Merkel despide la campa?a exigiendo m¨¢s reformas al sur de la UE

Angela Merkel parec¨ªa estar entre amigos esta ma?ana. El ¨²ltimo mitin masivo un d¨ªa antes de las elecciones, celebrado en el centro del Berl¨ªn, se ha convertido en un gran homenaje a la l¨ªder que tiene todas las papeletas para seguir gobernando Alemania cuatro a?os m¨¢s. Mientras los simpatizantes democristianos ondeaban sus carteles naranjas con la palabra ¡°Angie¡±, Merkel despleg¨® un discurso europe¨ªsta pero al mismo tiempo duro con los pa¨ªses del sur. Habr¨¢ ayudas, s¨ª, pero la solidaridad no basta. Hace falta continuar con las reformas, por duras que sean.

Fuerte (un mandato fuerte para cuatros a?os m¨¢s, una Alemania fuerte, una Europa fuerte¡­) y amistad (con el resto de pa¨ªses) fueron algunas de las palabras m¨¢s repetidas por la canciller. Merkel destac¨® la importancia que tiene para Alemania el que Europa (a donde se dirigen el 60% de sus exportaciones) vaya bien. Pero no solo ech¨® mano de la cartera. La l¨ªder democristiana record¨® que el a?o que viene se conmemorar¨¢ el aniversario de la I Guerra Mundial, y que esta es la primera vez en muchos siglos que Europa vive 70 a?os de paz continuada.

Si aumentamos los impuestos y las tasas, no tendremos m¨¢s ingresos, sino menos; no habr¨¢ m¨¢s puestos de trabajo, sino menos",

As¨ª que la Alemania de Merkel echar¨¢ una mano a los pa¨ªses del sur. Pero no a cualquier precio. Estos deben seguir con las reformas, como las que la propia Alemania hizo cuando era ¡°el enfermo de Europa¡±. La canciller cit¨® como ejemplo la decisi¨®n de elevar la edad de jubilaci¨®n a los 67 a?os. Pero la ayuda, avis¨®, tiene un l¨ªmite: ¡°Ni eurobonos ni emisiones de deuda conjunta¡±, asegur¨® entre incondicionales que asent¨ªan con la cabeza. Pero cuando los asistentes irrumpieron en aplausos ¨Cquiz¨¢s el mayor de todo el acto- fue cuando Merkel record¨® los ataques y cr¨ªticas que sufre desde pa¨ªses como Grecia o Portugal. ¡°Me alegro. Porque puedo viajar por un continente que disfruta libertad de opini¨®n, de movimientos o religiosa¡±, asegur¨®.

El Tempodrom, el lugar elegido, cercano a la c¨¦ntrica Postdamer Platz, estaba hasta la bandera. Pero los m¨ªtines en Alemania no son tan multitudinarios como en Espa?a. Esta ma?ana en el centro de Berl¨ªn se habr¨ªan reunido entre 1.000 y 2.000 simpatizantes de Merkel. Como Katrin Steinbrenner, funcionaria berlinesa, que no ten¨ªa ninguna duda de la victoria de la actual canciller.

¡°[El candidato socialdem¨®crata Peer] Steinbr¨¹ck se ha equivocado de campa?a. No ha hablado de los temas que nos interesan y solo ha sabido criticar. Ella va a ganar¡±, sosten¨ªa estas funcionaria berlinesa, que ve con buenos ojos la pol¨ªtica de ¡°ayudas al sur de Europa a cambio de reformas¡±. O Felix Kayser, director de ventas de una empresa inform¨¢tica, que alertaba del riesgo de que la irrupci¨®n del partido antieuro Alternativa para Alemania acabara dando la mayor¨ªa a un Gobierno de coalici¨®n entre socialdem¨®cratas, verdes y los izquierdistas de Die Linke.

Adem¨¢s de Europa, Merkel destac¨® la importancia de continuar con su pol¨ªtica interna, que ha permitido crear puestos de trabajos y reducir la tasa de paro a m¨ªnimos. La l¨ªder de la CDU avisa de que un Gobierno de centroizquierda destruir¨ªa el clima de confianza subiendo impuestos. Tambi¨¦n descart¨® la creaci¨®n de un salario m¨ªnimo interprofesional, una de las propuestas estrellas de Steinbr¨¹ck. Al lado inverso de los carteles con el nombre de ¡°Angie¡±, se pod¨ªa leer el eslogan electoral: ¡°Juntos ganaremos¡±.