes, Nancy Pelosi, la l¨ªder de la minor¨ªa en la C¨¢mara de Representantes y una de las principales impulsoras de la reforma, defendi¨® la demora asegurando que el Gobierno estaba siendo "responsable" con los empresarios y minimiz¨® el impacto de la iniciativa asegurando que "s¨®lo el 4% de los empleadores se ver¨ªan afectados".
Esta disposici¨®n suscit¨® la oposici¨®n de los empresarios desde que la reforma sanitaria fuera aprobada en 2010. Muchos amenazaron con sustituir a los empleados a tiempo completo por contratados a tiempo parcial -la norma se aplica a quienes trabajan un m¨ªnimo de 30 horas-, para eludir las consecuencias econ¨®micas de la medida. En los ¨²ltimos meses, varios grupos empresariales, apoyados por legisladores, han tratado de presionar a la Administraci¨®n para que la norma se aplicara a los trabajadores con un horario de 40 horas.
Las consecuencias de esta decisi¨®n no son s¨®lo pol¨ªticas. El costo para las arcas p¨²blicas puede ser enorme. El mandato individual, la disposici¨®n que exige a todos los estadounidenses estar asegurados a partir del 1 de enero de 2014 o pagar una multa, establece la obligaci¨®n a la Administraci¨®n -bien la federal, bien la estatal o un combinado de ambas- de asumir la cobertura de, entre otros, aqu¨¦llos a quienes sus empleadores no les garanticen una p¨®liza. Con la demora, muchos trabajadores cumplir¨¢n los requisitos para optar a los beneficios m¨¦dicos p¨²blicos. Adem¨¢s, la Administraci¨®n preve¨ªa, gracias a esta medida, reducir el d¨¦ficit en 5.000 millones de d¨®lares, de acuerdo con la estimaci¨®n de la Oficina Presupuestaria del Congreso. De esta manera, el Gobierno no s¨®lo pierde ingresos, sino que se ver¨¢ obligado a pagar m¨¢s subsidios.
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