Mueren tiroteados dos soldados franceses en la Rep¨²blica Centroafricana

El presidente franc¨¦s, Fran?ois Hollande, se desplaz¨® esta tarde a Bangui, la capital de la Rep¨²blica Centroafricana, despu¨¦s de asistir en Johanesburgo a los funerales de Nelson Mandela. Hollande mostr¨® as¨ª su apoyo a la Operaci¨®n Sangaris, que tiene desplegados 1.600 militares en la excolonia francesa, y pudo velar los cuerpos de los dos primeros soldados franceses muertos sobre el terreno. Antoine Le Quinio y Nicolas Vokaer, de 22 y 23 a?os, paracaidistas de Infanter¨ªa de Marina, fueron abatidos el lunes a medianoche por los tiros de milicianos musulmanes mientras patrullaban las calles de la capital, seg¨²n confirm¨® este martes el ministerio de Defensa.

La visita del jefe del Estado al avispero centroafricano, solo unos d¨ªas despu¨¦s de que el inquilino del El¨ªseo enviara a 1.200 nuevos soldados a Bangui, tiene un alto valor simb¨®lico y pol¨ªtico. Hollande se iba a entrevistar con las autoridades que lideran la complicada transici¨®n de un Estado fallido, el primer ministro Nicolas Tiangaye y el autoproclamado presidente Michel Djotodia, exjefe de la milicia reunida en torno a la heterog¨¦nea coalici¨®n de mayor¨ªa musulmana Seleka.

Djotodia lidera el pa¨ªs desde el golpe de Estado del 24 de marzo, cuando Seleka tom¨® Bangui y oblig¨® a huir a Camer¨²n al presidente Fran?ois Boziz¨¦, que a su vez lleg¨® al poder en 2003 gracias a otro golpe de Estado. En agosto, la milicia caus¨® numerosas muertes, violaciones y pillajes entre la comunidad cristiana, que supone el 80% de la poblaci¨®n. Aunque Djodotia disolvi¨® a Seleka en septiembre, muchos grupos siguieron activos, y las matanzas se repitieron en octubre y se recrudecieron en los ¨²ltimos d¨ªas causando docenas de muertos, lo que empuj¨® a Francia a intervenir, con el aval del consejo de Seguridad de la ONU, para proteger a los civiles y ayudar a la misi¨®n de paz panafricana, la MISCA.

La situaci¨®n en Bangui, una ciudad de un mill¨®n de habitantes, es de calma tensa desde el lunes. Aunque el Estado Mayor galo afirm¨® que los grupos armados estaban tranquilos y explic¨® que 2.017 hombres y mujeres hab¨ªan comenzado a acantonarse en el campamento Beal, una de las cuatro zonas habilitadas para el desarme, en algunos barrios los pistoleros segu¨ªan disparando. Diversos medios franceses comprobaron sobre el terreno que los saqueos de tiendas musulmanas y los linchamientos por parte de los grupos de autodefensa cristianos ¡ªllamados los antibalaka, antimachete en la lengua local sango¡ª son tambi¨¦n moneda corriente.

La crisis pol¨ªtica y de seguridad en la Rep¨²blica Centroafricana, un pa¨ªs de 4,6 millones de habitantes, ha puesto a la mitad de la poblaci¨®n, seg¨²n la ONU, en una situaci¨®n de indefensi¨®n y precariedad total. La oficina encargada de la ayuda humanitaria, la OCHA, ha contado 400.000 desplazados internos y 68.000 refugiados en los pa¨ªses vecinos, especialmente en la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo. M¨¢s de 1,1 millones de personas se han visto afectadas por la inseguridad alimentaria. El objetivo de Par¨ªs, seg¨²n ha declarado el ministro de Defensa, Jean-Yves Le Dian, es ¡°reconstruir un pa¨ªs que ya no existe¡±.