Antonio Cafiero, un grande
El peronismo hace rato que dej¨® de escuchar a Cafiero
A los 92 a?os de una fecunda vida, ha muerto Antonio Cafiero, uno de los m¨¢s trascendentes y, sin duda, ejemplares pol¨ªticos de la historia argentina reciente.
He sido un afortunado testigo y acompa?ante privilegiado de su vida. Entr¨¦ al peronismo -y a la pol¨ªtica activa- por la puerta de su estudio de economista all¨¢ por 1968. Al d¨ªa siguiente de comenzar, recib¨ª la primera lecci¨®n de lo que ser¨ªa su mensaje: me invit¨® a una reuni¨®n de reflexi¨®n en la que estaba todo el arco pol¨ªtico argentino: radicales, dem¨®cratas cristianos, socialistas y obviamente peronistas. Discut¨ªan con pasi¨®n y respeto las potenciales salidas a la dictadura de aquel tiempo.
Con la misma pasi¨®n por la democracia, durante los 40 a?os posteriores Antonio fue juntando voluntades, poniendo el cuerpo, arriesgando todo su capital pol¨ªtico, abriendo caminos de pensamiento en esta eterna suma de conflictos, sue?os y frustraciones en la que se convirti¨® la Argentina.
Fue tan fuerte su opci¨®n por la democracia que arriesg¨® su vida y su carrera pol¨ªtica para defender a un adversario como Ra¨²l Alfons¨ªn en uno de los momentos m¨¢s cr¨ªticos de su Gobierno
Fue tan fuerte su opci¨®n por la democracia que arriesg¨® su vida y su carrera pol¨ªtica para defender a un adversario como Ra¨²l Alfons¨ªn en uno de los momentos m¨¢s cr¨ªticos de su Gobierno: la rebeli¨®n de Semana Santa en 1987. Detr¨¢s de la hist¨®rica foto juntos en el balc¨®n de la Casa Rosada, hubo un Antonio Cafiero arriesgando su vida, entrando solo al cuartel de Campo de Mayo a decirle de frente a los sublevados que deb¨ªan deponer su actitud. Y luego, cuando la econom¨ªa temblaba en 1988, en lugar de actuar de manera instrumental y ego¨ªsta, puso toda su fuerza pol¨ªtica para tratar de evitar la cat¨¢strofe. Y perdi¨® la Presidencia.
Cuando decidi¨® fundar la Renovaci¨®n Peronista, confrontando un aparato pol¨ªtico omnipotente que se hab¨ªa apropiado de s¨ªmbolos y estructuras, y anatematizaba a quien se animase al disenso, pod¨ªa dar un salto al vac¨ªo o haberse quedado en silencio. No hab¨ªa aplausos para los audaces, pero eligi¨® el camino en el que cre¨ªa.
Antonio Cafiero, a diferencia de tantos otros "colegas", siempre hizo lo que proclamaba. Se entreg¨® voluntariamente a prisi¨®n, dos veces, para defender su honor. Acusado de "sopl¨®n", no vacil¨® en denunciar a sus pares Senadores en uno de los esc¨¢ndalos de corrupci¨®n mas graves de la historia pol¨ªtica.
En una reuni¨®n de gabinete, siendo Gobernador, ante un grave conflicto ¨¦tico, nos dijo: "preg¨²ntense cada ma?ana para qu¨¦ hacen pol¨ªtica. Si no encuentran una respuesta noble, les pido que dejen la pol¨ªtica y el cargo".
Preg¨²ntense cada ma?ana para qu¨¦ hacen pol¨ªtica. Si no encuentran una respuesta noble, les pido que dejen la pol¨ªtica y el cargo Antonio Cafiero, en una reuni¨®n de gabinete siendo Gobernador
En sus ¨²ltimos a?os, acentu¨® la curiosidad que siempre hab¨ªa tenido por el pensamiento creativo. Sus fines de semana combinaban la pasi¨®n boquense con interminables di¨¢logos sobre el pa¨ªs y el mundo seg¨²n los pensadores contempor¨¢neos.
El peronismo, que ¨¦l tanto am¨®, ha ido cometiendo una y otra vez el error de convertirse exclusivamente en una maquinaria electoral solo obsesionada por el poder, en lugar de ser un verdadero partido pol¨ªtico que sostenga los ideales, forme nuevos dirigentes y sobre todo sea capaz de dialogar con los dem¨¢s sectores de la vida pol¨ªtica y social. Es decir, un peronismo que hace rato que dej¨® de escuchar a Antonio Cafiero.
La malhadada idea de "no se puede gobernar sin el peronismo" nunca form¨® parte de aquello en lo que Cafiero cre¨ªa y por lo que luch¨®. Nadie es irremplazable, pero no son muchos los que pasan por la vida dejando una herencia tan noble y comprometida como la de Antonio.
Eduardo Amadeo, exdiputado y exembajador de Argentina en EE UU, es miembro de la Fundaci¨®n Pensar. Twitter @eduardoamadeo
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