El Congreso de EE UU aprueba entrenar y armar a la oposici¨®n siria

El Senado de Estados Unidos dio este jueves el visto bueno final del Congreso a la propuesta del gobierno de Barack Obama para armar y entrenar a la oposici¨®n moderada siria. Tras m¨¢s de cinco horas de debate, la c¨¢mara alta sancion¨® la iniciativa por 78 votos a favor y s¨®lo 22 en contra. La C¨¢mara de Representantes ya hab¨ªa dado luz verde al proyecto la v¨ªspera, as¨ª que ya s¨®lo queda la firma del presidente para que ¨¦ste pueda comenzar.

R¨¢pidamente, Obama sali¨® a agradecer la "rapidez y seriedad" con que las dos c¨¢maras legislativas aprobaron un "elemento clave" de la estrategia contra el grupo extremista Estado Isl¨¢mico (EI): "Entrenar y equipar (a la oposici¨®n moderada siria) para que ¨¦sta se haga m¨¢s fuerte y pueda atacar al EI dentro de Siria", seg¨²n expres¨® en unas breves declaraciones desde la Casa Blanca apenas unos minutos despu¨¦s de que se cerrara la votaci¨®n en el Capitolio.

Y es que de pronto, Washington parece tener mucha prisa por dar un paso que hab¨ªa logrado eludir hasta ahora.

Han pasado ya m¨¢s de tres a?os desde que comenzara la guerra civil en ese pa¨ªs y con ella las demandas de apoyo militar estadounidense para combatir al r¨¦gimen de Bachar el Assad, en un conflicto cuyo saldo de v¨ªctimas supera los 200.000 muertos. Incluso dentro del equipo de la Casa Blanca hubo voces que reclamaban un apoyo m¨¢s claro -y letal- a la oposici¨®n moderada siria.

El pa¨ªs norteamericano, abocado una vez m¨¢s a implicarse militarmente en una regi¨®n de la que cre¨ªa haber salido tras la guerra de Irak

Pero no ha sido hasta que a la lista de v¨ªctimas se han a?adido, en las ¨²ltimas semanas, dos estadounidenses y un brit¨¢nico, brutalmente ejecutados por los extremistas del Estado Isl¨¢mico (EI) que dominan ya importantes partes de Siria e Irak, que se han activado los mecanismos en Washington. Y, s¨²bitamente, todo parece ir muy r¨¢pido.

Hace apenas una semana, Obama urg¨ªa al Congreso a que diera su autorizaci¨®n para entrenar y armar a la oposici¨®n moderada siria, algo que la Casa Blanca llevaba solicitando desde finales de junio -cuando el EI empez¨® a dominar amplias zonas de Irak- sin que el Capitolio se hiciera eco del pedido.

Pero el mi¨¦rcoles, justo una semana despu¨¦s del discurso donde Obama despleg¨® su estrategia para ¡°degradar y, finalmente, destruir¡± al EI, tras la decapitaci¨®n de los tres occidentales, la C¨¢mara de Representantes, dominada por una oposici¨®n republicana que no ha hecho m¨¢s que paralizar las propuestas de la Casa Blanca, aprobaba con inusual agilidad la solicitud.

Y s¨®lo un d¨ªa m¨¢s tarde -mientras el EI distribu¨ªa otro v¨ªdeo en el que otro reh¨¦n, el brit¨¢nico John Cantlie, acusa a Washington y Londres de haber ¡°abandonado¡± a sus ciudadanos secuestrados- el Senado donde los dem¨®cratas son mayor¨ªa se dispuso a votar de igual manera y similar resultado.

?Tanto ha cambiado la situaci¨®n en apenas unas semanas? No quiz¨¢s en Siria, pero s¨ª en EE UU.

