Naciones Unidas acusa al r¨¦gimen y a los rebeldes sirios de cr¨ªmenes de guerra

Mientras Estados Unidos y Rusia debaten sobre el futuro del arsenal qu¨ªmico del r¨¦gimen sirio, y dejan con ello en el aire una intervenci¨®n militar norteamericana, el conflicto sigue su curso, con m¨¢s de 100.000 muertos en 30 meses y un alarmante incremento de las masacres y los cr¨ªmenes de guerra. El ¨²ltimo informe del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, publicado este mi¨¦rcoles, alerta de la comisi¨®n sistem¨¢tica de masacres, ejecuciones sumarias, tortura y violaciones por parte del r¨¦gimen, que ha llegado a bombardear hasta hospitales. En el otro bando, cuanto m¨¢s tiempo discurre, m¨¢s se radicalizan los extremos de la oposici¨®n armada. En meses recientes las milicias islamistas, libremente afiliadas a Al Qaeda, han emprendido asesinatos y tortura en su campa?a de imposici¨®n de la ley isl¨¢mica en los retazos que logran controlar de un pa¨ªs donde el conflicto es ya la ¨²nica ley imperante.

La revuelta ha cumplido 30 meses sin que ninguna parte pueda anticipar una victoria segura. El r¨¦gimen controla f¨¦rreamente Damasco y las grandes ciudades, con la excepci¨®n de Alepo, y los rebeldes por su parte se han hecho con el control regiones en el norte y el este del pa¨ªs, con notables p¨¦rdidas en meses recientes, como la de Qusair, en la frontera con L¨ªbano. Con el conflicto enquistado, el presidente Bachar el Asad, quien esta semana ha ofrecido concesiones diplom¨¢ticas como la entrega de su arsenal qu¨ªmico, sigue bombardeando zonas rebeldes con medios tradicionales, como artiller¨ªa, misiles o fuego a¨¦reo. ¡°El conflicto se halla en punto muerto, con las dos partes en liza convencidas de que una victoria militar es posible¡±, asegura el informe.

Los investigadores dicen tener pruebas de que se ha detenido a numerosos menores de entre 15 y 18 a?os arbitrariamente en puestos de control.

Hoy admiti¨® el estrepitoso fallo de la diplomacia en Siria el propio secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, quien dijo en Nueva York en tono sobrio que ¡°el fracaso colectivo de evitar cr¨ªmenes atroces en Siria en los pasados dos a?os y medio permanecer¨¢ como un pesado lastre en el prestigio de la ONU y sus estados miembros¡±. A d¨ªa de hoy, la ONU sigue defendiendo que la soluci¨®n al conflicto sirio deber¨ªa ser pol¨ªtica y negociada, oponi¨¦ndose a armar a los rebeldes o a una intervenci¨®n militar al margen del Consejo de Seguridad. Aunque las gestiones diplom¨¢ticas en el seno de la ONU versan ahora sobre armas qu¨ªmicas, estas son responsables de no m¨¢s de un 2% de las v¨ªctimas en el conflicto.

El ¨²ltimo informe de la ONU lo ha elaborado la Comisi¨®n Independiente Internacional de Investigaci¨®n sobre Siria, liderada por el diplom¨¢tico brasile?o Paulo Sergio Pinheiro. Formada en agosto de 2011, documenta las violaciones del derecho internacional en el transcurso del conflicto. Ha registrado al menos nueve masacres en el ¨²ltimo periodo analizado, entre el 15 de mayo y el 15 de julio. Ocho se las atribuye a las fuerzas gubernamentales, entre ellas la ejecuci¨®n de hasta 250 personas, en su gran mayor¨ªa civiles, en Baida el 2 de mayo.

Ambas partes perpetraron ejecuciones sumarias, seg¨²n el informe de la ONU. En el bando gubernamental detecta un uso sistem¨¢tico de los asesinatos de civiles. ¡°La coordinaci¨®n y toma de parte de organizaciones del gobierno en esos ataques indica que son institucionalizados¡±, a?ade. Los excesos de los opositores en ese apartado son m¨¢s desiguales y aislados, pero no por ello menos cruentos. En junio, radicales islamistas mataron a un cura cat¨®lico y tambi¨¦n a un menor de 15 a?os, acusado de blasfemia. Grupos armados han creado tribunales que en los bastiones rebeldes imparten justicia de acuerdo con la sharia, o ley isl¨¢mica, sin el adecuado juicio.

¡°La tortura es com¨²n¡±, dice, taxativo, el informe. ¡°El dolor y sufrimiento severos, f¨ªsico y mental, se infligen deliberadamente para obtener informaci¨®n o confesiones, como castigo¡±. De nuevo, los expertos de la ONU consideran que la tortura del r¨¦gimen obedece a un patr¨®n estrat¨¦gico, efectuada incluso en hospitales, con la participaci¨®n de los servicios de inteligencia. En violaci¨®n del derecho humanitario, el gobierno sirio ¡°ha forzado a profesionales m¨¦dicos en hospitales militares al maltrato de los detenidos¡±. Los centros m¨¦dicos, de hecho, se han convertido en objetivos leg¨ªtimos para el r¨¦gimen, que al atacarlos deja, adem¨¢s, a rebeldes combatientes y civiles sin tratamiento m¨¦dico en muchos casos vital.

La tortura en el bando rebelde ha ido en aumento gracias a la impunidad con la que operan en sus bastiones las milicias rebeldes, en muchas instancias afiliadas libremente al Ej¨¦rcito Libre Sirio, el interlocutor que Occidente considera leg¨ªtimo. En una prisi¨®n en la provincia de Alepo las llamadas brigadas de la Tormenta del Norte controlan una prisi¨®n con capacidad para 300 personas en la que han colocado a los detenidos en un hoyo de 1,5 metros de alto, para cubrirles con una plancha de metal durante dos d¨ªas. En la misma zona, el llamado batall¨®n Sadam Husein forzaba a los presos en su custodia a doblarse para entrar en un neum¨¢tico, propin¨¢ndoles luego golpes con palos.

Seg¨²n los testimonios recabados por la ONU, la amenaza de violaci¨®n es un arma de intimidaci¨®n a la que recurren ampliamente las fuerzas gubernamentales ¡°para aterrorizar y castigar a mujeres, hombres y ni?os a los que se considera afiliados a la oposici¨®n¡±. Aunque las agresiones sexuales no se suelen discutir de forma abierta por motivos culturales, los investigadores cuentan con testimonios de diversas mujeres que han sido violadas o que han presenciado la violaci¨®n de compa?eras de celda o prisi¨®n cuando se han hallado bajo arresto, en lo que, seg¨²n el derecho penal internacional constituye un crimen de guerra.

No solo la ONU llama la atenci¨®n sobre el hecho de que las armas qu¨ªmicas no son el ¨²nico problema en el cruento conflicto sirio. Este mi¨¦rcoles, el Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja pidi¨® a EE UU y Rusia que, en sus negociaciones en el seno del Consejo de Seguridad sobre el posible desarme de El Asad, traten tambi¨¦n sobre las grandes dificultades que su personal encuentra a la hora de ofrecer atenci¨®n m¨¦dica a los muchos civiles heridos por el conflicto. Seg¨²n el presidente de esa organizaci¨®n internacional, Peter Maurer, ¡°se necesita apoyo pol¨ªtico y diplom¨¢tico a la acci¨®n humanitaria independiente¡±.