Puerto Rico se vac¨ªa lentamente
La poblaci¨®n de la isla decrece por la migraci¨®n y la baja natalidad Aumenta a su vez el n¨²mero de personas que viven en Estados Unidos
Los puertorrique?os no regresan, no nacen ni se quedan en su isla de origen. Desde hace un lustro hay m¨¢s de ellos viviendo en Estados Unidos que en Puerto Rico, donde la poblaci¨®n se avejenta y decrece, en medio de la crisis econ¨®mica que comenz¨® en 2006 y que desde entonces ha impulsado la m¨¢s reciente ola migratoria de isle?os hacia el continente, que ya luce como la m¨¢s grande del ¨²ltimo siglo y no se detiene. Y al mismo tiempo, en tierra firme la comunidad se reacomoda: a la vez que los nuyoricans del norte se desplazan (puertorrique?os en Nueva York), se afianzan en el sur los disneyricans (isle?os que viven en Florida).
Entre el a?o 2000 y el 2010, la poblaci¨®n de Puerto Rico decreci¨® por primera vez en su historia moderna en un 2,2%, de 3,8 millones de habitantes a 3,7 millones, y se cuadruplic¨® el porcentaje de puertorrique?os viviendo en Estados Unidos, de 12% en 1950, en el periodo conocido como ¡°la gran migraci¨®n¡±, a 55% en 2010. En esa d¨¦cada, unas 300.000 personas nacidas en la isla o que hab¨ªan regresado a ella, se mudaron a alguno de los 50 Estados del pa¨ªs norteamericano. Y el flujo de migrantes ha sido much¨ªsimo mayor durante los ¨²ltimos tres a?os: solo entre 2010 y 2013, 144.000 puertorrique?os se mudaron a Estados Unidos y el n¨²mero de habitantes de la isla se contrajo a¨²n m¨¢s ¡ªa 3,6 millones¡ª, de acuerdo con un an¨¢lisis publicado el pasado 11 de agosto por el Centro de Investigaciones Pew.
¡°Esa cifra es realmente impresionante, es la primera vez que se puede documentar esa cantidad¡±. El antrop¨®logo Jorge Duany ha estudiado durante d¨¦cadas los movimientos migratorios en el Caribe, desde del siglo XIX hasta ahora. Seg¨²n su an¨¢lisis, hasta 2010 ¨¦sta era ¡°una naci¨®n en vaiv¨¦n¡±, en un trasiego constante de sus habitantes entre la isla y el continente. ¡°Ese vaiv¨¦n se ha ido reduciendo. Desde 1970 en adelante el flujo de regreso fue significativo, pero ahora el movimiento es en una sola direcci¨®n. Cuando esto empez¨® la gente pens¨® que era m¨¢s de lo mismo. Pero estamos hablando ya de una sangr¨ªa muy grande de personas y que contin¨²a¡±, dice Duany.
Entre 1900 y 2009, 1,8 millones de puertorrique?os hab¨ªan abandonado la isla para irse a Estados Unidos. A partir de 1917, cuando el Congreso otorg¨® la ciudadan¨ªa estadounidense a los puertorrique?os, un buen n¨²mero de ellos se estableci¨® en Nueva York, el puerto mejor conectado con el de San Juan. M¨¢s tarde, entre 1945 y 1965, medio mill¨®n de jornaleros agr¨ªcolas se alistaron en el ej¨¦rcito o fueron empleados como mano de obra barata en las granjas estadounidenses. Este movimiento pas¨® a la historia como ¡°la gran migraci¨®n¡±. Las siguientes tres generaciones de puertorrique?os nacidos en Estados Unidos, los nuyoricans, comenzaron a regresar a la isla a partir de 1970.
Las tasas de natalidad en Puerto Rico est¨¢n entre las m¨¢s bajas de la regi¨®n y de su historia
Solo una d¨¦cada despu¨¦s, se reanud¨® el ¨¦xodo, ya no solo hacia los destinos tradicionales en el noreste ¡ªNueva York, Nueva Jersey, Boston, Hartford¡ª, sino tambi¨¦n en direcci¨®n a la costa oeste y al sur ¡ªCalifornia, Texas, Florida. Y luego en 2006 entr¨® en vigor la eliminaci¨®n de la secci¨®n 936, el programa federal de exenciones contributivas que dio impulso a la industria manufacturera en Puerto Rico y la convirti¨® en el primer destino de las inversiones estadounidenses. Esto provoc¨® un colapso econ¨®mico que se mantiene hasta ahora, y que ha sido una de las causas principales de la huida en la ¨²ltima d¨¦cada.
Los que se van no tienen reemplazo en el futuro, ya que las actuales tasas de fecundidad en Puerto Rico est¨¢n entre las m¨¢s bajas de la regi¨®n y de su historia. ¡°La natalidad era alt¨ªsima hasta mediados del siglo pasado, hab¨ªa 40 nacimientos por cada mil personas. Eran como cuatro, cinco o seis ni?os por mujer¡±, recuerda Duany. Pero el pa¨ªs se convirti¨® ¡°en un laboratorio¡± para ensayar t¨¦cnicas de control de natalidad: llegaron las p¨ªldoras y la esterilizaci¨®n. En la actualidad, nacen 10 o 12 ni?os por cada mil personas, 1,7 por mujer. ¡°La experiencia hist¨®rica indica que cuando la tasa de fecundidad llega a ese nivel tan bajo es muy dif¨ªcil que se recupere, a menos que haya un cambio en las circunstancias de la econom¨ªa y un grupo de migrantes j¨®venes que afecte esas tasas¡±, seg¨²n este antrop¨®logo.
Hasta 2012 hab¨ªa en Estados Unidos 4,9 millones de puertorrique?os. En proporci¨®n son m¨¢s j¨®venes que sus connacionales en la isla. Unos 300.000 de ellos viven en la regi¨®n central de Florida, entre las ciudades de Orlando, Tampa y Miami, y se les conoce popularmente como disneyricans, floriricans u orlandoricans. La gran migraci¨®n a estas ciudades comenz¨® en los a?os 70, con la apertura de los parques tem¨¢ticos de Disney y la consolidaci¨®n del bum tur¨ªstico.
¡°Las estad¨ªsticas socioecon¨®micas para los puertorrique?os en Orlando son m¨¢s favorables que en otras partes de Estados Unidos y la comunidad en su conjunto es sustancialmente distinta de las dem¨¢s¡±, explica Duany. Al menos la mitad de los disneyricans nacieron en la isla y son inmigrantes recientes; el 65% se define como ¡°blanco¡±, el idioma que predomina entre ellos es el castellano, son pol¨ªticamente m¨¢s conservadores y la mayor¨ªa son propietarios. En Nueva York, en cambio, las dos terceras partes de los puertorrique?os nacieron en Estados Unidos, la mitad se define como ¡°blanco¡±, el ingl¨¦s es su primera lengua, su situaci¨®n econ¨®mica es m¨¢s precaria y tradicionalmente han sido m¨¢s dem¨®cratas.
La influencia pol¨ªtica de los disneyricans en la pol¨ªtica estadounidense est¨¢ a¨²n por definirse, pero de antemano se prev¨¦ que podr¨ªa ser determinante. ¡°Desde hace varios a?os se viene diciendo que los puertorrique?os de Florida podr¨ªan decidir las elecciones presidenciales o de gobernador. Se habla de un gigante dormido que no se acaba de despertar¡±, concluye el antrop¨®logo.
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