La resurrecci¨®n de Al Qaeda
Mientras la organizaci¨®n central se desangra, sus grupos asociados son cada vez m¨¢s fuertes Europa teme ataques de yihadistas que regresan de zonas de guerra
Al Qaeda resucita. Los que auguraron su muerte ¡ªcomo Le¨®n Panetta, ex secretario de Defensa de EE UU, o el presidente Barack Obama que hablaron ¡°del camino hacia la derrota¡±¡ª comprueban lo arriesgado de anunciar la futura defunci¨®n de una organizaci¨®n creada hace 25 a?os por Osama Bin Laden y 15 disc¨ªpulos.
El ataque de un comando de Al Shabab al centro comercial Westgate de Nairobi (Kenia), con todos los elementos de una perfecta tragedia que dur¨® varios d¨ªas y acab¨® con la vida de 67 personas, demuestra que algunas filiales de Al Qaeda est¨¢n decididas a salir de sus fronteras y protagonizar golpes espectaculares. A volver a la yihad global sin abandonar la local. A so?ar con rendir a sus enemigos a sus pies.
El ataque de un comando de Al Shabab en Kenia demuestra que algunas filiales de Al Qaeda est¨¢n decididas a salir de sus fronteras y protagonizar golpes espectaculares
EE UU ha pasado de anunciar hace pocos meses el principio del fin de Al Qaeda a cerrar este verano la mayor¨ªa de sus embajadas en los pa¨ªses ¨¢rabes ante el riesgo de un gran atentado y alertar a sus nacionales para que abandonen pa¨ªses como Yemen, la madriguera terrorista m¨¢s temida por los servicios de inteligencia occidentales. Yemen es el agujero negro desde el que sospecha que se prepara ¡°algo grande¡±, tal y como se desprende de una conversaci¨®n intervenida a Ayman al Zawahiri, jefe de la organizaci¨®n, con Naser al Wahishi, fundador de Al Qaeda en la Pen¨ªnsula Ar¨¢biga (AQPA).
Al Qaeda sigue viva y la tradicional amenaza de su ¨®rgano central en las monta?as de Pakist¨¢n y Afganist¨¢n se extiende con fuerza a los sat¨¦lites de la organizaci¨®n en Somalia, Mal¨ª, N¨ªger, T¨²nez, Siria o Irak. Un monstruo con demasiadas cabezas y un tronco cada vez m¨¢s d¨¦bil y aislado. ¡°Tenemos al padre moribundo, pero los hijos han crecido y son mucho m¨¢s fuertes¡±, explica un analista de la CIA en Europa.
?Un padre moribundo? Bin Laden muri¨® en 2011 a los 54 a?os acribillado en su c¨®modo refugio de Abbottabad (Pakist¨¢n). Desde entonces la central de Al Qaeda comandada por Al Zawahiri ha sufrido una hemorragia permanente, una maldici¨®n protagonizada por los Predator ¡ªaviones norteamericanos no tripulados¡ª que han enterrado bajo sus bombas a un rosario de jefes operativos.
El tuerto Ilyas Kasmiri, Attiy¨¢ Abd el Rahman y Abu Yehia al Libi cayeron en sus refugios de Wazirist¨¢n, una rec¨®ndita zona monta?osa de Pakist¨¢n. Por la cabeza de Al Libi, licenciado en Qu¨ªmicas y n¨²mero dos de la organizaci¨®n, se ofrec¨ªa un mill¨®n de d¨®lares. Con su muerte se comenz¨® a especular con una met¨¢fora: el coraz¨®n de Al Qaeda se apaga. ¡°Quiz¨¢s la organizaci¨®n est¨¢ esperando a que la presi¨®n norteamericana ceda¡±, advierte con cautela Guido Steinberg, analista del Instituto Alem¨¢n para Asuntos de Seguridad Internacional.
Moghadam Assaf, director del Instituto Internacional sobre Antiterrorismo Herzliya en Israel destaca la importancia de distinguir entre Al Qaeda central y sus filiales para hacer un diagn¨®stico. ¡°Al Qaeda central est¨¢ significativamente d¨¦bil en los ¨²ltimos a?os, pero si definimos Al Qaeda como una entidad que agrupa la central adem¨¢s de sus afiliados, la imagen es m¨¢s compleja y es un error decir que est¨¢ derrotada. Creo que Obama se refer¨ªa a Al Qaeda central cuando dijo lo que dijo¡±.
