¡°La crisis es una niebla que te impide ver qui¨¦n eres como naci¨®n¡±
Mercadante presenta el libro 'Brasil: De Lula a Dilma (2003-2013)' y habla de su experiencia durante aquella d¨¦cada
Aloizio Mercadante recuerda perfectamente aquel oto?o de 2002 cuando el Partido de los Trabajadores (PT) se dispon¨ªa a ganar por primera vez las elecciones y colocar a Lula da Silva como presidente. Pocos d¨ªas antes de la votaci¨®n, en una entrevista con EL PA?S, Mercadante respond¨ªa a las fuerzas de la derecha y a los mercados financieros, que auguraban un desastre si ganaba su partido, y les acusaba de ¡°terrorismo econ¨®mico¡±. Hoy recuerda que entonces ¡°el financiero George Soros dijo en una entrevista que un pa¨ªs con la deuda de Brasil y subordinado al FMI no deb¨ªa tener una consulta democr¨¢tica. Dijo que los acreedores deb¨ªan enviar un gestor, que el gestor de la deuda no pod¨ªa ser el PT. Hab¨ªa un indicador, que llamaban lul¨®metro, que indicaba c¨®mo aumentaba el riesgo-pa¨ªs con la campa?a de Lula¡±. El partido tuvo que publicar una carta de compromiso con la estabilidad macroecon¨®mica. El PT gan¨® las elecciones. Lula, en su cuarto intento, lleg¨® a la Presidencia. ?l fue el senador m¨¢s votado de la historia de Brasil.
Mercadante llevaba en el PT, trabajando con Lula, desde antes de su fundaci¨®n hace tres d¨¦cadas. Fue candidato a vicepresidente, diputado, senador y coordinador de las campa?as electorales. Ahora, como ministro de Educaci¨®n en el Gobierno de Dilma Rousseff, ofrece un libro que arranca tras aquellas elecciones y relata lo que sucedi¨® despu¨¦s: Brasil: De Lula a Dilma (2003-2013), (Ed. Clave Intelectual). Este jueves lo presentaba en la Casa Am¨¦rica de Madrid, donde se realiz¨® la entrevista. ¡°Creo que 10 a?os despu¨¦s podemos hacer un balance positivo. Mantuvimos la estabilidad, hicimos todos los cambios dentro de la democracia, fortaleciendo las instituciones republicanas, nunca cuestionamos una decisi¨®n de la justicia o el legislativo, con la m¨¢s amplia libertad de prensa y manifestaci¨®n. Hicimos el m¨¢s importante proceso de inclusi¨®n social de la historia de Brasil. El proyecto del libro es mostrar ese modelo alternativo de desarrollo¡±.
El modelo consisti¨® en ¡°construir lo social como eje estructural de progreso econ¨®mico, creando u gran mercado de consumo de masas a trav¨¦s de una fuerte pol¨ªtica de inclusi¨®n social¡±. Mercadante, economista de formaci¨®n, explica que ¡°un mercado interno fuerte te da escala y competitividad para las exportaciones¡±. ¡°Pr¨¢cticamente hemos erradicado la pobreza absoluta, recuperamos el crecimiento y creamos 20 millones de empleos¡± en esta d¨¦cada. ¡°El centro de nuestra perspectiva era distribuir para crecer y crecer distribuyendo, y crear un amplio mercado de consumo de masas¡±, a?ade. ¡°Este proyecto de colocar lo social como eje de desarrollo creo que es la gran novedad hist¨®rica¡±.
Rechaza el t¨¦rmino ¡°dar lecciones¡± para hablar de la experiencia brasile?a, pero la realidad es que ¡°despu¨¦s de 20 a?os de estancamiento y 14 de hiperinflaci¨®n tenemos un posdoctorado en crisis, aprendimos mucho¡±. Forjaron su propio camino frente a los que opinaban que bastaba con enviar ¡°al FMI all¨ª, a la troika aqu¨ª¡±. Lo primero que aprendieron, dice Mercadante, es que ¡°la crisis es una niebla que no te deja ver el futuro, no ves lo que eres como naci¨®n. Pierdes la autoestima y la confianza en la sociedad¡±. Y ya entrando en comparaciones, ¡°si te paras a pensar cu¨¢l era la potencialidad de Brasil entonces y la de Espa?a ahora, yo sinceramente querr¨ªa tener los problemas que Espa?a tiene: unas infraestructuras fant¨¢sticas, un nivel alto de educaci¨®n, innovaci¨®n, empresas modernas y eficientes, y todo en el contexto de una de las experiencias m¨¢s ricas que es la integraci¨®n en la UE. Hay problemas importantes, pero hay un enorme potencial¡±.
