¡°Salir del Pacto por M¨¦xico es liberar al Gobierno de sus obligaciones¡±
El dirigente de la derecha mexicana intenta mantener vivo el hist¨®rico acuerdo entre partidos
Gustavo Madero (Chihuahua, 1955) se alarma cuando ve una peque?a estatua de barro quebrada en su librero. ¡°?Ahora qu¨¦ le hicieron a mi t¨ªo abuelo?¡±, dice mientras toma en sus manos una figura de Francisco Madero, presidente de M¨¦xico asesinado en un golpe de estado en 1913 durante la Revoluci¨®n Mexicana. As¨ª, roto, fue como qued¨® el Partido Acci¨®n Nacional (PAN, de derechas) en 2012 despu¨¦s de perder la presidencia y quedar en el tercer lugar. Este a?o, sin embargo, han logrado remontar algo de terreno. Madero es uno de los diez padres del Pacto por M¨¦xico, un acuerdo entre los principales partidos pol¨ªticos para impulsar una agenda de 95 compromisos que en 2013 logr¨® una decena de reformas, cuatro de ellas constitucionales, en temas educativos, laborales, de competencia econ¨®mica, financieros y electorales, entre otros. La ¨²ltima de estas reformas, la energ¨¦tica, que abri¨® la industria del petr¨®leo al capital privado rompi¨® el Pacto por M¨¦xico. La izquierda dej¨® la mesa de acuerdos despu¨¦s de calificar de traidores a la patria a los legisladores del PRI (Partido Revolucionario Institucional) y la derecha.
Pregunta. Su hom¨®logo en la izquierda, Jes¨²s Zambrano, ha dicho que el Pacto por M¨¦xico est¨¢ muerto. ?Lo est¨¢?
Respuesta. No puede estar muerto porque ser¨ªa un error muy grave. Todav¨ªa le tenemos que sacar m¨¢s kilometraje a los compromisos asumidos por el Gobierno. Ellos son los que est¨¢n con mayores pasivos. Salirte del pacto es liberarlo de esas obligaciones. Es un error de c¨¢lculo pol¨ªtico. El PRD pierde de vista esa agenda. Hay que insistir para que siga participando, para que siga siendo vigente. El desencuentro de la reforma energ¨¦tica es un desencuentro de visiones que no debe dinamitar un mecanismo que ha funcionado para el pa¨ªs despu¨¦s de 15 a?os de aton¨ªa.
P. ?Ha hablado con Zambrano para que recapacite?
La sociedad todav¨ªa no le da el golpe por completo a las implicaciones que tienen estas reformas
R. S¨ª, nos llevamos muy bien. Dijimos que cuando se nos enfr¨ªen los humores nos vemos. Despu¨¦s de Reyes.
P. Usted describi¨® el Pacto como un tripode, donde cada pie representaba un partido. Dec¨ªa que la figura no funcionaba sin una de sus patas. Ese modelo ya no existe.
R. ?Por qu¨¦? El tripie no funcion¨® con la reforma fiscal y no rompimos lanzas. La sac¨® el PRI y el PRD. Y la reforma energ¨¦tica el PAN y el PRI. Todo lo dem¨¢s lo hemos sacado juntos. Yo espero que sigamos trabajando entre tres. Ese es el valor agregado del Pacto.
P. ?No perder¨¢ inter¨¦s el PRI en los acuerdos ahora que ya tiene lo que quer¨ªa, la reforma energ¨¦tica?
R. Por lo menos hasta abril el inter¨¦s de las tres partes del Pacto va a mantenernos muy vinculados. Este a?o aprobamos las reformas constitucionales y faltan las reformas legales. De forma obligada vamos a tener que seguir platicando, en el formato que t¨² quieras.
P. ?El balance de lo logrado en 2013 es positivo? No lo veo muy alegre.
R. Al contrario, estoy tan contento que quiero m¨¢s. Lo que hemos hecho este a?o todav¨ªa no se alcanza a dimensionar. Una de mis reflexiones es que la sociedad todav¨ªa no le da el golpe por completo a las implicaciones que tienen estas reformas. Tomar¨¢ tiempo sopesar y aquilatar los cambios estructurales que este pa¨ªs tuvo en el dise?o constitucional de este 2013. Las ventajas y bondades se ver¨¢n en mucho tiempo. La que m¨¢s tardar¨¢ ser¨¢ la educativa. Yo le pongo unos 20 a?os. La siguiente es la energ¨¦tica, yo le pongo de cinco a diez a?os. La de telecomunicaciones de dos a cinco. Pero hab¨ªa que hacerlas. El pa¨ªs estaba demasiado retrasado en estas agendas. Es tan bueno que necesita y puede seguir dando frutos en el 2014.
