Israel entierra a los tres adolescentes asesinados con una muestra de unidad
El Ej¨¦rcito israel¨ª destruye las casas de los dos palestinos sospechosos de las muertes
El sepelio de los tres j¨®venes israel¨ªes asesinados en Cisjordania se convirti¨® el martes en un acto masivo al que asistieron decenas de miles de personas en el cementerio de Mod¨ªn (oeste de Cisjordania). La multitud, compuesta por israel¨ªes llegados desde todo el pa¨ªs en centenares de autobuses, escuch¨® en silencio las honras f¨²nebres y las palabras del primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, ante los cuerpos de los tres chicos, envueltos solo con banderas. El jefe del Gobierno honr¨® su memoria destacando que su busca demostr¨® el ¡°esp¨ªritu de ciudadan¨ªa¡± de sus compatriotas. Con sus alusiones po¨¦ticas a ¡°la magia de sus sonrisas¡±, Netanyahu apuntaba a la m¨¦dula de los sentimientos israel¨ªes tras el asesinato: las caras de los muchachos de 16 y 19 a?os, omnipresentes desde su desaparici¨®n el pasado d¨ªa 12, les son familiares a todos.
Por la tremenda afluencia y la gravedad respetuosa con que las siguieron tantos miles de israel¨ªes de diversas tradiciones jud¨ªas, etnias o vestimentas, las honras f¨²nebres fueron una potente demostraci¨®n de fuerza y de unidad nacional.
Hebr¨®n es escenario de la mayor operaci¨®n militar desde hace 10 a?os
En los montes que rodean el cementerio, Benjam¨ªn, un jud¨ªo ortodoxo de 39 a?os proveniente de Ashkelon, al sur del pa¨ªs, explic¨® que ¡°la venganza no pertenece al juda¨ªsmo¡±, pero aclaraba que ¡°es una cuesti¨®n de seguridad¡±. Israel, sosten¨ªa sudando bajo su sombrero negro de ala ancha, ¡°es de los jud¨ªos porque lo dice la Biblia¡±. Muchos jud¨ªos practicantes creen que Dios aval¨® hace miles de a?os el contrato que los hace due?os tambi¨¦n de los territorios ocupados de Cisjordania. El discurso com¨²n apenas encontraba fisuras.
De regreso a Jerusal¨¦n, Netanyahu aclar¨® por la noche ad¨®nde seguir¨¢ dirigi¨¦ndose la frustraci¨®n acumulada durante los 18 d¨ªas en los que no se supo nada de Gilad Shaar y Neftal¨ª Fraenkel, de 16 a?os, y Eyal Yifrah, de 19. Dijo que ¡°Israel seguir¨¢ debilitando a Ham¨¢s en la franja de Gaza¡±. El Ejecutivo ha culpado de las muertes a la organizaci¨®n islamista Ham¨¢s, que controla la franja de Gaza desde 2007. Ham¨¢s y otros grupos islamistas se preparan all¨ª para nuevas oleadas de bombardeos, tras los 34 registrados solo en la noche del lunes al martes. Despu¨¦s de Mod¨ªn, Gaza fue el lunes el segundo escenario del recalentamiento de la guerra permanente entre Israel y los palestinos.
El tercero era Hebr¨®n, en Cisjordania, donde Israel continu¨® las operaciones de represalia contra Ham¨¢s despu¨¦s de que el Ej¨¦rcito encontrara los cad¨¢veres de los tres j¨®venes en sus inmediaciones. La principal ciudad cisjordana y motor econ¨®mico palestino ha sido el escenario de la mayor operaci¨®n militar israel¨ª en la regi¨®n desde hace 10 a?os. Tras las grandes redadas de las ¨²ltimas semanas, con unos 420 detenidos, las Fuerzas Armadas hab¨ªan reducido ayer su visibilidad en las calles y en las inmediaciones, pero dejaron huellas tan obvias como la destrucci¨®n de las casas familiares de los dos palestinos a los que acusan de haber perpetrado los asesinatos.
Israel seguir¨¢ debilitando a Ham¨¢s en Gaza Benjam¨ªn Netanyahu, primer ministro israel¨ª
En la de Amer Abu Aishi, de 33 a?os, un boquete negro permit¨ªa ver por la ma?ana lo que queda de la sala de estar del primer piso. Los soldados la asaltaron a la hora de romper el ayuno de Ramad¨¢n.
Destruyeron con detenimiento las cuatro viviendas y tambi¨¦n el autom¨®vil del patriarca, Omar, herrero como su hijo Amer. Est¨¢ detenido desde la madrugada de ayer. Los v¨ªnculos con Ham¨¢s quedan bien expl¨ªcitos en el p¨®ster y los pasquines que, en la planta baja, rinden homenaje a Zaid, muerto en 2005 durante un tiroteo con israel¨ªes cuando ten¨ªa 24 a?os. Amer, su hermano, est¨¢ en lugar desconocido desde hace semanas.
El alcalde de Hebr¨®n, Daud Zatari, explic¨® a un grupo de periodistas que no se sabe si Abu Aishi y su presunto c¨®mplice Marwan Qawasmeh ¡°tuvieron algo que ver¡± con las muertes de los j¨®venes. Lamenta el palestino el dr¨¢stico castigo al que Israel someti¨® a quienes solo son sospechosos y, ¡°sobre todo, a sus familias¡±. La casa de los Qawasmeh estaba ayer en un estado a¨²n peor tras la visita nocturna del Ej¨¦rcito: reventada y con el interior hecho a?icos minuciosos. El cu?ado de Marwan, llamado Hosni, negaba que este sea miembro de Ham¨¢s: ¡°Quiz¨¢ cuando era estudiante¡±. Los sospechosos est¨¢n en busca y captura. Ya no tienen casa ni ellos ni sus familias.
A mediod¨ªa, unos autobuses esperaban a los estudiantes de la escuela talm¨²dica en el coraz¨®n de Hebr¨®n. Se levanta en plena colonia israel¨ª, una zona de la ciudad vedada a los palestinos y estrechamente vigilada por el Ej¨¦rcito. Amiel Lejzor, de 19 a?os, se subi¨® a uno de ellos, que lo llevar¨ªa al entierro. Era compa?ero de Eyal, el mayor de los tres chicos asesinados. Desde el lunes, el ambiente en el internado es ¡°de gran tristeza¡±. Se conoc¨ªan poco, porque ¡°Eyal era nuevo y aqu¨ª apenas hay tiempo m¨¢s que para estudiar¡±. Los j¨®venes estudiantes, contaba Lejzor, aprenden religi¨®n no para seguir una profesi¨®n sino ¡°como una aportaci¨®n al conjunto de Israel¡±.
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