EE UU ha pasado de anunciar hace pocos meses el principio del fin de Al Qaeda a cerrar este verano la mayor¨ªa de sus embajadas en los pa¨ªses ¨¢rabes ante el riesgo de un gran atentado
Rohan Gunaratna, director del Centro Internacional para la Violencia Pol¨ªtica y Terrorismo en Singapur, habla de una transformaci¨®n en el n¨²cleo fundador. ¡°Aunque el n¨²cleo de Al Qaeda ha disminuido, tiene influencia para guiar a sus asociados al contraataque. Entre 30 y 40 grupos en Asia, ?frica, Oriente Medio y el C¨¢ucaso est¨¢n emulando la ideolog¨ªa y metodolog¨ªa de Al Qaeda. Mientras el n¨²cleo que lidera Al Zawahiri se ha transformado de operacional a una organizaci¨®n ideol¨®gica y de formaci¨®n, los grupos asociados ejecutan la mayor¨ªa de los ataques. El ataque en Kenia demostr¨® que la amenaza se ha descentralizado¡±.
Si las filiales de Al Qaeda han logrado instalarse y crecer en distintas ¨¢reas del planeta ?de d¨®nde proviene ahora la mayor amenaza? Todas las miradas se dirigen a Yemen y a un hombre de 37 a?os, peque?o y barbudo, de cara alargada y prominente nariz que cubre su frente con un turbante y no suelta su Kal¨¢shnikov. En 2009 fund¨® junto a dos ex presos de Guant¨¢namo AQPA y est¨¢ bendecido como emir (l¨ªder) por Al Zawahiri.
Naser al Wahishi pas¨® por la escuela yihadista de Afganist¨¢n y se convirti¨® en el secretario personal de Bin Laden. Tras varias detenciones y fugas ha creado en solo cuatro a?os la filial m¨¢s peligrosa e internacional de todo el movimiento. Su reciente conversaci¨®n con Al Zawahiri sobre ¡°algo grande¡± provoc¨® la alerta m¨¢s grave desde el 11-S y el cierre de veinte embajadas de EE UU.
Entre 30 y 40 grupos en Asia, ?frica, Oriente Medio y el C¨¢ucaso est¨¢n emulando la ideolog¨ªa y metodolog¨ªa de Al Qaeda
Rohan Gunaratna, director del Centro Internacional para la Violencia Pol¨ªtica y Terrorismo en Singapur
El analista Asaff no duda. ¡°Creo que ahora AQPA es el grupo afiliado m¨¢s decidido a atacar Occidente y el m¨¢s peligroso. Muchos de los ataques de los ¨²ltimos a?os contra Occidente fueron dirigidos o asistidos por este grupo. Otros afiliados, notablemente Al Qaeda en el Magreb Isl¨¢mico ¡ªAQMI, el grupo que secuestr¨® en el Sahel a varios espa?oles¡ª tienen especial motivaci¨®n para atacar a Occidente. AQMI quiere vengar la invasi¨®n de Francia en Mal¨ª¡±. Steinberg ve a AQMI como la principal, amenaza para Europa ¡°porque ha anunciado sus objetivos y tiene militantes en este continente¡±. Una opini¨®n que comparten los responsables de los servicios espa?oles y franceses. ¡°Los tenemos muy cerca, tienen centenares de simpatizantes aqu¨ª y a muchos compa?eros salafistas en nuestras c¨¢rceles¡±, apunta un jefe policial espa?ol.
El esp¨ªritu global de Al Qaeda en la pen¨ªnsula Ar¨¢biga lo demuestra el intento de volar un Airbus en Detroit (EE UU) en la Navidad de 2009 por Umar Farouk Abdulmutallab, un nigeriano formado en Londres y radicalizado por Anwar al Awlaki, creador de Inspire, la revista digital del grupo. ¡°No solo AQPA supone una amenaza para Occidente, tambi¨¦n lo son otros grupos asociados¡±, advierte Gunaratna. En Yemen, por ejemplo, Ansar al Sharia.
