Una Pussy Riot denuncia con una huelga de hambre las condiciones de detenci¨®n
Tolok¨®nnikova sostiene en una carta abierta que las presas son tratadas como esclavas
Nadezhda Talok¨®nnikova, una de las Pussy Riot encarceladas, se ha declarado en huelga de hambre ante las horrorosas condiciones de detenci¨®n y ha escrito una carta abierta en la que da detalles sobre las condiciones inhumanas en que se encuentran las presas.
Tolok¨®nnikova -que fue condenada a dos a?os de prisi¨®n por haber participado en la 'oraci¨®n-punk' en el altar de la catedral moscovita del Cristo Redentor, en la que las muchachas integrantes del grupo Pussy Riot ped¨ªan a la Virgen que echara al presidente Vlad¨ªmir Putin del Kremlin- ha acusado asimismo al teniente coronel Yuri Kupri¨¢nov, vicejefe del campo donde est¨¢ internada, de haberla amenazado de muerte a fines del mes pasado despu¨¦s de que ella se quejara de las condiciones de detenci¨®n y de trabajo imperantes.
En su extensa carta abierta, Tolok¨®nnikova, de 23 a?os, cuenta que las presas son tratadas como esclavas, que deben trabajar 16-17 horas al d¨ªa, desde las siete y media de la ma?ana hasta las doce y media de la noche y que, con suerte, pueden dormir cuatro horas diarias. Las obligan a trabajar casi todos los domingos y firmar que lo hacen por "voluntad propia".
Para quebrar a las detenidas, "se utiliza ampliamente el sistema de castigos informales", por ejemplo, les proh¨ªben entrar en la barraca despu¨¦s del trabajo, independientemente del tiempo que haga. Como resultado, afirma Tolok¨®nnikova, a una mujer tuvieron que amputarle un pie y los dedos de las manos. Otro m¨¦todo de 'castigo informal' es prohibirles ir al ba?o y privarles del acceso a sus comidas y bebidas que han recibido. En cuanto a la comida que ofrece el campo de prisioneras se reduce a pan duro, leche diluida en agua y patatas podridas.
Tolok¨®nnikova tambi¨¦n denuncia que la administraci¨®n penitenciaria se apropia de la mayor parte del dinero que ganan las presas con su trabajo. As¨ª, "en junio de 2013 mi sueldo fue de 29 (?veintinueve!) rublos [0,67 euros], en circunstancias que nuestra brigada cose diariamente 150 uniformes de polic¨ªa. ?Ad¨®nde va el dinero que obtienen por ellos?", escribe.
Este objetivo de 150 uniformes es muy dif¨ªcil de cumplir, sobre todo si se tiene en cuenta que las m¨¢quinas de coser son viejas y se estropean con frecuencia; adem¨¢s, a las nuevas no les ense?an c¨®mo coser los uniformes. Y si alguna no cumple la norma, castigan a toda la brigada, manteni¨¦ndola durante horas a la interperie, sin permitirles ir al ba?o ni beber agua. De ah¨ª que surjan tensiones entre las presas, y se den casos de palizas y humillaciones. Por ejemplo, a una novatas que no lograron cumplir con la norma diaria, las obligaron a trabajar desnudas.
Para las 800 presas del campo, funciona solo un ba?o que tiene cinco retretes. Las alcantarillas se tapan a menudo y de ellas entonces "llueve orina y excrementos".
Cuando Tolok¨®nnikova le exigi¨® el 30 de agosto pasado al teniente coronel Kupri¨¢nov que garantizara a la brigada en la que ella trabaja ocho horas de sue?o, este le contest¨®, que de acuerdo, que trabajar¨ªan incluso solo ocho horas, lo que era una trampa, pues eso significaba que no podr¨ªan cumplir con la norma de uniformes y que ser¨ªan castigadas. Kupri¨¢nov agreg¨® entonces, seg¨²n Tolok¨®nnikova: ?Y si ellas [las compa?eras de brigada] se enteran de que esto ha sucedido por tu culpa, ya nunca m¨¢s te volver¨¢s a sentir mal, porque en el otro mundo nadie se siente mal?. La Pussy Riot interpret¨® esta frase como una amenaza a su vida y dirigi¨® una queja oficial al Comit¨¦ de Investigaciones de Rusia y al defensor de derechos humanos, seg¨²n explic¨® su abogada Irina Jrunova.
Mar¨ªa Kannabij, presidenta del Consejo de las Comisiones P¨²blicas Supervisoras de los Presidios, preguntada por el popular diario Moskovski Komsom¨®lets si cre¨ªa lo que Tolok¨®nnikova escrib¨ªa, respondi¨®: "Desgraciadamente, no conozco ning¨²n campo de reclusi¨®n donde existan buenas condiciones". Kannabij agreg¨® que las condiciones de los presos dependen de las cualidades personales de los funcionarios del campo.
Despu¨¦s de que se publicara su carta abierta, que entreg¨® a su marido cuando este la visit¨®, Tolok¨®nnikova fue trasladada a una celda donde se encuentra sola con el fin de protegerla, seg¨²n informaron las autoridades penitenciarias. All¨ª contin¨²a con la huelga de hambre que comenz¨® el lunes pasado. Al mismo tiempo, el Comit¨¦ de Investigaciones envi¨® a un inspector al campo de reclusi¨®n, pero Tolok¨®nnikova se neg¨® a hablar con ¨¦l a solas y exigi¨® la presencia de su abogada; tambi¨¦n la Comisi¨®n de Derechos Humanos anunci¨® que mandar¨ªa una delegaci¨®n para investigar las denuncias hechas por Tolok¨®nnikova.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Pussy Riot
- Huelgas hambre
- Detenciones
- Presos pol¨ªticos
- Vlad¨ªmir Putin
- Rusia
- Grupos m¨²sica
- Represi¨®n pol¨ªtica
- Europa este
- Protestas sociales
- Prisiones
- Malestar social
- M¨²sica
- Centros penitenciarios
- Problemas sociales
- Europa
- R¨¦gimen penitenciario
- Pol¨ªtica
- Proceso judicial
- Justicia
- Feminismo
- Movimientos sociales
- Mujeres
- Sociedad