Pe?a Nieto saca adelante la reforma fiscal
El Congreso mexicano aprueba aumentar los impuestos a los que m¨¢s ganan, a las empresas y gravar la comida basura
En una sesi¨®n maratoniana, de m¨¢s de 13 horas de debate, el Senado mexicano aprob¨® la noche del martes la reforma hacendaria del presidente Enrique Pe?a Nieto con 73 votos a favor y 50 contra. El partido del Gobierno -PRI- cont¨® con algunos avales del izquierdista PRD y con la oposici¨®n en bloque del Partido de Acci¨®n Nacional -el conservador PAN-, que al filo de las tres de la madrugada incluso abandon¨® el sal¨®n de plenos por considerar que los resultados estaban cocinados de antemano y que el debate era una farsa.
La aprobaci¨®n supone un nuevo triunfo para Pe?a Nieto, que suma su tercera gran reforma en menos de un a?o de gobierno, despu¨¦s de la educativa y la de telecomunicaciones. Las reformas son parte de los acuerdos del Pacto por M¨¦xico, la agenda llamada a "transformar M¨¦xico" suscrita por el PRI y los dos principales de la oposici¨®n -PAN y Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD)- el 2 de diciembre de 2012, un d¨ªa despu¨¦s de ser investido presidente Pe?a Nieto.
Con la reforma fiscal el Gobierno pretende aumentar la recaudaci¨®n del Estado en 230.000 millones de pesos (17.830 millones de d¨®lares) para el a?o 2014. Los nuevos impuestos incluyen el aumento del gravamen sobre la renta de quienes ganan m¨¢s de 500.000 pesos al a?o (unos 39.000 d¨®lares), el fin de tres d¨¦cadas de privilegios fronterizos con la subida del IVA en la larga franja con EE UU y en la zona de cara a Centroam¨¦rica del 11 al 16% para igualarse con el del resto de la rep¨²blica, o un nuevo impuesto a los refrescos y a la comida basura -con alto contenido cal¨®rico-, que el Gobierno preconiza como un mecanismo de lucha contra los altos ¨ªndices de obesidad del pa¨ªs.
El camino de la reforma hacendaria hasta su aprobaci¨®n no ha sido f¨¢cil. De hecho se ha convertido ya en la primera medida del Pacto por M¨¦xico que sale adelante sin el acuerdo de los tres grandes partidos mexicanos, despu¨¦s de la oposici¨®n de los panistas. El PRI no tiene mayor¨ªa suficiente en ninguna de las dos c¨¢maras del Congreso. El texto solvent¨® su primer escollo hace diez d¨ªas en la C¨¢mara de Diputados gracias a una alianza del partido del presidente con el PRD, que negoci¨® a cambio de mayores ingresos para el Distrito Federal, gobernado por la izquierda.
El paso por el Senado, sin embargo, ha sido mucho m¨¢s tortuoso. Los legisladores perredistas, aunque finalmente han acabado cediendo los votos necesarios para avalar la reforma, decidieron jugar sus cartas para sacar mayor r¨¦dito a su apoyo con un abanico de propuestas que en su mayor¨ªa han sido rechazadas. La batalla (anunciada como ¡°la madre de todas las batallas¡±) que la oposici¨®n promet¨ªa en el Senado para tratar de reformar la reforma del presidente, al menos en materia de impuestos, qued¨® solo en eso: una promesa. Las banderas izadas por los opositores se fueron cayendo una a una durante la tarde y noche del martes. La aprobaci¨®n ya de madrugada del mi¨¦rcoles del aumento de impuestos en la frontera, a la que se opon¨ªan PAN y parte del PRD y que ha suscitado numerosas cr¨ªticas en los Estados del norte que ven peligrar su competitividad de cara a Estados Unidos, acab¨® por hacer estallar a los conservadores.
"Si toda esta sesi¨®n es una farsa para aprobar lo que de antemano ya est¨¢ acordado en otro lugar, el grupo parlamentario del PAN se retira", anunci¨® el coordinador Jorge Luis Preciado. Al PAN le siguieron los senadores del PRD que votaron en contra de la reforma. La sesi¨®n fue suspendida y se prev¨¦ que se reanude en alg¨²n momento antes del jueves para rematar los flecos pendientes. La holgada mayor¨ªa de votos que han cosechado hasta ahora todas las propuestas pri¨ªstas no hacer prever cambios sustanciales.