El temor a que algunos combatientes regresen a sus pa¨ªses de origen y organicen atentados en Europa ha puesto en alerta a los servicios de inteligencia occidentales
La guerra civil en Siria se ha convertido en el mayor im¨¢n del yihadismo desde las invasiones norteamericanas de Afganist¨¢n e Irak. M¨¢s de 8.000 extranjeros ¡ªentre ellos 100 procedentes de Espa?a¡ª se han unido a las filas del Frente al Nusra, filial de Al Qaeda, o la Brigada de Extranjeros. ¡°M¨¢s de 800 proceden de Europa y la cifra aumenta. El problema no es los que se suicidan all¨ª [al menos seis ceut¨ªes], sino los que regresen formados para atacar en Europa. Esto nos preocupa¡±, admite un responsable policial espa?ol. ¡°Hay m¨¢s yihadistas extranjeros en Siria que en otros escenarios de la yihad en el pasado¡±, precisa Assaf.
El temor a que algunos combatientes regresen a sus pa¨ªses de origen y organicen atentados simult¨¢neos en varios capitales europeas, por ejemplo, han puesto en alerta y en guardia a los servicios de inteligencia occidentales.
Zawahiri, el pediatra que sucedi¨® a Bin Laden, anunci¨® en sus soflamas que la victoria final del islam vendr¨¢ de Siria, y muchos le creen. ¡°A largo plazo creo que el Frente al Nusra es el mayor peligro porque la guerra durar¨¢ varios a?os y podr¨ªan ganarla los islamistas. No es una amenaza directa, pero puede serla en el futuro¡±, apunta Steinberg. ¡°Gracias a la guerra de Siria la amenaza crecer¨¢¡±, predice Gunaratna.
Durante las ¨²ltimas semanas se han multiplicado los choques entre la filial de Al Qaeda que intenta imponer la shar¨ªa ¡ªley isl¨¢mica¡ª en los pueblos que domina y los rebeldes del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Sirio. Alguno de sus comandantes ha sido ejecutado por los islamistas. ¡°El viento empuja las velas de Al Qaeda mejor que en Irak en 2003. La primavera ¨¢rabe se ha convertido en una oportunidad para encontrar nuevos refugios, adiestramiento y para atraer a personas con la esperanza de una vida mejor. Siria es el Sina¨ª, tiene una gran importancia estrat¨¦gica¡±, opina Assaf.
?Qui¨¦n est¨¢ ganando esta larga y sangrienta partida? El analista Steinberg cree que, pese a su debilidad, Al Qaeda central ha extendido su ideolog¨ªa y sus filiales encuentran nuevas oportunidades en los reg¨ªmenes m¨¢s d¨¦biles. Y concluye rotundo: ¡°Aunque Al Qaeda central desaparezca estos grupos seguir¨¢n la lucha¡±. El propio Bin Laden pens¨® en cambiar el nombre de su criatura.
Nueva matanza en Siria por un ceut¨ª
Mustaf¨¢ Mohamed, Tafo, de 24 a?os, uno de los yihadistas ceut¨ªes que se unieron a las c¨¦lulas de Al Qaeda que combaten junto a la resistencia siria contra las tropas de Bachar el Asad, se suicid¨® en junio de 2012 en un puesto de control militar en la ciudad de Al Bara y caus¨® cien victimas, seg¨²n ha confirmado EL PA?S una fuente autorizada del Ministerio del Interior.
Tafo, un joven alto, rubio y barbudo, trabajaba en Ceuta como repartidor al volante de una furgoneta Piaggio. Estaba casado y esperaba un hijo antes de unirse al primer grupo de yihadistas suicidas que viajaron en la primavera de 2012 a Siria con la firme determinaci¨®n de no volver. Su muerte y la matanza que provoc¨® en Al Bara¡ª una de las denominadas aldeas o ciudades muertas, situada a unos 80 kil¨®metros de Alepo, en el noroeste de Siria¡ª, fue reivindicada por una p¨¢gina yihadista el 20 de agosto del mismo a?o. El yihadista se empotr¨® contra su objetivo con un veh¨ªculo cargado de explosivos.
La muerte de Mustaf¨¢ Mohamed es casi un calco de la de su amigo Rachid Wahbi taxista de 33 a?os que se suicid¨® d¨ªas antes en Idlib, la misma zona, a bordo de un cami¨®n cargado de bombas y provoc¨® otra matanza de 130 personas en un cuartel militar, seg¨²n Interior.
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