La ecuaci¨®n francesa

?Desde su llegada al El¨ªseo, Fran?ois Hollande se esfuerza por resolver una ecuaci¨®n: c¨®mo encontrar la distancia adecuada con Mosc¨² y c¨®mo resolver las tensiones pol¨ªticas acelerando al mismo tiempo los intercambios comerciales.

Rusia, que es imprescindible en las cuestiones importantes (Siria, Ir¨¢n), tambi¨¦n lleva a cabo una pol¨ªtica agresiva en su vecindario (Ucrania, Moldavia, Georgia), tentado por la integraci¨®n europea. En el plano interior, el ¡°poder vertical¡± instaurado por Vlad¨ªmir Putin sigue siendo en gran parte un monopolio. Al rechazar cualquier injerencia en sus asuntos, el r¨¦gimen ha desarrollado una ret¨®rica antioccidental. Mosc¨² reprocha a EE UU sus miras imperialistas, y a Europa su sumisi¨®n a Washington y su perdici¨®n moral, simbolizada, en su opini¨®n, por el matrimonio gay.

¡°En todos los temas, Rusia, sin complejos, inicia sistem¨¢ticamente un pulso¡±, dicen en el Ministerio de Asuntos Exteriores franc¨¦s. El tema sirio ilustra este enfoque. Durante meses, Rusia se mostr¨® inflexible apoyando a Damasco sin condiciones. Y luego dio un giro radical y firm¨®, ante la sorpresa general, un acuerdo con EE UU sobre el desmantelamiento del arsenal qu¨ªmico.

Este episodio ha sido hiriente para Francia, que se vio abandonada por su aliado estadounidense a pesar de que se hab¨ªa distinguido por su postura ofensiva en cuanto a Siria. Desde la llegada al poder de Fran?ois Hollande, en mayo de 2012, ¡°el tema sirio ha sido un elemento estructurador de la relaci¨®n franco-rusa¡±, dicen p¨²dicamente en el Quai d¡¯Orsay. Aunque no ha prevalecido la opci¨®n de una intervenci¨®n militar, en Par¨ªs insisten en el hecho de que ¡°los rusos no se han movido de forma espont¨¢nea. Han respondido a las amenazas de los ataques apoyados por Francia¡±.

En realidad, la influencia de Francia sobre Rusia parece limitada en este tema. Laurent Fabius volvi¨® con las manos vac¨ªas de su viaje, a mediados de septiembre, a Mosc¨², donde se encontr¨® con la negativa de su hom¨®logo, Sergei Lavrov, de realizar la m¨¢s m¨ªnima concesi¨®n en lo relativo a la resoluci¨®n de la ONU para regular el desarme qu¨ªmico sirio. ¡°La crisis siria ha revelado tensiones muy fuertes entre Francia y Rusia, aunque no se hayan puesto p¨²blicamente de manifiesto¡±, se?ala Thomas Gomart, un especialista en Rusia del Instituto Franc¨¦s de Relaciones Internacionales (IFRI). ¡°Tendr¨¢ profundas consecuencias¡±, dice, ¡°porque ha marginado a Europa y ha vuelto a colocar a Rusia en una posici¨®n de fuerza al permitirle retomar un di¨¢logo directo con EE UU¡±.

Siria tambi¨¦n ha puesto de manifiesto otra divergencia con Mosc¨². ¡°Desde la intervenci¨®n occidental en Libia, en 2011, los rusos se muestran muy cr¨ªticos con las estrechas relaciones entabladas entre Catar y la clase pol¨ªtica francesa¡±, se?ala Thomas Gomart. Y puntualiza que ¡°Mosc¨² considera que Catar y Arabia Saud¨ª son unos reg¨ªmenes desestabilizadores que favorecen el extremismo sun¨ª en Siria y tambi¨¦n en el C¨¢ucaso ruso¡±.

?Sin embargo, si exceptuamos el asunto sirio, las relaciones entre Par¨ªs y Mosc¨² han mejorado. Tras a?os de retraso con respecto a Alemania, Reino Unido o Italia, Francia ha decidido imitarlos dando preferencia tambi¨¦n al formato bilateral. Europa, ?cu¨¢ntas divisiones? Demasiadas, en opini¨®n de Mosc¨². ¡°Rusia no se encuentra c¨®moda en sus relaciones directas con la UE¡±, explica Pavel Chinsky, el director general de la C¨¢mara de Comercio y de Industria Franco-Rusa (CCIFR). Mosc¨² considera que la UE es un organismo muy burocratizado. Y, adem¨¢s, no existe una postura com¨²n sobre un punto tan delicado como la eliminaci¨®n de los visados Schengen para los rusos¡±. Se trata de un objetivo importante en materia de pol¨ªtica exterior para Mosc¨². Francia mantiene una postura comedida sobre el tema, a diferencia de algunos Estados miembros que se muestran claramente hostiles, por razones pol¨ªticas y relacionadas con la emigraci¨®n.

Francia no es Alemania en su proximidad a Rusia. Tampoco tiene su tejido de pymes, que son muy din¨¢micas en el extranjero. Pero el nuevo embajador de Francia en Mosc¨², Jean-Maurice Ripert, una persona cercana al presidente Hollande, de la misma promoci¨®n de la Escuela Nacional de Administraci¨®n (ENA), tendr¨¢ una hoja de ruta clara: seguir con el acercamiento iniciado. El a?o dual Francia-Rusia, en 2010, permiti¨® sobre todo una multiplicaci¨®n sin precedentes de los intercambios, en todos los ¨¢mbitos.

Es hora de respetar las ¡°especificidades rusas¡±, seg¨²n la expresi¨®n de Nicolas Sarkozy, en octubre de 2007, porque la crisis que asola Europa empuja a sus dirigentes a cortejar a los mercados emergentes. Por su parte, Mosc¨² quiere evitar una crisis diversificando su econom¨ªa. Las previsiones de crecimiento para 2013 se han reducido hasta el 1,8%, mientras que las autoridades esperaban un 5%.

?Francia acusa desde hace tiempo un importante retraso en los intercambios comerciales. Solos los grandes grupos, como Alstom, Auchan o Total, ten¨ªan presencia en el mercado ruso. Actualmente, cerca de 6.000 empresas francesas trabajan con Rusia y 400 est¨¢n instaladas all¨ª. Las inversiones procedentes de Francia han aumentado hasta los cerca de 12.000 millones de euros en 2010, en los sectores del gas, energ¨¦tico, automovil¨ªstico y tambi¨¦n espacial. La colaboraci¨®n militar se intensifica. El primer porta-helic¨®pteros ruso de la clase Mistral, el Vladivostok, se entregar¨¢ el 1 de noviembre de 2014.

El precio de este acercamiento es hacer la vista gorda en materia de derechos humanos. Francia ha mantenido silencio respecto al endurecimiento sin precedentes del r¨¦gimen ruso tras la vuelta de Vlad¨ªmir Putin al Kremlin en la primavera de 2012. Tambi¨¦n parece que Par¨ªs se encuentra en un segundo plano en el debate sobre las posibles sanciones contra altos funcionarios rusos que podr¨ªan imponerse en Europa, siguiendo el modelo de la lista Magnitski en EE UU. Durante su primera visita oficial a Mosc¨², a finales de febrero, Fran?ois Hollande se neg¨® a hablar de las leyes represivas aprobadas por el r¨¦gimen ruso. ¡°No me corresponde juzgar, ni tampoco valorar¡±, declar¨®. Dif¨ªcilmente se puede ser m¨¢s prudente.

?Yves-Michel Riols y Piotr Smolar son periodistas de Le Monde.?