P. En la energ¨¦tica ustedes votaron algo m¨¢s ambicioso que lo que el propio Gobierno quer¨ªa.
R. Con esto estamos dando sepultura a un mito del nacionalismo revolucionario alimentado por d¨¦cadas por el PRI y el PRD. El PRI tuvo que votar con nosotros en nuestra propuesta de reforma energ¨¦tica. Es un triunfo cultural. Es el reconocimiento de las propuestas del PAN, de tu adversario pol¨ªtico que vota tus propuestas.
Aunque las reformas lleven un cr¨¦dito para el presidente priista lo que hacen es erosionar el sistema del PRI
P. Que ser¨¢ dif¨ªcil de reconocerles. Se dice que la reforma energ¨¦tica ser¨¢ el sello de la presidencia de Enrique Pe?a Nieto.
R. Eso no importa. Ustedes denle las medallas a Pe?a Nieto. El hecho es incontrovertible. La iniciativa de Pe?a Nieto es una copia textual, palabra por palabra, del decreto expropiatorio de L¨¢zaro C¨¢rdenas, de 1938. Esa es la visi¨®n de futuro que tiene el PRI y este Gobierno.
Aqu¨ª hay una lucha m¨¢s profunda. La energ¨¦tica es un triunfo cultural al demostrar que el modelo estatista y monop¨®lico es disfuncional. Se acaba reconociendo como modelo a seguir para el futuro la figura de competencia y apertura de un Estado fuerte con econom¨ªa de mercado. Si revisas las propuestas del Pacto, aunque lleven un cr¨¦dito para el presidente priista, hacen erosionar el sistema del PRI. A futuro, el sistema que lo llev¨® al poder va a estar debilitado. Todas y cada una de estas reformas no lo fortalecen. La reforma educativa, la de telecomunicaciones, la pol¨ªtica, lo que hacen es desmantelar esa red clientelar y corporativa que hace del PRI una red de intereses m¨¢s que un partido pol¨ªtico. Y eso es lo que estamos haciendo. Aunque la persona tenga un beneficio su sistema, que lo aliment¨® y llev¨® al poder, est¨¢ siendo erosionado.
P. Dice que las reformas tienen ADN panista. As¨ª como la energ¨¦tica ha sido aplaudada por algunos sectores la pol¨ªtico electoral ha tendio muchos cr¨ªticos. Jos¨¦ Woldenberg, el expresidente del instituto electoral, est¨¢ entre ellos.
R. Invitamos a Woldenberg al PAN para discutir y analizar. Me qued¨® muy claro donde est¨¢ la diferencia. ?l cree que el sistema pol¨ªtico est¨¢ funcionando. Nosotros creemos que no. En nueve estados del pa¨ªs el PRI ha gobernado toda la vida. Es indefendible. En once el PRI ha perdido en una ocasi¨®n. ?D¨®nde est¨¢ el problema de M¨¦xico? En los congresos de los estados. La transici¨®n est¨¢ detenida. Avanzamos en lo federal, nos fregamos al PRI en la presidencia pero se refugia y se reproduce como cabeza de medusa en 32 entidades donde se enquista y se perpetua.
?C¨®mo rompes esa muralla del autoritarismo? Ganando las elecciones locales. ?C¨®mo lo haces si el gobernador hace todo por ganar primero lo m¨¢s que pueda a la buena y despu¨¦s ganar los distritos a la mala? Aqu¨ª est¨¢ el reto de M¨¦xico. Creo que la reforma electoral va a cambiar esto.
P. ?El Pacto traer¨¢ mejores pol¨ªticos o mejores ciudadanos?
R. No, mejores pol¨ªticos no. Dejar¨¢ un mejor sistema. Uno menos malo. Lo que estamos cambiando son las reglas del juego del sistema para que funcione mejor. Creo en el dise?o de los sistemas, que sacan lo mejor o lo peor de las personas. Ahora tenemos un mal sistema que saca lo peor.
P. La izquierda quiere impulsar una consulta para echar abajo la reforma energ¨¦tica en 2015. ?Qu¨¦ piensa usted de eso?
R. La redacci¨®n del art¨ªculo 35 constitucional y el proyecto que aprob¨® el PRI con el PRD de la ley reglamentaria de la consulta popular no alcanza para lo que ellos quieren. Es imposible. Se puede cambiar la Constituci¨®n, todav¨ªa hay tiempo para eso, pero hoy dice que lo que afecta los ingresos y gastos del Estado mexicano no es motivo de consulta. La energ¨¦tica impacta el 30% de los ingresos del sector p¨²blico. Hoy no hay que enga?ar con que la consulta puede derogar la reforma energ¨¦tica. Hay que impulsar la reforma legal para que puedan haber consultas populares en 2015. Yo quiero apoyar la consulta como un m¨¦todo de participaci¨®n directa en los asuntos p¨²blicos, no para echar abajo una reforma que acabamos de aprobar y que es muy buena.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.