El pa¨ªs norteamericano se ve abocado una vez m¨¢s a implicarse militarmente en una regi¨®n de la que cre¨ªa haber salido tras dar por finalizada la guerra de Irak y ordenar el ¨²ltimo repliegue de tropas, en 2011. Desde agosto, aviones estadounidenses vuelven a bombardear posiciones iraqu¨ªes, esta vez contra el EI. Y la campa?a se va a extender en cualquier momento a la vecina Siria.

Justo antes de la votaci¨®n de la c¨¢mara baja, Obama hac¨ªa el simb¨®lico gesto de desplazarse el mi¨¦rcoles hasta la sede en Tampa (Florida) del Comando Central encargado de las operaciones a¨¦reas, para prometer que las tropas estadounidenses no volver¨¢n a combatir en la regi¨®n. Y lo volvi¨® a reiterar tras el voto legislativo: "Las fuerzas estadounidenses desplegadas en Irak no tienen ni van a tener una misi¨®n de combate. Junto con nuestros aliados, podemos destruir al EI sin que las tropas americanas tengasn que combatir sobre el terreno otra guerra en Oriente Medio", reiter¨®.

Pero para poder eliminar efectivamente al EI, ¡°alguien tiene que realizar la lucha sobre el terreno¡±, recordaba horas antes el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest. Y ah¨ª entra de pronto de nuevo en juego la oposici¨®n moderada siria a la que no pocos en Washington dec¨ªan hasta no hace tanto que era muy dif¨ªcil, si no imposible, de localizar con garant¨ªas y de armar sin peligro de que el equipo caiga en manos de otros bandos m¨¢s extremistas.

Una aparente contradicci¨®n -pese a que hace un a?o que EE UU ya proporciona alguna ayuda a la oposici¨®n, incluida militar- que no escapa a muchos.

Muestra de las suspicacias que el plan para la oposici¨®n siria sigue despertando en Washington es el hecho de que no pocos dem¨®cratas (85) y republicanos (71) se opusieran a ella en la c¨¢mara baja. Tambi¨¦n algunos senadores clave dijeron no a la iniciativa, entre ellos la dem¨®crata Elizabeth Warren y el republicano Rand Paul. Sobre todo en v¨ªsperas de las elecciones parlamentarias de noviembre donde muchos legisladores se enfrentan a un electorado cansado tras m¨¢s de una d¨¦cada de guerras en Afganist¨¢n e Irak, algo que tambi¨¦n se teme pueda afectar a las presidenciales de 2016 si las cosas se tuercen mucho en la lucha contra el EI.

¡°No hay ¨¢ngeles en la guerra siria en estos momentos¡±, advert¨ªa en una audiencia en el Senado el mi¨¦rcoles el exembajador estadounidense en Damasco Robert Ford.

Pese a ello, seg¨²n Ford s¨ª existe una ¡°oposici¨®n moderada¡± en ese pa¨ªs. Son aquellos ¡°que no tratan de imponer por la fuerza un Estado religioso. Sus l¨ªderes aceptan la idea de que tendr¨¢ que haber alg¨²n tipo de acuerdo pol¨ªtico en Siria. Eso es lo que hacen los moderados¡±, afirm¨®.

Que la tarea de localizarlos y seleccionarlos para entrenarlos y armarlos no ser¨¢ sencilla es algo que no han ocultado ni los m¨¢ximos responsables de la defensa de EE UU. A ello se une, agreg¨® Ford, el ¡°problema de credibilidad¡± a?adido a ojos de una oposici¨®n siria que no le perdona a EE UU su falta de acci¨®n contra Damasco. El plan de armarlos y entrenarlos que ahora echa a rodar permitir¨¢ ¡°con el paso del tiempo¡± recuperar esa confianza y credibilidad, ¡°pero no va a ser f¨¢cil¡±, alert¨® Ford. Para el gobierno de Obama, no hay sin embargo alternativa. ¡°El Estado Isl¨¢mico debe ser derrotado. Punto¡±, zanj¨® su secretario de Estado, John Kerry.