¡°Los brasile?os se dividen entre descontentos y desesperados¡±
El senador Cristovam Buarque, (Recife, 1944), exgobernador del Distrito Federal y durante un a?o ministro de Educaci¨®n con Lula, tiene un plan educativo para Brasil y se lo sabe de memoria. Tanto, que es capaz, en cualquier sitio, en una cafeter¨ªa por ejemplo, de explic¨¢rselo a cualquiera con media docena de cuartillas y un bol¨ªgrafo. Mientras lo hace, es interrumpido por varias personas que se acercan para felicitarle, animarle a que prosiga en su labor pol¨ªtica o simplemente, a saludarle. Su obsesi¨®n, que el nivel educativo del pa¨ªs, sobre todo en la ense?anza primaria y en la media, suba. Apoyar¨¢ a Marina Silva en estas elecciones. Su nombre suena como posible ministro de Educaci¨®n. Si es as¨ª, podr¨¢ pasar su plan de las cuartillas del cuaderno a la realidad de un pa¨ªs de 200 millones de habitantes.
Pregunta. Seg¨²n los ¨²ltimos estudios, el pa¨ªs no ha alcanzado las metas educativas del Gobierno. ?Qu¨¦ le parece este dato?
Respuesta. Y eso que las metas eran modestas. Es un aut¨¦ntico fracaso.
P. ?Y qu¨¦ hay que hacer?
R. Primero, reconocer las causas. Primera, que Brasil est¨¢ dividido socialmente. No tenemos clases sociales. Tenemos un aut¨¦ntico apartheid social. Y actualmente no se trabaja por solucionar los problemas de los de abajo: la salud, el transporte, la educaci¨®n¡ La segunda causa es cultural: aqu¨ª no se le da importancia a la educaci¨®n, no se la respeta. Si uno quiere ser respetado en Brasil tiene que tener un coche, una casa grande, una cuenta bancaria¡ Pero vamos a suponer que se supera esto. ?Qu¨¦ hacer? Pues transformar el sistema para que sea un aut¨¦ntico sistema nacional de educaci¨®n, para que no dependa de los municipios, que son muy desiguales y no tienen dinero. Y crear, por ejemplo, la carrera nacional de Magisterio.
Para ser ministro con Marina Silva pongo mis condiciones¡±
P. ?Es un problema de presupuesto?
R. Si usted pone m¨¢s dinero en el actual sistema no va a resultar. Hay que cambiar la estructura.
P. ?Y por qu¨¦ el Gobierno no lo hace?
R. Porque el Gobierno actual (y los de Lula) no da importancia a la educaci¨®n b¨¢sica. El Gobierno de Lula era muy sensible al voto. Y la poblaci¨®n se preocupa sobre todo por la universidad.
P. Hay especialistas que dicen que el nivel de la universidad p¨²blica es bueno pero que muchos estudiantes de clase baja no acceden porque no alcanzan los conocimientos necesarios.
R. Es as¨ª. Y adem¨¢s, s¨®lo el 40% de los estudiantes de escuelas p¨²blicas terminan el ciclo de ense?anza. En las escuelas privadas todos terminan. Luego, los que van a privadas se pasan a la universidad p¨²blica y los de las escuelas p¨²blicas acaban en las universidades privadas, porque no dan el nivel, a base de becas del Estado, por iniciativa del PT.
P. Ese sistema es perverso.
El Gobierno actual, y antes el de Lula, no da importancia a la educaci¨®n b¨¢sica¡±
R. S¨ª; la soluci¨®n pasar¨ªa porque la ense?anza b¨¢sica y media, p¨²blicas y privadas, tuvieran la misma calidad. Pero la calidad est¨¢ cayendo. Soy profesor de universidad y lo veo.
