¡°Este no es un conflicto civil, es entre ciudadanos y dictadura¡±
El coordinador del movimiento Causa Com¨²n, del Euromaid¨¢n, defiende la ocupaci¨®n de instituciones en Ucrania como ¡°alternativa pac¨ªfica¡± a la ¡°guerra¡± contra Yanuk¨®vich
La ocupaci¨®n de las instituciones del Estado en toda Ucrania es la ¡°alternativa pac¨ªfica¡± a la ¡°guerra¡± contra el r¨¦gimen representado por presidente V¨ªctor Yanuk¨®vich, tal como lo ve Oleksandr Daniliuk, coordinador del movimiento Spilna Sprava (Asunto Com¨²n), una de las formaciones integradas en el Euromaid¨¢n de Kiev.
Spilna Sprava, que plane¨® y ejecut¨® la ocupaci¨®n de la alcald¨ªa de la capital el 1 de diciembre, se apoder¨® esta semana del ministerio de Desarrollo Agr¨ªcola y tambi¨¦n, de forma temporal, del ministerio de Energ¨ªa. Y en la noche del domingo tom¨® el ministerio de Justicia. El s¨¢bado por la noche, en el ministerio de Desarrollo Agr¨ªcola, conversamos con Daniliuk, un empresario que en 2010 encabez¨® una popular protesta (El ¡°Maid¨¢n de los impuestos¡±) contra la pol¨ªtica fiscal de Yanuk¨®vich.
Causa Com¨²n ¡°es un movimiento c¨ªvico que lucha por el poder de los ciudadanos, mediante la democracia directa y representativa¡±, se?ala el activista. Desde el pasado noviembre, dice, unas 200.000 personas, se han convertido en sus simpatizantes, m¨¢s o menos activos, de este movimiento que, seg¨²n dice, tiene activistas tambi¨¦n en las zonas orientales del pa¨ªs.
La irrupci¨®n en el ministerio de Agricultura es parte de la campa?a ¡°Ocupa Ucrania¡±, que a la vez, es la ¡°alternativa a la guerra que intentan imponernos desde el extranjero, porque es evidente que Yanuk¨®vich es una marioneta del Kremlin y lo que sucede, una intervenci¨®n encubierta de Rusia¡±, afirma. La tesis sobre el enfrentamiento de las dos Ucranias es un ¡°mito impuesto por la sociolog¨ªa¡±, se?ala. ¡°No conf¨ªo en los servicios sociol¨®gicos. Este no es un conflicto civil como intentan presentarlo, sino un conflicto entre ciudadanos y dictadura¡±. ¡°Somos una naci¨®n monol¨ªtica, una parte de la cual est¨¢ dispuesta a luchar y otra no, lo que no significa que est¨¦ apoyando a Yanuk¨®vich¡±.
¡°Ocuparemos otros ¨®rganos de poder, pero no somos extremistas, sino gente consciente y disciplinada¡±. Como prueba de ello, asegura que el personal necesario para el funcionamiento del ministerio puede ocupar sus puestos el lunes. Cuesta entender c¨®mo puede compatibilizarse este funcionamiento con el fin de ¡°paralizar las actividades de las autoridades y no darles posibilidad de trabajar¡±, que menciona en otro momento de la entrevista.
En el an¨¢lisis Daniliuk, Ucrania es v¨ªctima de una ¡°provocaci¨®n¡± que cuenta con el ¡°visto bueno de pol¨ªticos irresponsables¡±. Seg¨²n ¨¦l, existe una ¡°operaci¨®n rusa para destruir el Estado ucraniano¡± que ¡°no puede haber sucedido sin el visto bueno de los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU¡±. Estos ¡°lo sab¨ªan y no interfirieron en un proceso que es un peligro para el continente europeo¡±, sostiene.
Cuenta Daniliuk que plante¨® estos argumentos en el cuartel general de la OTAN y ¡°ninguno de los responsables de Rusia quiso o¨ªrlos¡±. ¡°Es muy extra?o que cierren los ojos ante el hecho de que Rusia restablece la Uni¨®n Sovi¨¦tica mediante la formaci¨®n de un cintur¨®n de dictaduras¡±, agrega. Este proceso ¡°puede no realizarse mediante tanques, sino mediante la corrupci¨®n¡±, se?ala.
Le digo que en otros pa¨ªses, como en Espa?a, hay corrupci¨®n sin influencia conocida de Rusia, pero Daniliuk insiste en que, con ayuda de ¡°la falsa sociolog¨ªa¡± y ¡°una enorme suma de dinero gastada por Gazprom [el monopolio de la exportaci¨®n del gas ruso que posee tambi¨¦n una cadena de televisi¨®n]" se ha creado ¡°el mito de las dos Ucranias¡±. ¡°Hay diferencias regionales, pero no confrontaci¨®n¡±, dice. ¡°Queremos una Ucrania donde la mayor¨ªa tenga el poder y respete a la minor¨ªa, sin excesos¡±, se?ala.
