Egipto se asoma al conflicto civil

La muerte de 51 partidarios del presidente depuesto de Egipto, Mohamed Morsi, en un ataque de la polic¨ªa y las Fuerzas Armadas coloc¨® ayer al pa¨ªs al borde de un conflicto civil, con los grupos islamistas llamando a un levantamiento nacional en contra del golpe de Estado y con la legitimidad y unidad del nuevo Gobierno de transici¨®n seriamente da?adas. Desde su feudo de Ciudad Nasser, el distrito de El Cairo en el que han acampado, los Hermanos Musulmanes prometieron intensificar su campa?a de protesta popular tras la matanza. Por su parte, el nuevo presidente interino aupado por los militares, el juez Adli Mansur, emiti¨® un decreto en el que se concedi¨® la facultad de emitir leyes y estableci¨® los plazos para renovar las instituciones. Habr¨¢, seg¨²n ese calendario, un refer¨¦ndum constitucional en cuatro meses y medio, y elecciones legislativas en seis.

"El Gobierno del golpe fascista ha cometido una clara masacre contra manifestantes a favor de Morsi y de la democracia durante los rezos de la madrugada, con balas del Ej¨¦rcito", dijo ayer Esam el Erian, vicepresidente del Partido Justicia y Libertad, brazo pol¨ªtico de los Hermanos Musulmanes. Mantiene esa formaci¨®n pol¨ªtica que sus simpatizantes fueron primero atacados por personas armadas vestidas de paisano que luego dieron el relevo a las fuerzas del orden, que cargaron con gas lacrim¨®geno, perdigones y disparos. El partido isl¨¢mico se refiri¨® en un comunicado al ataque como parte de "una exterminaci¨®n masiva de manifestantes pac¨ªficos".

Las versiones sobre lo que ocurri¨® en la madrugada de ayer en la avenida Tayaran, que conduce al cuartel general de la Guardia Republicana en El Cairo -donde el Ej¨¦rcito retiene a Morsi-, son contradictorias. Los partidarios de Morsi mantienen que fueron atacados mientras rezaban. El Ej¨¦rcito dijo a trav¨¦s de un portavoz, el coronel Ahmed Ali, que varios "terroristas" abrieron fuego contra los soldados e intentaron "asaltar" el cuartel para liberar a Morsi. La televisi¨®n estatal emiti¨® ayer un v¨ªdeo de un supuesto partidario de Morsi avanzando hacia los uniformados con una pistola en la mano. Al menos un soldado result¨® muerto.

El presidente interino Mansur asumi¨® ayer todos los poderes del nuevo Gobierno y, en un decreto, estableci¨® una serie de plazos concretos para elegir nuevo parlamento y ejecutivo en las urnas. En dos semanas se crear¨¢ un comit¨¦ para redactar enmiendas a la constituci¨®n de corte islamista aprobada en las urnas en diciembre, que los militares suspendieron el mi¨¦rcoles, d¨ªa del golpe de Estado. El nuevo texto enmendado deber¨¢ someterse a votaci¨®n en cuatro meses y medio. Tras su aprobaci¨®n en refer¨¦ndum, se convocar¨¢n las elecciones parlamentarias, antes de seis meses. Despu¨¦s de que se re¨²na el nuevo congreso, se convocar¨¢n las presidenciales.

De momento, las fuerzas opositoras que detentan el poder no han podido ponerse de acuerdo sobre qu¨¦ tipo de gobierno tendr¨¢n en este plazo transitorio. Mansur le ofreci¨® el puesto de primer ministro al premio Nobel de la Paz Mohamed el Baradei, para retirar despu¨¦s la oferta ante la negativa a aceptarlo del partido salafista Nur. Luego propuso que El Baradei fuera vicepresidente y que el puesto de primer ministro lo ocupara el abogado Ziad Baha el Din, fundador del Partido Social Dem¨®crata de Egipto. Nur volvi¨® a negarse.

Nur, segunda fuerza islamista del pa¨ªs, anunci¨® ayer que se retira de las negociaciones para formar ese Gobierno de transici¨®n. "No quedaremos callados ante la masacre que tuvo lugar frente al cuartel de la Guardia Republicana", dijo Nader Bakar, su portavoz, en un comunicado. "Quer¨ªamos evitar el derramamiento de sangre, pero la sangre ha sido ya derramada. As¨ª que anunciamos que ponemos fin a las negociaciones con las nuevas autoridades".

El portavoz de los Hermanos Musulmanes, Gehad el Hadad, pidi¨® a los pa¨ªses occidentales que "dicen defender la democracia" que "apoyen sin miramientos a aquellos que ganaron unas elecciones justas y libres", dej¨¢ndose de medias tintas. Un portavoz de Catherine Ashton, alta representante de la Uni¨®n Europea para Asuntos Exteriores, pidi¨® ayer a ambas partes en Egipto que eviten ¡°la escalada de la violencia". La portavoz del departamento de Estado norteamericano, Jen Psaki, pidi¨® la "m¨¢xima contenci¨®n" a las Fuerzas Armadas.

El pa¨ªs ha quedado dividido entre islamistas y sus oponentes, la brecha entre ambos m¨¢s profunda que nunca tras lo que se considera la mayor matanza en el pa¨ªs desde que cayera el r¨¦gimen de Hosni Mubarak, en 2011. Solo horas antes de la carga de las fuerzas de seguridad, decenas de miles de personas celebraban en la plaza de Tahrir la creaci¨®n de un nuevo Gobierno y la ca¨ªda de Morsi, en un ejercicio de gratitud al Ej¨¦rcito, que envi¨® a sus cazas y helic¨®pteros a sobrevolar a la multitud. En un par de ocasiones, los aviones militares trataron de dibujar un coraz¨®n en el cielo con las estelas de sus sistemas de propulsi¨®n, un gui?o a los detractores de Morsi.

"Nosotros no usamos la violencia contra los golpistas ni contra los soldados. Nos acercamos a ellos con nuestros pechos al descubierto", dijo ayer Safwat Hegazi, predicador y l¨ªder islamista cercano a la Hermandad. "Lo que sucedi¨® demuestra la depravaci¨®n del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que quiere dejar estas cuentas saldadas antes del comienzo del Ramad¨¢n. Pronto veremos muchas m¨¢s muertes", dijo. Ma?ana comienza el Ramad¨¢n, mes de ayuno para los musulmanes, algo que podr¨ªa calmar las tensiones en Egipto.