El narcotr¨¢fico compra servicios de ind¨ªgenas paname?os en Dari¨¦n

Bandas narcoguerrilleras colombianas despliegan una intensa ofensiva para reclutar a empobrecidos y j¨®venes ind¨ªgenas paname?os en la selva del Tap¨®n del Dari¨¦n, en zonas cercanas a la frontera entre Panam¨¢ y Colombia, y seducirlos con atractivas ofertas de trabajos que, con pagos de hasta 300 d¨®lares por d¨ªa para el presunto transporte de drogas, les llevan a quedar esclavizados al servicio de la delincuencia transnacional organizada.

El reclutamiento es ejecutado ¡°aparentemente¡± por tropas del Frente 57 de las insurgentes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), denunci¨®, en una entrevista con EL PA?S, el l¨ªder ind¨ªgena paname?o C¨¢ndido Mez¨²a Salazar, cacique general de la comarca de las etnias Ember¨¢ y Wounaan, pueblos que comparten un mismo territorio en 41 comunidades en el oriente de Panam¨¢.

¡°Hay gente armada. Lo podemos decir porque se lo hemos manifestado a las autoridades (paname?as), que a veces no toman la importancia de esa denuncia. All¨ª est¨¢ el Frente 57 de las FARC, ?desde hace muchos a?os¡±, relat¨®.

?¡°Tenemos claros los riesgos. Nos han informado los dirigentes (ind¨ªgenas) que llegan algunas personas, nadie sabe c¨®mo, a buscar trabajadores, j¨®venes m¨¢s que todo, a reclutar j¨®venes para trabajos agr¨ªcolas o, digamos, de carga de sacos de arroz. ?Pero qui¨¦n carga sacos de arroz en medio de la monta?a, a 200, 300 d¨®lares por saco? No sabemos qu¨¦ es¡±, revel¨®.

¡°Simplemente los j¨®venes son propensos porque tienen necesidades econ¨®micas y van por eso. Pero en realidad, ?qui¨¦n paga? No lo sabemos. Lo ¨²nico que ellos nos dicen es: ¡®Bueno, cacique, nos pagaron 200 d¨®lares y yo necesitaba para comprar un libro, un aceite, para comprar arroz¡¯. Son ese tipo de cosas y es lo que est¨¢ pasando y estamos diciendo que no debemos caer en eso. Debemos generar alternativas para que los muchachos no caigan¡±, alert¨®.

Consultado por este diario, el estatal Servicio Nacional de Fronteras de Panam¨¢ (Senafront) replic¨® que el Frente 57 fue desalojado de suelo paname?o tras los operativos desplegados en los ¨²ltimos cuatro a?os y que lo que persiste en Dari¨¦n son ¡°bandas criminales que utilizan estos medios¡± de reclutamiento de ind¨ªgenas. ¡°El transporte de droga de los colombianos es con la complicidad de malos paname?os. Si fuese por necesidad (econ¨®mica), todo el mundo ser¨ªa cargador de droga. Y en Dari¨¦n hay muchas necesidades¡±, aleg¨® Senafront.

Tras admitir que se sabe que j¨®venes ind¨ªgenas son reclutados por las bandas, el Servicio aleg¨® que ¡°hay personas a las que les gusta el dinero f¨¢cil. El narcotr¨¢fico busca precisamente a personas a las que puedan influenciar¡±.

Pisadas de botas

Mez¨²a explic¨® que el fen¨®meno ¡°est¨¢ ocurriendo desde los ¨²ltimos cinco a?os. Tenemos bajo nuestra administraci¨®n el territorio comarcal, de 430.000 hect¨¢reas, en las que desarrollamos actividades forestales. Las comunidades encuentran huellas de pisadas, de botas, y ya se sabe de qui¨¦nes son, sabemos lo que hay¡±.

