La cooperaci¨®n de los vecinos frena el flujo hacia Espa?a
Melilla y Ceuta son la asignatura pendiente de la inmigraci¨®n irregular
¡°Espa?a ha hecho cosas muy positivas con Marruecos¡±, recalc¨® el pasado fin de semana el ministro de Exteriores franc¨¦s, Laurent Fabius, ante las c¨¢maras de I-T¨¦l¨¦. Hizo este comentario elogioso al ser preguntado por la tragedia en aguas de Lampedusa.
Hace ya 25 a?os, en el oto?o de 1988, que fue descubierto en la playa de los Lances (C¨¢diz) el primer cad¨¢ver de un inmigrante ahogado. La inmigraci¨®n clandestina hacia Espa?a, a trav¨¦s del estrecho de Gibraltar, no par¨® de crecer hasta que en octubre de 2003 naufrag¨® una patera frente a Roda (C¨¢diz) y se ahogaron 37 marroqu¨ªes.
Aquella cat¨¢strofe provoc¨® un cambio radical de actitud de Rabat, que empez¨® a cooperar con Espa?a para frenar la oleada migratoria. Poco a poco se cerr¨®, en buena medida, la v¨ªa del Estrecho, pero se abrieron otras como la del Atl¨¢ntico, que desembocaba en Canarias, y las de Ceuta y Melilla. Estas ¨²ltimas parecen casi imposibles de taponar.
Hoy en d¨ªa ¡°la relaci¨®n [con Marruecos] es ejemplar, magn¨ªfica¡±, repet¨ªa el martes pasado el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Mart¨ªnez, en el Congreso de los Diputados. Aunque no les mencion¨®, la colaboraci¨®n con Mauritania y Senegal tambi¨¦n arroja buenos resultados.
De 2006 a 2012 la inmigraci¨®n irregular por mar a Espa?a disminuy¨® en un 90,3%, pero ese porcentaje llega al 99,5% en Canarias, record¨® Mart¨ªnez. Este a?o se mantiene la tendencia.
La gran ventaja de Espa?a con relaci¨®n a Italia es que tiene enfrente a Estados con capacidad para controlar sus fronteras como Marruecos y Mauritania, mientras que Libia ¡ªsu costa est¨¢ a solo 176 kil¨®metros de Lampedusa¡ª vive en plena anarqu¨ªa desde el derrocamiento de Muamar el Gadafi en 2011.
La ca¨ªda de la inmigraci¨®n no es lineal. Hay repuntes. El pasado agosto, al final del Ramad¨¢n, se produjo, por ejemplo, un aluvi¨®n de peque?as embarcaciones neum¨¢ticas a las que la polic¨ªa llama toys porque se venden en las secciones de juguetes. Unos mil pasajeros de estos botes han sido rescatados en lo que va de a?o, seg¨²n Mart¨ªnez (el s¨¢bado fue interceptada una patera con 18 inmigrantes a 50 millas de Cartagena). Rabat trata de atajar el fen¨®meno ¡°yendo a los circuitos de comercializaci¨®n¡±, a?adi¨®.
La lucha contra la inmigraci¨®n irregular tiene, sin embargo, una asignatura pendiente: Ceuta y Melilla. Pese a la colaboraci¨®n de Rabat y a la duplicaci¨®n de la altura de la valla, las llegadas por mar y los asaltos de subsaharianos para acceder a Melilla han sido este a?o tan masivos ¡ªen ellos participaron en total unas 3.000 personas¡ª y frecuentes como en 2005, cuando se despleg¨® el Ej¨¦rcito marroqu¨ª para proteger a ambas ciudades. Hubo, eso s¨ª, menos muertos uno frente a los 14 fallecidos de hace ocho a?os¡ª y la repercusi¨®n medi¨¢tica fue escasa.
Por eso el presupuesto del Ministerio de Interior no aumentar¨¢ solo en 2014 para costear las elecciones a la Euroc¨¢mara. Se incrementa tambi¨¦n en 2,5 millones para reforzar el per¨ªmetro fronterizo de Ceuta y, sobre todo, de Melilla con m¨¢s c¨¢maras de vigilancia y una malla met¨¢lica que dificulte trepar por la verja, cuya altura es ya de seis metros.
Interior dedicar¨¢ otros 1,8 millones a poner al d¨ªa el servicio de vigilancia electr¨®nica (SIVE) que detecta todo lo que se mueve en el Estrecho excepto los peque?os botes neum¨¢ticos. Desde su creaci¨®n en 2000 ha costado 237 millones.
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