La reforma tambi¨¦n pas¨® por encima de los empresarios, muy cr¨ªticos con los cambios. La mayor¨ªa de sus demandas no fueron escuchadas. Se mantiene as¨ª el incremento de la tasa de tributaci¨®n, la no deducibilidad de las prestaciones laborales como el seguro social o la consolidaci¨®n fiscal, que obligar¨¢ a los grupos empresariales a tributar de forma independiente por cada una de sus empresas, un mecanismo hasta ahora utilizado por algunos para pagar menos impuestos. Tampoco es probable que vaya a tumbarse el impuesto a los refrescos o a la comida basura, diana del sector azucarero y cuya campa?a a nivel nacional en contra de la medida, con anuncios a toda p¨¢gina en la prensa, habr¨ªa ca¨ªdo en saco roto.
Ahora la reforma regresar¨¢ a la C¨¢mara de Diputados para refrendar contrarreloj los peque?os cambios hechos al texto. La reforma tiene que salir completamente avalada por las dos c¨¢maras antes del jueves, fecha l¨ªmite para aprobar la ley de ingresos para 2014, que variar¨¢ en funci¨®n del texto que finalmente se apruebe. Entre las modificaciones introducidas por el Senado est¨¢ un cap¨ªtulo de medidas de transparencia y de fiscalizaci¨®n y racionalizaci¨®n del gasto, una exigencia del perredista Armando R¨ªos P¨ªter, que ha sido uno de los senadores de la izquierda que ha votado a favor de todo el texto. El grupo de senadores del PRD que ha apoyado la reforma sostienen que su aval responde al car¨¢cter social de la reforma, que persigue aumentar la recaudaci¨®n para, entre otras cosas, establecer la pensi¨®n universal para mayores del 65 a?os y el seguro de desempleo.
A punto de rematar una semana de debates interminables, el Senado ya tiene entre manos otro reto que en principio se espera menos complicado. Los diputados ya dieron el primer paso la semana pasada al aprobar los dos de los pilares sociales de la reforma hacendaria. Tanto la pensi¨®n universal como el seguro de desempleo pretenden animar a los trabajadores a no caer en el sector informal, ajeno al sistema de impuestos y que actualmente ocupa al 59% de los mexicanos, y paliar la situaci¨®n de pobreza en la vejez, que afecta al 43% de la poblaci¨®n mayor de 60 a?os, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica y Geograf¨ªa (INEGI).
Est¨¢ por ver, sin embargo, c¨®mo resuelven los tres partidos del Pacto por M¨¦xico los problemas internos despu¨¦s del desgaste ocasionado por la reforma fiscal. El senador panista Javier Corral ya advirti¨® este mi¨¦rcoles que su partido deber¨ªa abandonar el pacto por la "imposici¨®n" de la reforma sobre la base del "silenciamiento y la censura". Una ruptura del acuerdo dejar¨ªa en el aire dos de las reformas que ya est¨¢n sobre la mesa: la energ¨¦tica y la pol¨ªtica, vitales para que el presidente pueda seguir cumpliendo con su agenda.
Las principales medidas
Aumento del Impuesto Sobre la Renta (ISR)
Las personas que ingresen m¨¢s de 500.000 pesos al a?o (unos 38.000 d¨®lares) ver¨¢n c¨®mo aumenta sus impuestos sobre la renta. Aquellos que ganen de 500.000 hasta 750.000 pesos pagar¨¢n el 31%; el ISR ser¨¢ del 32% para los que ingresen entre 750.000 pesos y un mill¨®n. A aquellos que ganen entre uno y tres millones se les aplicar¨¢ un 34% y los que ingresen m¨¢s de tres millones pagar¨¢n el m¨¢ximo, un 35%.
IVA unificado en el territorio mexicano
La reforma acaba con el r¨¦gimen especial de IVA reducido del 11% que ten¨ªan las zonas fronterizas desde hace 30 a?os. El impuesto se unifica en todo el pa¨ªs al 16%.
Otros art¨ªculos con IVA
Algunos art¨ªculos que gozaban de una exenci¨®n de IVA dejar¨¢n de contar con ¨¦l. Es el caso del transporte terrestre de pasajeros - salvo en ¨¢reas urbanas, suburbanas y metropolitanas-, los chicles o la compra de mascotas y de alimentos para mascotas, entre otras. Tambi¨¦n se pagar¨¢ IVA en la compra-venta de viviendas por valor superior a 3,5 millones de pesos (unos 272.000 d¨®lares).
Impuesto sobre las ganancias en Bolsa
Las ganancias en la Bolsa Mexicana de Valores se ver¨¢n gravadas con el 10%.
Impuesto contra la obesidad
Las bebidas saborizadas estar¨¢n gravadas con peso por cada litro y se establece un nuevo impuesto del 5% sobre la comida basura (con alto contenido cal¨®rico).
Consolidaci¨®n fiscal
Los grupos empresariales se ver¨¢n obligados a tributar de forma independiente por cada una de sus empresas, no como hasta ahora, lo que era utilizado por algunos conglomerados para pagar menos impuestos.
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