En su caso, para aprovechar ese potencial hizo falta una izquierda con los pies en la tierra. ¡°No quer¨ªamos ser la izquierda t¨ªpica. La izquierda est¨¢ siempre so?ando el futuro para que gobierne la derecha. Es una izquierda que tiene la protesta como propuesta y cree que puede so?ar el futuro sin asumir la responsabilidad de gobernar, con los errores y limitaciones que conlleva. Quer¨ªamos ser una izquierda representativa¡±.
Esa izquierda propuso una salida de la crisis propia: sacar primero a la gente de la pobreza, darle algo de seguridad e incorporarla al consuno para hacer crecer el pa¨ªs, en un ciclo virtuoso. Mercadante lo opone a ¡°la ortodoxia econ¨®mica recesiva¡±. ¡°Por m¨¢s que aumentes los impuestos y recortes el gasto p¨²blico para mejorar la relaci¨®n deuda/PIB, est¨¢s siempre reduciendo el denominador, el PIB. Esta relaci¨®n nunca evoluciona positivamente¡±. ¡°Siempre se puede recortar algo. Pero si haces un corte muy brusco provocas un efecto multiplicador, empujas al pa¨ªs a la recesi¨®n y nunca consigues ajustar¡±.
En este tiempo de Gobierno, aparte de los ¨¦xitos, el PT tambi¨¦n se ha visto enfangado en sonados casos de corrupci¨®n que incluso han llevado a buena parte de su c¨²pula a la c¨¢rcel. Para Mercadante, se trata de un problema del sistema electoral. ¡°Primero, en Brasil hoy hay mucha m¨¢s transparencia, fiscalizaci¨®n y combate a la impunidad¡±, dice a modo de introducci¨®n. ¡°No hay ninguna denuncia de enriquecimiento personal, de apropiaci¨®n de recursos. Lo que hay es un problema de financiaci¨®n de las campa?as electorales, que desgraciadamente est¨¢ presente en todos los partidos de Brasil. El origen est¨¢ en un mecanismo de financiaci¨®n que no est¨¢ bien calibrado. La democracia tiene un costo y la sociedad tiene que asumir esto con transparencia. El PT quiere el fin de la financiaci¨®n privada. Hay una dimensi¨®n oculta en la democracia: las empresas tienen intereses pol¨ªticos, quieren financiar partidos, pero no quieren aparecer. No hay como financiar una campa?a pol¨ªtica en Brasil de forma competitiva sin esta financiaci¨®n. Creo que es un problema internacional¡±. La presidenta Rousseff trat¨® de convocar un plebiscito para definir mejor las reglas pol¨ªticas, incluyendo este delicado aspecto de la financiaron de partidos. El Legislativo lo rechaz¨®. ¡°Los parlamentarios tienen un alto inter¨¦s, ellos llegaron con estas reglas y no quieren cambiarlas¡±. ?Y no basta con hacer campa?as m¨¢s baratas? ¡°El coste de la campa?a en Brasil est¨¢ en la televisi¨®n. Tomamos muchas medidas para reducir costes, pero no es suficiente. Hace fata una forma de financiaci¨®n p¨²blica y transparente, no hay otra soluci¨®n¡±.
En la historia de esta d¨¦cada y de las lecciones que Mercadante ha sacado, destaca un factor sin el cual quiz¨¢ no se entiende lo que ha ocurrido en Brasil. El personaje Lula. ¡°Lula es el l¨ªder popular m¨¢s importante de la historia reciente de Brasil¡±, dice Mercadante, que trabaja con ¨¦l desde los a?os 70. ¡°Independientemente de mi compromiso, Lula es el gran l¨ªder hist¨®rico¡±. Ahora, Dilma Rousseff, ¡°la primera mujer, que con 20 a?os estaba presa y sufri¨® torturas, tiene coraje hist¨®rico, actitud republicana, valor en la gesti¨®n¡ es una bonita evoluci¨®n¡±. Por su parte, cuando se dispon¨ªa a ganar las elecciones por primera vez, en aquel 2002, Lula dec¨ªa que Mercadante era uno de los mejores economistas de Brasil. ¡°Lula tambi¨¦n comete errores¡±, se carcajea.
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