El cura callejero que no puede volver a Buenos Aires
Francisco recuerda sus d¨ªas en la capital argentina, pero descarta un pr¨®ximo regreso a Latinoam¨¦rica
Dice que siempre fue un cura callejero y que, ay, le encantar¨ªa seguir si¨¦ndolo. Mira con complicidad a los agentes de la Gendarmer¨ªa vaticana pidi¨¦ndoles que le rebajen el arresto domiciliario y, a juzgar por las sonrisas de los hombres del comandante Domenico Giani, parece que ya se los ha camelado tambi¨¦n a ellos. Los 75 periodistas del vuelo papal escrutan a Francisco a la caza de un gesto o una frase que desvele alguna clase de impostura. Pero el papa argentino habla en corto y por derecho. De todo¡ lo que le da la gana. Cuando una periodista brasile?a intenta que se meta por los laberintos del aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo ¡ª¡°?C¨®mo no ha hablado usted de eso en Brasil?¡±¡ª, Jorge Mario Bergoglio le deja muy claro que no hay nada nuevo, que ¨¦l sigue la doctrina de la Iglesia cat¨®lica, pero que ¡ªa diferencia de los obsesionados obispos espa?oles¡ª sus prioridades van por otro lado. La dif¨ªcil reforma de la Iglesia, la justicia social, el encuentro entre distintos¡
A la ida, una periodista mexicana le ret¨®, con las palabras justas y el acento perfecto, a que contestara a las preguntas de los periodistas, aunque no fueran santos de su devoci¨®n y se sintiera como en la jaula de los leones. Bergoglio dijo que a la vuelta. Y cumpli¨®. Alguno de los 20 periodistas que le preguntaron quisieron saber tambi¨¦n cu¨¢ndo iba a visitar sus pa¨ªses. El cl¨¢sico ¡°qu¨¦ hay de lo m¨ªo¡±. El Papa reflexion¨® en voz alta, de forma desordenada, sobre sus pr¨®ximos viajes: ¡°Definido no hay nada. Pero puedo hablar de cosas que estamos pensando. El 22 de septiembre, Cagliari. Despu¨¦s, el 4 de octubre, As¨ªs. Tambi¨¦n tengo en mente, dentro de Italia, ir un d¨ªa a ver a mi familia al Piamonte. Tomarme un avi¨®n por la ma?ana y volver en otro por la noche. Mis familiares, pobrecillos, que me llaman y todav¨ªa no he ido a verlos. Tenemos una buena relaci¨®n. Fuera de Italia, el patriarca Bartolomeo I quiere hacer un encuentro para conmemorar los 50 a?os del encuentro entre Aten¨¢goras y Pablo VI en Jerusal¨¦n. El Gobierno israel¨ª nos ha hecho una invitaci¨®n especial para ir a Jerusal¨¦n, el Gobierno de la Autoridad Palestina creo que lo mismo. Esto se est¨¢ pensando, a¨²n no se sabe si se har¨¢ o no se har¨¢¡±.
¡°A Am¨¦rica Latina¡±, a?ade, ¡°creo que no hay posibilidad de volver, porque el papa latinoamericano acaba de hacer el primer viaje a Latinoam¨¦rica¡ Adi¨®s, debemos de esperar un poco. Creo que se puede ir a Asia, pero est¨¢ todo en el aire. He recibido invitaciones para ir a Sri Lanka y a Filipinas. A Asia se debe ir. El papa Benedicto XVI no tuvo tiempo de ir a Asia, y es importante. Fue a Australia, Europa, Am¨¦rica, pero no a Asia. Pero para ir a Argentina yo creo que tendr¨¦ que esperar un poco, porque yo creo que todos estos viajes de los que le he hablado tienen una cierta prioridad¡±.
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