El Asad recurre a bombas de vac¨ªo y de racimo contra los rebeldes

Mientras los inspectores internacionales alaban al r¨¦gimen de Bachar el Asad por su disposici¨®n y transparencia en el proceso de desarme qu¨ªmico y este busca legitimar sus avances b¨¦licos sobre el terreno en la conferencia pol¨ªtica que deber¨ªa tener lugar en Ginebra el mes que viene, la guerra con medios convencionales, la que se ha cobrado la vida de la inmensa mayor¨ªa de las 100.000 v¨ªctimas del conflicto, sigue su curso sin signos de distensi¨®n alguna. M¨¢s de 2.000 personas han fallecido desde el ataque con armas qu¨ªmicas en las afueras de Damasco del 21 de agosto. Y seg¨²n los opositores y observadores internacionales, el r¨¦gimen s¨®lo ha intensificado su uso de armas altamente destructivas como misiles y bombas de fuel y de racimo.

Las armas qu¨ªmicas que est¨¢ inspeccionado ahora el equipo conjunto de la Organizaci¨®n para la Prohibici¨®n de Armas Qu¨ªmicas (OPAQ) y Naciones Unidas s¨®lo son responsables aproximadamente del 2% de las 100.000 bajas registradas en el conflicto desde marzo de 2011. La jefa de esa misi¨®n, Sigrid Kaag, dijo este martes que ¡°el Gobierno de Siria ha cooperado de forma completa en el apoyo al trabajo inicial del equipo¡±, algo por lo que dio las gracias a Damasco. Hace dos semanas, la OPAQ recibi¨® el premio Nobel de la Paz por sus ¡°amplios esfuerzos para eliminar las armas qu¨ªmicas¡±. Lo cierto es que, seg¨²n los opositores, son pocas las instancias en que el r¨¦gimen ha recurrido a sus arsenales qu¨ªmicos e incontables los ataques con armas convencionales que han ocasionado gran da?o a la poblaci¨®n civil.

Seg¨²n los Comit¨¦s de Coordinaci¨®n Local (CCL), desde el ataque con qu¨ªmicos de agosto el r¨¦gimen ha empleado en al menos 16 jornadas diferentes bombas de fuel, que estallan primero en el aire, dispersando el combustible que transportan, para explotar una segunda vez esparciendo otra carga de explosivos sobre su objetivo. La organizaci¨®n Human Rights Watch (HRW) inform¨® del uso de esas armas el 29 de septiembre contra una escuela secundaria en Raqqa, en zona rebelde, en un ataque al que le atribuy¨® al menos 14 fallecidos, en su mayor¨ªa estudiantes, adem¨¢s de 35 heridos. Este martes se emplearon de nuevo en Sfeira, en la localidad de Alepo.

¡°Mientras el mundo intenta controlar las armas qu¨ªmicas de Siria, las fuerzas gubernamentales siguen matando a civiles con otras armas poderosas¡±, seg¨²n Priyanka Motaparthy, investigadora sobre derechos infantiles en Oriente Pr¨®ximo de HRW. ¡°Estos ataques les han costado sus vidas a muchos ni?os, y han ense?ado al resto que se arriesgan a morir si acuden a la escuela¡±. Seg¨²n los observadores internacionales, el absentismo escolar ha experimentado un dram¨¢tico incremento en los ¨²ltimos meses en las zonas controladas por los rebeldes a causa de ataques de este tipo.

Los opositores denuncian un uso similar de las bombas de racimo, un tipo de proyectil que antes de impactar libera una multitud de peque?os artefactos explosivos que quedan dispersados y pueden mantenerse activos durante d¨¦cadas. Son responsables, seg¨²n los activistas, de 100.000 muertes y mutilaciones en los pasados 45 a?os. Seg¨²n la red observadora CCL se han empleado con profusi¨®n en las pasadas semanas y por ¨²ltima vez el lunes en la provincia de Hama. HRW identific¨® 152 ataques con ellas contra posiciones rebeldes entre julio de 2012 y junio de 2013. Siria no ha firmado el acuerdo para prohibir de su uso, ratificado por 83 pa¨ªses. Tampoco lo han hecho China, Rusia o Estados Unidos.

Este martes, en su reuni¨®n en Londres, el llamado Grupo de Amigos de Siria emiti¨® un comunicado en el que exige ¡°al r¨¦gimen sirio que acabe con el cerco de ¨¢reas urbanas y el ataque indiscriminado contra civiles, particularmente con bombardeos a¨¦reos y el uso de misiles bal¨ªsticos, bombas de racimo y contenedores explosivos¡±. El r¨¦gimen mantiene adem¨¢s el asedio de la localidad de Muadamia, en las afueras de Damasco, controlada en gran parte por los rebeldes y donde, seg¨²n las organizaciones internacionales han quedado atrapados unos 3.000 civiles que padecen una creciente escasez de bienes b¨¢sicos y atenci¨®n m¨¦dica. La secretaria general adjunta de la ONU para Asuntos Humanitarios, Val¨¦rie Amos, ha pedido un alto el fuego en la zona para evitar una crisis humanitaria.