¡°Es imposible que no sepan nada con la tecnolog¨ªa de hoy¡±

Poco antes de subir en el avi¨®n del vuelo MH370 que despeg¨® en la madrugada del s¨¢bado pasado de Kuala Lumpur rumbo a Pek¨ªn, Lin Annan, un joven de 27 a?os que estudia en la capital de Malasia, llam¨® por tel¨¦fono a su madre en China. ¡°Me dijo que volv¨ªa con un grupo de amigos¡±, cuenta esta mujer de 49 a?os que vive en la provincia de Qinghai (oeste de China). Fue la ¨²ltima vez que oy¨® su voz. Lin Annan nunca lleg¨® a Pek¨ªn. El Boeing 777-200 en el que viajaba con otros 226 pasajeros y 12 tripulantes se esfum¨® sin dejar rastro en alg¨²n punto entre Malasia y Vietnam menos de una hora despu¨¦s del despegue, y cuatro d¨ªas despu¨¦s sigue sin aparecer.

La madre no puede contener el dolor. Las l¨¢grimas asoman tras las gafas oscuras y comienzan a descender por sus mejillas. ¡°La compa?¨ªa a¨¦rea no nos ha dado ninguna informaci¨®n sobre qu¨¦ ocurri¨® con el avi¨®n¡±, dice con voz temblorosa. Su marido, un hombre entero y fuerte, la coge del brazo con cari?o y afirma: ¡°Es imposible que no se sepa nada. ?Con lo desarrollada que est¨¢ la tecnolog¨ªa hoy d¨ªa, c¨®mo puede ser que no lo encuentren? Deb¨ªa tener combustible para todo el vuelo, que dura seis horas, pero solo vol¨® una o dos. ?D¨®nde est¨¢ el resto del combustible?¡±

La pareja habla mientras sale del hotel de Pek¨ªn en el que han sido concentrados por la compa?¨ªa a¨¦rea Malaysia Airlines los familiares de los pasajeros, a la espera de unas noticias que no llegan. Tras las puertas de madera del sal¨®n en el que han sido reunidos, intentan hacer frente al dolor, la frustraci¨®n y la incertidumbre por tantos interrogantes. Les acompa?an funcionarios malasios y chinos, y psic¨®logos y expertos desplazados a Pek¨ªn por la aerol¨ªnea para apoyarles. Ante el tiempo transcurrido desde que se perdi¨® el contacto con el avi¨®n, los responsables de la aerol¨ªnea han instado a las familias a ¡°prepararse para lo peor¡±.

Si en un principio la b¨²squeda del aparato se centr¨® en el mar entre Malasia y Vietnam, la atenci¨®n ha basculado ahora a la costa oeste de Malasia, seg¨²n ha asegurado este martes Malaysia Airlines en un comunicado. ¡°Los equipos de b¨²squeda y rescate han expandido el alcance m¨¢s all¨¢ de la ruta de vuelo. El foco est¨¢ ahora en el oeste peninsular de Malasia y el estrecho de Malacca. Las autoridades est¨¢n mirando la posibilidad de que se produjera un intento del vuelo MH370 de regresar a Subang (Malasia). Se est¨¢n mirando todas las posibilidades". La compa?¨ªa afirma que, adem¨¢s de en el mar, se est¨¢ buscando en tierra entre esas ¨¢reas. Una flota compuesta por 42 barcos y 35 aeronaves de una decena de pa¨ªses participa en las labores de b¨²squeda.

La decisi¨®n de mirar en el oeste de Malasia se ha producido despu¨¦s de que el general Rodzali Daud, jefe de la fuerza a¨¦rea de Malasia, asegurara el domingo que los registros de radar militares indican que el avi¨®n pudo dar la vuelta respecto a la ruta prevista, algo de lo que la tripulaci¨®n deber¨ªa haber informado a los controladores a¨¦reos y no hizo. Un alto mando de la aviaci¨®n militar malasia ha declarado a CNN que los radares detectaron por ¨²ltima vez el vuelo a las 2.40 del s¨¢bado en Pulau Perak, una peque?a isla del estrecho de Malacca.

Inicialmente se crey¨® que el vuelo MH370 pudo estrellarse en el mar a mitad de camino entre la ciudad de Kota Bharu (costa este de Malasia) y la punta sur de Vietnam, ya que es aqu¨ª donde se perdi¨® el contacto con los radares civiles cuando volaba ya a altitud de crucero, a unos 10.000 metros. El lunes, fue ampliado el radio de b¨²squeda de 50 millas n¨¢uticas a 100 millas (185 kil¨®metros) en esta zona alrededor del punto en el que desapareci¨®.

Mientras los equipos peinan mar, cielo y tierra, la paciencia de las familias de los pasajeros se est¨¢ agotando. Se quejan de que los responsables de la aerol¨ªnea tardaron horas en informar de que el avi¨®n hab¨ªa desaparecido y que despu¨¦s no les han facilitado suficiente informaci¨®n. Cada vez est¨¢n m¨¢s frustradas por la falta de respuestas ante unos interrogantes que se suceden uno tras otro. Tanto las manchas de petr¨®leo como posibles piezas que fueron avistadas en el mar no corresponden al aparato.