Daniliuk es muy cr¨ªtico con los l¨ªderes de la oposici¨®n parlamentaria, quienes ¡°no han cumplido la tarea que se han atribuido a s¨ª mismos¡± y ¡°han monopolizado¡± el Euromaid¨¢n. ¡°Durante dos meses han organizado diez manifestaciones de car¨¢cter nacional en las que no tomaron ninguna decisi¨®n. Hoy, la troika (Vitali Klichk¨®, Arseni Yatseniuk y Oleg Tiagnibok) tiene responsabilidad, junto con Yanukovich, por la sangre derramada, porque no dio ni un solo paso que pudiera regular esta situaci¨®n de forma pac¨ªfica¡±.
El nivel de confianza de los ciudadanos hacia los l¨ªderes de la oposici¨®n es ¡°extraordinariamente bajo¡±, afirma, aunque ¨¦l muestra indulgencia hacia Klichk¨®, quien ¡°se reuni¨® con grupos reales de influencia en el Maid¨¢n, mientras los otros bloqueaban cualquier iniciativa¡±.
¡°La ¡°troika¡± lleg¨® incluso a monopolizar los recursos enviados por los ucranianos de todo el mundo, que no sabemos adonde fueron a parar, en vez de comprar 50 excavadoras para llevarlas de forma pac¨ªfica a las barricadas con la polic¨ªa¡±. ¡°La calle ha existido al margen de los l¨ªderes desde el principio y la gente se ha organizado por s¨ª misma, se ha agrupado en colectivos y grupos de intereses que la ¡°troika¡± no coordinaba¡±. ¡°La calle y la troika han funcionado en paralelo durante estos dos meses, pero la gente va por delante y la ¡°troika¡± por detr¨¢s, intentando hacer que la gente de la vuelta, pero para que la gente de la vuelta hay que ir a la cabeza de la multitud y no a la zaga¡±, se?ala.
Seg¨²n Daniliuk, ¡°la gente no ha perdonado¡± que los l¨ªderes de la oposici¨®n disuadieran a los manifestantes que el 1 de diciembre ¡°estaban dispuestos a echar al ej¨¦rcito y a las BERKUT frente a la administraci¨®n presidencial para tomar la instituci¨®n y demostrar que hab¨ªa ca¨ªdo el r¨¦gimen¡±. ¡°Ellos se llevaron a la gente y los que se quedaron (intentando asaltar la administraci¨®n) fueron golpeados duramente¡±, afirma.
¡°Con su posici¨®n extra?a y pasiva, los partidos pol¨ªticos han llevado al derramamiento de sangre. El 1 de diciembre, el mill¨®n de personas que hab¨ªa en Kiev era suficiente ocupar los ¨®rganos de poder central. Al cabo de una semana, Yanuk¨®vich hubiera dimitido¡± y ¡°hoy ya tendr¨ªamos un nuevo presidente y un nuevo parlamento y a Yanuk¨®vich en el exilio¡±. Los l¨ªderes de la oposici¨®n parlamentaria, sin embargo, se pusieron ¡°nerviosos¡±.
¡°Despu¨¦s de que yo tomara el ayuntamiento, me llamaron los representantes del Comit¨¦ de Resistencia Nacional (formaci¨®n organizada por partidos pol¨ªticos de oposici¨®n y organizaciones sociales) y me pidieron que interrumpiera las ocupaciones¡±. ¡°Nos llamaron provocadores por tomar el ayuntamiento y nos sacaron de all¨ª, y luego, cuando comenzamos a ocupar la Casa de Ucrania (un edificio que alberga instituciones culturales y sociales), nos pidieron que nos par¨¢ramos¡±. (Mientras escribo estas l¨ªneas, la Casa de Ucrania ha sido ocupada por los manifestantes).
Daniliuk est¨¢ a favor de elecciones organizadas de forma independiente, tras la formaci¨®n de un gobierno transitorio de compromiso, y de la reforma de la constituci¨®n. El activista se manifiesta en contra del reparto de armas y a favor ¡°de hablar con todos, incluso con esos canallas de la BERKUT o las tropas del ministerio del Interior¡±. ¡°No queremos muertos, estamos dispuestos a amnistiarlos, si dejan de combatir¡±. Admite, no obstante, que no se puede excluir el factor venganza. ¡°No podemos parar a los parientes y allegados de la gente que ha perecido a consecuencias de las acciones sangrientas de este r¨¦gimen. No podemos garantizar la seguridad de Yanukovich, porque ha cometido delitos en nuestro pa¨ªs. La elite y las instituciones pueden llegar a compromisos, pero la gente que sufri¨®, no¡±. ¡°Por eso, contin¨²a, ¡°es importante que nosotros hayamos aparecido oportunamente, porque nos hemos institucionalizado y somos la fuerza que realmente representa a la calle y con quien mantener conversaciones¡±. ¡°Hoy se puede limitar la agresi¨®n, pero, tanto si se desaloja el Maid¨¢n como si no, hay varios centenares de desaparecidos, una decena de muertos y unos mil heridos, as¨ª que hay tambi¨¦n decenas de miles de personas no van a perdonar nada. Nadie da garant¨ªas a los que participaron en asesinatos y en la escalada del conflicto¡±.
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