Alejados del pueblo

Los tres a?os de deriva liberal del Partido Socialdem¨®crata (PS) dan¨¦s de Helle Thorning-Schmith pasan factura. Primero fue la crisis en el Gobierno provocada a principios de a?o por la entrada de Goldman Sachs en la el¨¦ctrica Dong Energy, la principal compa?¨ªa energ¨¦tica del pa¨ªs. Los socialdem¨®cratas gobernaban en coalici¨®n con el partido Radikal y los socialistas del SF. Los seis ministros de este ¨²ltimo partido abandonaron en bloque el Ejecutivo.

Despu¨¦s vino la publicaci¨®n, por parte de una garganta profunda del partido, de El secreto socialdem¨®crata, una narraci¨®n an¨®nima hecha por alguien que conoce muy bien al PS y a sus dirigentes y que recoge detalles, nada simp¨¢ticos, del d¨ªa a d¨ªa del Grupo Parlamentario y de la primera ministra. La guinda lleg¨® a principios de abril, cuando varios presidentes locales del partido pidieron la dimisi¨®n de Thorning-Schmith porque sus promesas preelectorales ya nada tienen que ver con las pol¨ªticas poselectorales que est¨¢ aplicando.

A pesar de los buenos datos econ¨®micos ¡ªel PIB del primer trimestre del a?o creci¨® un 0,9%, y el consumo privado, un 2%¡ª y la profunda crisis en la que se halla sumida la segunda fuerza pol¨ªtica del pa¨ªs, los liberales del Venstre, las pasadas elecciones al Parlamento Europeo pusieron de manifiesto el distanciamiento de los votantes. La extrema derecha del Dansk Folkeparti se hizo con 4 de los 13 esca?os a la Euroc¨¢mara con el 26% de los votos.

Kasper Fogh, reconocido veterano socialdem¨®crata dan¨¦s, ley¨® este resultado no en clave europea, sino en clave nacional. ¡°Nuestro partido ya no representa al pueblo, de hecho hay una gran desconexi¨®n entre los votantes y la clase pol¨ªtica. El PDP (Dansk Folkeparti) ha sabido llegar a la gente; sus pol¨ªticos son m¨¢s j¨®venes, no son fruto de largas carreras pol¨ªticas, y hablan un lenguaje que todos entienden¡±. Fogh a?ad¨ªa que el problema se incrementa cuando los partidos tradicionales de la derecha y la izquierda persiguen ¡°casi las mismas pol¨ªticas¡±. ¡°Aqu¨ª, el debate m¨¢s acalorado en el Parlamento es el relativo a si el gasto p¨²blico debe congelarse o crecer un 0,5% durante los pr¨®ximos 15 a?os. ?A cu¨¢ntas personas cree usted que interesa este debate?¡±, explicaba.