Ante el reclutamiento de ind¨ªgenas, est¨¢n intentando que los j¨®venes se desarrollen en la actividad forestal. "Con generar alternativas econ¨®micas para ellos se evita en gran parte eso¡±, afirm¨®. Si los j¨®venes carecen de actividad laboral sostenible, el peligro es ¡°provocar desde afuera que estos muchachos se vayan a otro tipo de actividad¡±, narr¨®.

¡°En el territorio comarcal ten¨ªamos la decisi¨®n de decir: ¡®est¨¢ pasando esto¡¯ a las autoridades, que no lo han tomado en serio. Seguimos trabajando en c¨®mo evitar que nuestra gente caiga en el narcotr¨¢fico. Estamos dici¨¦ndole a nuestras comunidades que no puede ser y tener alternativas¡±, describi¨®.

Hasta hace unos a?os, record¨®, la costumbre era que las comunidades detectaran a las guerrillas colombianas que se mov¨ªan entre un lado y otro del l¨ªmite de los dos pa¨ªses.

¡°Inform¨¢bamos a las autoridades paname?as, que nos dec¨ªan que lo que ve¨ªamos eran tallos de pl¨¢tano que se mov¨ªan en las noches. Pero en realidad eran personas armadas, caminando. Esos eran los tipos de eventos que se ve¨ªan en los territorios. En los ¨²ltimos 20 a?os las comunidades han sido afectadas, intervenidas por estas acciones que est¨¢n atemorizando a las comunidades¡±, dijo.

Senafront replic¨® que ¡°eso de que no hay una respuesta (de las autoridades), es totalmente falso¡± y afirm¨® que, por el contrario, ¡°personas no avisan¡±.

Sembrad¨ªo y laboratorio

El panorama de narcoguerrilla en el Dari¨¦n ha generado tensi¨®n. En junio de 2013, y en lo que fue el descubrimiento de la primera plantaci¨®n de hoja de coca en Centroam¨¦rica, un operativo combinado de soldados colombianos y polic¨ªas paname?os en esa vasta y selv¨¢tica zona permiti¨® localizar un sembrad¨ªo en Panam¨¢, cerca de un laboratorio artesanal para producir coca¨ªna.

Un informe oficial del Ministerio de Seguridad P¨²blica de Panam¨¢ revelado tras el hallazgo, detall¨® que fueron dos sembrad¨ªos de aproximadamente dos hect¨¢reas con hoja de coca en la selv¨¢tica regi¨®n de Chucurt¨ª, cerca del Puerto Obald¨ªa, en el litoral paname?o sobre el Mar Caribe, y perteneciente a la comarca ind¨ªgena paname?a de Kuna Yala, otra de las etnias de ese pa¨ªs. En el sector fue descubierto un peque?o laboratorio artesanal para procesar hoja, materia prima para producir coca¨ªna.

La plantaci¨®n produjo unas cuatro o cinco cosechas al a?o y unos 30 kilos por mes y fueron destruidas cerca de 5.000 plantas. Como barrera natural en gran parte del l¨ªmite entre Panam¨¢ y Colombia y una espesa jungla de dif¨ªcil tr¨¢nsito, el Dari¨¦n ha sido utilizado como refugio o santuario de retaguardia por las FARC, acusadas de controlar el negocio del narcotr¨¢fico en esa y otras partes.

Por su cercan¨ªa geogr¨¢fica con las m¨¢s importantes bases de producci¨®n de coca¨ªna¡ªen especial de Colombia¡ªy con los grandes mercados estadounidenses de consumo, Centroam¨¦rica es una plataforma clave de los c¨¢rteles mexicanos y colombianos para contrabandear, almacenar y reexportar estupefacientes a M¨¦xico y Estados Unidos.

El Comando Sur del Ej¨¦rcito de Estados Unidos calcula que del 80% al 90% de la coca¨ªna que ingresa cada a?o al mercado estadounidense pasa por rutas centroamericanas. El Gobierno de Costa Rica estima que unas 900 toneladas de esa droga son traficadas por Centroam¨¦rica, que al a?o apenas decomisa unas 85 toneladas.