El Salvador suma casi 30.000 afectados por el virus chikungunya
El Gobierno salvadore?o calcula que el combate a esta fiebre y el dengue le costar¨¢ unos treinta millones de d¨®lares
La epidemia del Chikungunya ha infectado, desde que se descubri¨® su presencia en junio pasado, a m¨¢s de 29.000 salvadore?os asegur¨® el viceministro de Salud de esta naci¨®n centroamericana, Eduardo Espinoza, quien sin embargo aclar¨® que no se ha registrado ning¨²n fallecido por este virus. Pero la enfermedad corre a gran velocidad. La semana pasada el registro epidemiol¨®gico fue de 22.000 infestados.
¡°Del total de 29.704 con fiebre del chikungunya, 17.860 se reportan en San Salvador, es decir, m¨¢s del 60%. Le siguen los departamentos o provincias de La Libertad, San Vicente y Sonsonate¡± agreg¨® el funcionario. A?adi¨® que el Gobierno gastar¨¢ en el combate del dengue y en el chikungunya un total de 30 millones de d¨®lares.
Espinoza explic¨® que las zonas m¨¢s afectadas son de gran concentraci¨®n habitacional, pero tambi¨¦n de mayor concentraci¨®n del vector, es decir, la mayor concentraci¨®n de zancudos Aedes Aegyptis, transmisor tanto de la fiebre chikungunya como del dengue. El nombre de la epidemia es tan raro como sonoro, lo cual le ha valido una cumbia que le ha dedicado por un m¨²sico popular, Vladimir L¨®pez, art¨ªsticamente conocido como Don Vladi, compositor e int¨¦rprete bachatas, salsa, sones y cumbias.
El mosquito o zancudo por el cual se juntan dos epidemias que tiene abarrotados los hospitales nacionales, los del Seguro Social, las cl¨ªnicas comunales y hasta algunos centros privados. En El Salvador no se han reportado fallecimientos por el virus del chikungunya. En contraste, cuatro han fallecido por dengue. En lo que va de a?o se han registrado 41.532 sospechosos de dengue. En 2013 muri¨® solo una persona de esta enfermedad.
Espinoza explic¨® que la tasa de ataque de chikungunya es superior a la del Dengue porque la chikungunya es la primera vez que se da en el pa¨ªs y eso hace que toda la poblaci¨®n est¨¦ absolutamente susceptible; no hay inmunidad subyacente. ¡°Cualquier persona que tenga contacto con el virus a trav¨¦s del vector, inmediatamente se enferma. Por eso tenemos esta tasa de ataque que es superior al 65%¡±, a?adi¨® el funcionario, un m¨¦dico que sirvi¨® durante la guerra civil (1980-1992) en las filas guerrilleras.
El Ministerio de Salud (Minsal), seg¨²n Espinoza, ha tomado en El Salvador las mismas medidas para combatir el chikungunya y el dengue; no hay tratamiento espec¨ªfico, y las vacunas est¨¢n a¨²n en fase experimental. En la actualidad hay un esfuerzo grande de fumigaci¨®n y de destrucci¨®n de los posibles criaderos de zancudos en las zonas m¨¢s afectadas, que culminar¨¢ con una Jornada Nacional Contra el Dengue de cuatro d¨ªas de duraci¨®n a mediados de octubre.
El gobierno salvadore?o ha gastado alrededor de 10 millones de d¨®lares en el combate del chikungunya, especialmente en las acciones para la fumigaci¨®n y destrucci¨®n de criaderos de zancudos, as¨ª como los costos de consulta en el primer nivel, red hospitalaria y unidades de cuidados intensivos en casos complicados inform¨® el Minsal.
Otros 17 millones de d¨®lares adicionales se han invertido en el dengue. A esto debe sumarse el costo de cada una de las Jornadas Nacionales contra el dengue que es de un mill¨®n de d¨®lares, por jornada, por lo que los costos combinados del combate contra el dengue y la tambi¨¦n llamada Fiebre Chik, no son inferiores a 30 millones de d¨®lares.
En esta jornada intensiva, el total de viviendas a fumigar solo en el ¨¢rea metropolitana de San Salvador ser¨¢ de 126.088 viviendas a raz¨®n de tres ciclos por vivienda es decir, 378.264 fumigaciones-vivienda, a un ritmo de 30.000 viviendas diarias. Para ello se han creado brigadas con sanitarios, activistas de organismos no gubernamentales, soldados y polic¨ªas.
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