¡°Al Sisi no es un nuevo Mubarak¡±

Despu¨¦s de una larga carrera diplom¨¢tica que le llev¨® a presidir la Liga ?rabe, a sus 77 a?os, Amr Musa se ha volcado en la pol¨ªtica egipcia. El decepcionante resultado de su candidatura en las elecciones presidenciales del 2012 no le apart¨® del primer plano. Musa fue el presidente de la Asamblea Constituyente que redact¨® a finales del a?o pasado la nueva Carta Magna del pa¨ªs, y durante la campa?a electoral ha ejercido de principal asesor de Abdelfat¨¢ al Sisi, el futuro presidente de Egipto. EL PA?S ha conversado en su oficina sobre las pasadas elecciones y los planes del nuevo rais.

Pregunta. ?Cu¨¢l es su valoraci¨®n de las pasadas elecciones egipcias?

Respuesta. Creo que ha sido un proceso bien organizado y limpio, sin ning¨²n tipo de manipulaci¨®n, y que ha mostrado cu¨¢l es la voluntad del pueblo egipcio. Al Sisi ha obtenido una s¨®lida y clara mayor¨ªa.

P. Algunos observadores han apuntado que la participaci¨®n fue muy baja, y que la cifra oficial no es cre¨ªble. ?Est¨¢ de acuerdo?

R. Para empezar, la cifra oficial de participaci¨®n no ha sido tan baja. Han votado unos 26 millones de personas, m¨¢s o menos el mismo n¨²mero que en las elecciones de 2012. Respecto a la posibilidad de que haya sido manipulada, no existe ninguna prueba. Las misiones de observadores internacionales, incluida la de la Uni¨®n Europea, han avalado los comicios.

P. Sin embargo, la propia misi¨®n de la UE se?al¨® tambi¨¦n que no se est¨¢n respetando las libertades de asociaci¨®n y expresi¨®n inscritas en la nueva Constituci¨®n. Por ejemplo, se arrest¨® a alg¨²n delegado de la campa?a de Hamd¨ªn Sabbahi.

R. No conozco los detalles de este caso. Se ha de entender que estamos en un periodo de transici¨®n, excepcional, y es posible que se cometan errores que se ir¨¢n subsanando con el paso del tiempo. La nueva Constituci¨®n crea un pa¨ªs libre y democr¨¢tico, lo que yo llamo la Tercera Rep¨²blica. No puede ser que algunos que vienen de capitales europeas nos exijan que adoptemos una serie de libertades, y cuando lo hacemos, nos vengan con nuevas consideraciones. Solo ven lo que les interesa.

P. Parece que muchos j¨®venes no votaron porque creen que se est¨¢ reconstituyendo el viejo Estado de Mubarak. ?Tiene el Gobierno un problema con la juventud?

R. Discrepo de la idea de que la mayor¨ªa de los j¨®venes no votaron. En todo caso, los que piensan as¨ª, tienen todo el derecho a hacerlo. Pero yo le aseguro que no se va a implantar una dictadura como la de Mubarak. No hay vuelta atr¨¢s, es imposible. La Constituci¨®n no es como las anteriores, establece una serie de reglas que limitan los poderes del Estado, y solo se podr¨¢n mover dentro de este marco.

P. ?Cu¨¢les son los principales desaf¨ªos que deber¨¢ afrontar el nuevo presidente?

R. Para empezar, la seguridad. Debe solucionar el problema del terrorismo, sobre todo en la pen¨ªnsula del Sina¨ª. Adem¨¢s, es crucial relanzar la econom¨ªa y revisar las pol¨ªticas del Estado para poder mejorar los servicios que presta. El estado de la burocracia es un serio problema. Muchas de las carencias de Egipto derivan de una mala gobernanza.

P. ?Cree que es posible conseguir la estabilidad sin buscar un acuerdo que resuelva el conflicto con el islamismo pol¨ªtico?

El consenso llegar¨¢ cuando hayamos logrado imponer la estabilidad¡±

R. La secuencia es la contraria: el consenso llegar¨¢ cuando hayamos logrado imponer la estabilidad. Los movimientos islamistas, que no representan m¨¢s del 20% de la sociedad egipcia, son los que deben moverse. Si los Hermanos Musulmanes aceptan las reglas del juego, nada impide que puedan presentarse a las elecciones y contar con docenas de diputados en el Parlamento. La Constituci¨®n no les excluye. Creo que el hecho de que ganaran las elecciones y pudieron gobernar fue muy positivo para Egipto y la regi¨®n porque ofreci¨® a la poblaci¨®n una idea de c¨®mo es su estilo de gobierno y esta lo acab¨® rechazando.

P. ?C¨®mo es Abdelfat¨¢ al Sisi?

R. Es un hombre tranquilo, muy le¨ªdo, que conoce muy bien cu¨¢les son los problemas de Egipto. Sabe escuchar y tiene en cuenta las opiniones de sus asesores. Tambi¨¦n es una persona con una gran determinaci¨®n. Algunos le comparan con otros presidentes, pero ¨¦l no es un nuevo N¨¢sser, Sadat o Mubarak. Al Sisi tiene sus propios planes porque estamos en una era diferente.

P. ?C¨®mo definir¨ªa su ideolog¨ªa, su proyecto para Egipto?

R. Su programa tiene como t¨ªtulo ¡°reconstruir Egipto¡±, y ese es el principal objetivo. Su enfoque parte de una visi¨®n optimista del futuro. Al Sisi no es un ide¨®logo, sino m¨¢s bien una persona con una mentalidad pr¨¢ctica. En algunos temas, sus propuestas est¨¢n pr¨®ximas a los postulados del libre mercado, pero en otros, de la izquierda. En la fase que estamos, no podemos limitarnos a seguir una ideolog¨ªa.

P. ?Se ve ocupando el cargo de primer ministro?

R. Lo que tengo entendido es que Al Sisi pedir¨¢ al actual primer ministro que contin¨²e en el cargo al menos hasta las elecciones legislativas, y como mucho, habr¨¢ algunos cambios menores en el gabinete. En el futuro, me veo formando parte de la escena pol¨ªtica egipcia, pero no s¨¦ en qu¨¦ posici¨®n. Mi objetivo es solo servir a Egipto.