P. ?Y c¨®mo se sube el nivel?
R. Volviendo a mi plan: hay que crear una carrera nacional de Magisterio, con salarios altos, selecciones rigurosas y una constante evaluaci¨®n de los profesores. En Brasil, si eres profesor, nunca te van a despedir, a no ser que seas ladr¨®n o ped¨®filo. Yo les pondr¨ªa un sueldo de 9.500 reales (3.940 d¨®lares), pero con controles constantes. El segundo punto ser¨ªa la construcci¨®n de escuelas. Y dotarlas de equipos. Viaje al nordeste del pa¨ªs y d¨ªgame c¨®mo est¨¢n las escuelas all¨ª. Tercero, tendr¨ªa que haber un horario integral. Aqu¨ª el alumno s¨®lo est¨¢ cuatro horas al d¨ªa de clase. Nacionalizando todo esto acabar¨ªamos con un problema crucial de Brasil: dependiendo de d¨®nde nazcas y en qu¨¦ familia, est¨¢s marcado para toda tu vida. Har¨ªan falta 200.000 escuelas y dos millones de profesores. Si se hacen en 250 ciudades al a?o y 100.000 profesores por a?o, en veinte a?os se consigue. Y la inversi¨®n no superar¨ªa el 10% de lo que, por ley, se tiene que invertir en educaci¨®n.
P. ?Y no le ense?¨® ese plan a Lula cuando fue ministro?
R. Yo del Gobierno de Lula sal¨ª frustrad¨ªsimo. ?l nunca tuvo tiempo para hablar de esto. Nunca se interes¨®. Yo quer¨ªa que el ministerio de educaci¨®n se ocupara de la ense?anza primaria y media, sin las universidades. Pero Lula no acept¨®. Los sindicatos no quer¨ªan. Y Lula es un pol¨ªtico genial, pero ligado a sus or¨ªgenes, a los sindicatos. Y los ni?os son los ¨²nicos en Brasil que no tienen sindicato. Nadie se preocupa de ellos, porque adem¨¢s tampoco votan.
Aqu¨ª no hay clases sociales. Tenemos un aut¨¦ntico ¡®apartheid¡¯ social¡±
P. Sus padres se preocupan.
R. Mire: la escuela ahora es muy mala, s¨ª, s¨®lo el 40% termina la ense?anza media. Pero 30 a?os atr¨¢s, la terminaba apenas el 20%. Los ni?os de hoy est¨¢n mucho mejor de lo que estuvieron sus padres, que en su gran mayor¨ªa no fueron al colegio.
P. ?Es la educaci¨®n una prioridad de la campa?a?
R. Eduardo Campos [del Partido Socialista de Brasil, fallecido en accidente a¨¦reo en agosto] fue el ¨²nico candidato que dijo eso de ¡°Brasil no ser¨¢ un pa¨ªs decente hasta que el hijo del trabajador estudie en la escuela del hijo del patr¨®n¡±. Marina Silva est¨¢ tardando en decir lo mismo.
P. Usted suena como ministro de Educaci¨®n si resulta elegida.
R. Primero, pienso que Marina Silva va a necesitarme m¨¢s en el Senado. Segundo, yo ya fui ministro y ahora s¨®lo aceptar¨ªa con ciertas condiciones: ser¨ªa ministro de la educaci¨®n b¨¢sica y media, sin las universidades. Ya sal¨ª frustrado la otra vez.
Hay que crear la carrera de magisterio con salarios altos y evaluaciones¡±
P. ?Cree que Marina es la candidata de la gente que sali¨® masivamente hace a?o y medio a la calle?
R. Es la que m¨¢s cerca de ellos est¨¢. Si usted me pregunta si ella va a solucionar todos sus problemas, le dir¨¦ que de eso no estoy seguro. De lo que estoy es de que es la que m¨¢s esperanza da.
P. ?Por qu¨¦ se produjeron esos movimientos de protesta?
R. En los ¨²ltimos 20 a?os, Brasil goz¨®, por primera vez, de estabilidad monetaria y crecimiento econ¨®mico. Pero, paralelamente, la democracia entr¨® en crisis por las mentiras de las campa?as, la desmoralizaci¨®n y la corrupci¨®n. El crecimiento se estanc¨® y la estabilidad monetaria se esfum¨® por la inflaci¨®n. El pueblo se cans¨® del ciclo este del PT y del PSDB, de que las cosas no funcionen y se fue a la calle. El transporte p¨²blico no funciona porque la prioridad fue aumentar las ventas de coches. La salud no funciona porque la prioridad fue dar subvenciones y salarios sociales a las familias y no invertir en salud. La seguridad tambi¨¦n est¨¢ mal. El pueblo puede que no haga estos an¨¢lisis, pero siente esos problemas. Y con todo, quien sali¨® a la calle fue s¨®lo la clase media. Cuando las clases m¨¢s pobres salen a la calle, lo hacen con violencia. La poblaci¨®n brasile?a se divide entre descontentos y desesperados.
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