La inmigraci¨®n toma el relevo del movimiento por los derechos civiles
¡°No es el momento de celebrar, la lucha debe continuar¡±, declar¨® Martin Luther King III este s¨¢bado
¡°Si Martin Luther King estuviera vivo, hoy defender¨ªa la regularizaci¨®n de indocumentados¡±, asegur¨® el congresista John Lewis, el ¨²nico superviviente de los l¨ªderes que participaron en la Marcha sobre Washington de 1963. La m¨¢xima autoridad del movimiento por los derechos civiles en la actualidad, tambi¨¦n aprovech¨® su discurso el pasado s¨¢bado para relacionar la lucha por la igualdad con la de los 11 millones de ¡®sin papeles¡¯ que esperan convertirse en ciudadanos estadounidenses gracias a la reforma migratoria.
¡°En 1963 se march¨® por la igualdad, el progreso econ¨®mico y las mismas oportunidades para todos los ciudadanos, pero incluso entonces la inmigraci¨®n estuvo considerada como un elemento importante de la agenda del movimiento¡±, asegura en una entrevista para EL PA?S Cecilia Mu?oz, Directora de Pol¨ªtica Dom¨¦stica de la Casa Blanca.
La hispana de mayor rango en la Administraci¨®n Obama recuerda que el contexto del movimiento por la igualdad de todos los ciudadanos consider¨® que los derechos de los inmigrantes deb¨ªan formar parte de su lucha. La iniciativa que deriv¨® en la Ley de Derechos Civiles de 1964 y la Ley de Derecho a Voto de 1965, lograr¨ªa que el presidente Johnson firmara ese mismo a?o el Acta Nacional de Inmigraci¨®n. Seg¨²n Mu?oz, aquella ley ¡°reform¨® un sistema de inmigraci¨®n roto en muchos aspectos y que adem¨¢s estaba basado en criterios raciales¡±.
El acto conmemorativo del 50 aniversario del discurso ¡®I Have a Dream¡¯, pronunciado por Martin Luther King frente al Monumento a Lincoln, cont¨® con la presencia de l¨ªderes hispanos y religiosos que enmarcaron el movimiento por la reforma migratoria como la causa por los derechos civiles de la actualidad.
Hoy los dreamers poseen la autoridad moral del debate¡± sobre la reforma migratoria Cecilia Mu?oz, directora de Pol¨ªtica Dom¨¦stica de la Casa Blanca
Desde el mismo lugar donde intervino hace hoy 50 a?os, Lewis recordaba el reclamo de los inmigrantes haciendo un hueco a su causa en su discurso,. ¡°No tiene sentido que millones de personas sigan viviendo en las sombras¡±, afirm¨®. ¡°S¨¢quenles de las sombras y denles acceso a la ciudadan¨ªa¡±.
¡°Hoy marchamos para que todos sepan que la verdadera justicia debe incluir la reforma del sistema migratorio¡±, afirm¨® desde el estrado Janet Murgu¨ªa, presidenta del Consejo Nacional de La Raza (NCLR). Murgu¨ªa, como har¨ªa despu¨¦s Martin Luther King III, el primog¨¦nito del l¨ªder del movimiento que cambi¨® Estados Unidos en los a?os 60, reivindic¨® que el sue?o de su padre, lejos de cumplirse, ¡°todav¨ªa sigue vivo¡±.
¡°No es el momento de celebrar, la lucha debe continuar¡±, declar¨® King III, quien incluy¨® entre los objetivos pendientes para EE UU la reforma migratoria. ¡°Debemos aprobarla para terminar con el acoso que sufren nuestros hermanos y hermanas y proveerles de un camino a la ciudadan¨ªa¡±.
Desde la Casa Blanca, Mu?oz reconoce los paralelismos entre el movimiento por los derechos civiles, iniciados por grupos de estudiantes comprometidos con la no violencia, con el de los dreamers, los j¨®venes indocumentados que han realizado algunas de las campa?as m¨¢s efectivas a favor de la reforma migratoria, reconociendo que viven en el pa¨ªs de manera ilegal y protagonizando ellos mismos los actos de protesta.
¡°Los dreamers han demostrado gran valent¨ªa¡±, afirma Mu?oz. ¡°No han arriesgado sus vidas de la misma manera que los participantes en las marchas por la libertad, pero s¨ª lo han hecho al dar la cara por ellos mismos y arriesgarse a ser deportados a un pa¨ªs que no conocen¡±. Mu?oz asegura adem¨¢s que, de la misma manera en que j¨®venes como el ahora congresista John Lewis se convirtieron en l¨ªderes morales del movimiento por la igualdad, ¡°hoy los dreamers poseen la autoridad moral del debate¡± sobre la reforma migratoria.
Miles de estudiantes indocumentados han salido a la calle para reivindicar la oportunidad de convertirse en ciudadanos que les otorgar¨ªa una ley llamada Dream Act. El texto, pendiente de aprobaci¨®n desde el a?o 2000, cuando comenz¨® uno de los ¨²ltimos impulsos a la reforma del sistema de inmigraci¨®n estadounidense, refleja el largo camino que ha recorrido el movimiento por la reforma, como tambi¨¦n lo hizo el de los derechos civiles, antes de convertirse en el centro de atenci¨®n nacional.
¡°Estamos hablando de un movimiento que no acaba de nacer, sino que ha evolucionado y crecido desde hace una d¨¦cada¡±, afirma. Mu?oz era entonces la vicepresidenta legislativa de NCLR. ¡°Todo el mundo recuerda d¨®nde estaba el 11 de Septiembre de 2001, yo estaba en una sala de reuniones del Senado para estudiar un borrador de la misma ley que queremos aprobar ahora¡±. Y a pesar de la espera, la directora se muestra optimista acerca de las opciones de la legislaci¨®n. ¡°Saldr¨¢ adelante, pero sabemos que no ser¨¢ f¨¢cil¡±.
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