¡°El marido de mi sobrina iba en el vuelo. Trabaja en Kuala Lumpur con otros compa?eros chinos. Tiene 24 o 25 a?os¡±, dice Zhang, una mujer de 64 a?os. ¡°Las familias que est¨¢n en la sala est¨¢n muy enfadadas porque no reciben ninguna respuesta. Todo lo que nos dicen es ¡®No sabemos qu¨¦ ha ocurrido¡±. Las teor¨ªas de lo sucedido oscilan desde una explosi¨®n repentina en pleno vuelo por alg¨²n problema t¨¦cnico o una bomba, a un secuestro e incluso un suicidio del piloto. El director de la CIA, John Brennan, ha recalcado este martes que no se puede "descartar ninguna teor¨ªa".

La tensi¨®n ha llegado al Gobierno de China ¨Cpa¨ªs del que son 153 de los 227 pasajeros-, que ha presionado a las autoridades de Malasia para que aceleren la b¨²squeda del aparato. ¡°Este incidente pas¨® hace m¨¢s de dos d¨ªas, esperamos que los malasios puedan entender plenamente la urgencia que tiene China, especialmente las familias, y puedan acelerar la velocidad de la investigaci¨®n e incrementar los esfuerzos de b¨²squeda y rescate¡±, asegur¨® el lunes Qin Gang, portavoz de Exteriores. Hoy ha vuelto a insistir en que se d¨¦ a las familias ¡°informaci¨®n precisa y temprana¡±.

Qin ha reconocido, sin embargo, que ¡°el incidente contin¨²a bajo investigaci¨®n¡±, y que es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre lo que pudo provocar que el aparato se evaporara sin emitir siquiera un aviso de emergencia. La prensa estatal china ha sido menos comedida y ha fustigado al Gobierno de Malasia y la aerol¨ªnea por la gesti¨®n de la cat¨¢strofe, y ha pedido respuestas y mayores esfuerzos. ¡°Malasia no puede eludir sus responsabilidades¡±, afirma el diario Global Times, que est¨¢ ligado al Diario del Pueblo, ¨®rgano oficial del Partido Comunista Chino. ¡°La respuesta inicial de Malasia no fue lo suficientemente r¨¢pida¡±.

El peri¨®dico acusa tambi¨¦n a Malasia de tener problemas de seguridad en sus aeropuertos. ¡°Hay agujeros en la forma en que trabajan Malaysia Airlines y las autoridades de seguridad¡±, dice. ¡°Si (la desaparici¨®n) es debida a un problema mec¨¢nico o un error, la culpa es de Malaysia Airlines. Si se trata de un ataque terrorista, entonces hay que cuestionar los controles de seguridad en el aeropuerto de Kuala Lumpur y en el vuelo¡±. Malasia Airlines ha replicado en su comunicado: ¡°Estamos tan ansiosos como las familias por saber el estado de sus seres queridos¡±.

A la vez que presiona, Pek¨ªn ha enviado cuatro barcos para ayudar en los trabajos de b¨²squeda, tiene otros cuatro de camino, y, seg¨²n asegura hoy el Diario del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n del Pueblo, ha desplegado 10 sat¨¦lites, que permiten tomar im¨¢genes de alta resoluci¨®n de la superficie de la Tierra. Vietnam est¨¢ buscando en sus junglas, zonas monta?osas y cerca de las fronteras con Laos y Camboya.

El vuelo MH370, operado en c¨®digo compartido con la compa?¨ªa china Southern Airlines, despeg¨® de Kuala Lumpur a las 00.41, hora local, del s¨¢bado (17.41 del viernes en la Espa?a peninsular), y ten¨ªa previsto aterrizar en la capital china seis horas despu¨¦s. Tres una hora de vuelo, se perdi¨® el contacto con el avi¨®n. Los pilotos no tuvieron tiempo, o no pudieron, enviar una se?al de alarma, por lo que algunos expertos creen que se produjo una explosi¨®n repentina en pleno vuelo.

El director de la Autoridad de Aviaci¨®n Civil de Malasia, Azharuddin Abdul Rahman, afirm¨® el lunes que la desaparici¨®n del vuelo MH370 es ¡°un misterio sin precedentes en la aviaci¨®n¡±. Para los familiares de los pasajeros, esto solo a?ade frustraci¨®n. En la entrada del hotel en Pek¨ªn, espera un autob¨²s con una docena dentro y varios polic¨ªas ante la puerta. Son algunos de los familiares que han decidido aceptar la oferta de Malaysia Airlines para llevarlos y alojarlos en Kuala Lumpur, y poder estar as¨ª m¨¢s cerca del posible lugar de rescate de los restos del aparato. Otros prefieren quedarse en Pek¨ªn hasta saber m¨¢s. ¡°Nos preguntan si queremos ir a Kuala Lumpur. Para qu¨¦. Lo que queremos en este momento es saber d¨®nde est¨¢ el avi¨®n¡±, asegura el marido de Zhang. ¡°No he pensado en ir a Kuala Lumpur¡±, dice la madre de Lin Annan. ¡°Todo lo que deseo es que mi hijo regrese vivo¡±. Y se le quiebra la voz.