Un diario chino pide en primera p¨¢gina a la polic¨ªa que libere a un periodista
El redactor fue arrestado por informar sobre problemas financieros en una compa?¨ªa estatal
Un peri¨®dico de Guangzhou -capital de la provincia sure?a china de Guangdong- ha desafiado a las autoridades y ha publicado este mi¨¦rcoles un editorial en primera p¨¢gina en el que pide a la polic¨ªa que libere a uno de sus periodistas, detenido por informar sobre ¡°problemas financieros¡± en una compa?¨ªa en parte propiedad del Estado. ¡°Por favor, su¨¦ltenlo¡±, se?ala el texto de New Express con grandes caracteres negros, en referencia al redactor, Chen Yongzhou. La prensa en China est¨¢ controlada por el Gobierno.
Chen fue arrestado el s¨¢bado pasado bajo ¡°sospecha de haber da?ado la reputaci¨®n empresarial¡± al haber escrito una quincena de art¨ªculos sobre las dificultades financieras de Zoomlion, una empresa de maquinaria de la construcci¨®n de la provincia vecina de Hunan, que cotiza en las bolsas de Shenzhen y Hong Kong, y es un gran contribuyente en impuestos en Changsha, capital de Hunan.
El editorial asegura que no hay pruebas de que Chen haya cometido alg¨²n crimen, y recuerda que los periodistas no deben ser procesados criminalmente por publicar de forma responsable hechos que puedan avergonzar a compa?¨ªas o individuos influyentes. ¡°Somos un peri¨®dico peque?o, pero tenemos agallas por pobres que seamos¡±, dice el texto. El diario afirma que la polic¨ªa de Changsha llev¨® a cabo la detenci¨®n en una operaci¨®n interprovincial, y que tambi¨¦n buscaba al redactor jefe de Econom¨ªa, quien lleva ¡°escondido¡± varios d¨ªas.
Zoomlion es el segundo mayor fabricante de equipos para la construcci¨®n de China, con 32.000 empleados y una facturaci¨®n de 48.000 millones de yuanes (5.700 millones de euros) el a?o pasado; el Gobierno de la provincia de Hunan es su mayor accionista, con alrededor del 16% del capital, informa Associated Press.
En sus textos, Chen acus¨® a Zoonlion de suministrar datos contables fraudulentos y haber inflado los beneficios, seg¨²n ha explicado el peri¨®dico en su cuenta en el servicio de mensajes cortos Weibo, similar a Twitter. ¡°Siempre hemos pensado que mientras informemos de forma responsable, no habr¨¢ problema¡±, contin¨²a el editorial, que a?ade que el peri¨®dico hab¨ªa revisado las informaciones de Chen y no encontr¨® errores significativos. ¡°Incluso si hay un problema, podemos ir a juicio y, si perdemos, pagar la compensaci¨®n adecuada, aunque signifique que tenemos que cerrar¡±, se?ala. ¡°Pero los hechos demuestran que fuimos demasiado inocentes¡±.
Zoomlion asegura que se quej¨® a la polic¨ªa de los art¨ªculos de Chen para ¡°salvaguardar los derechos leg¨ªtimos de la compa?¨ªa¡±, seg¨²n ha declarado su vicepresidente, Sun Chongjin, sin dar m¨¢s detalles, a la agencia Reuters.
Un consejero del presidente de Zoonlion acus¨® en julio pasado en su microblog al periodista de cobrar de una empresa competidora, Sany. New Express le demand¨® por libelo. Sany ha negado cualquier implicaci¨®n. La fuerte competencia entre las dos empresas de equipos de construcci¨®n, en un mercado a la baja, las ha llevado a acusarse mutuamente de espionaje industrial.
La detenci¨®n de Chen se ha propagado r¨¢pidamente por las redes sociales, y hoy ha sido uno de los temas m¨¢s seguidos en Weibo. Yu Jianrong, un investigador y bloguero influyente, ha calificado el arresto de ¡°abuso de poder p¨²blico¡±. Los censores han intentado controlar la difusi¨®n del incidente y han eliminado el editorial en algunos portales de noticias.
No es la primera vez que los periodistas de New Express, cuyo p¨²blico es la creciente clase media, tienen problemas. En agosto pasado, otro periodista, Liu Hui, fue detenido despu¨¦s de que acusara en Internet de negligencia a un antiguo funcionario de la municipalidad de Chongqing, una de las mayores ciudades de China, en el suroeste del pa¨ªs.
Algunos peri¨®dicos chinos fuerzan en ocasiones los l¨ªmites del r¨ªgido sistema de control y propaganda bajo el cual funciona la prensa. En enero pasado, los periodistas de Nanfang Zhoumo (Semanario del Sur) fueron a la huelga despu¨¦s de que los censores bloquearan un texto, con ocasi¨®n del A?o Nuevo chino, en el que el peri¨®dico ped¨ªa mayor respeto por los derechos constitucionales.
El presidente chino, Xi Jinping, ha puesto en marcha una fuerte campa?a anticorrupci¨®n, pero al mismo tiempo ha incrementado el control sobre Internet y la represi¨®n contra blogueros y periodistas, que, ante la censura habitual de la prensa tradicional, se vuelcan cada vez m¨¢s en Internet para revelar delitos y manifestar opiniones cr¨ªticas. El Gobierno asegura que quiere poner fin a lo que llama ¡°rumores en l¨ªnea¡±. Una reciente normativa establece que los internautas pueden ser condenados a tres a?os de c¨¢rcel por difundir mensajes difamatorios que sean reenviados 500 veces. Las detenciones de blogueros y periodistas env¨ªan una clara se?al a cibernavegantes: el Gobierno es quien fija el ritmo de la informaci¨®n y las denuncias de corrupci¨®n que son hechas p¨²blicas.
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