La Fiscal¨ªa reconoce errores en la exhumaci¨®n de las fosas de Iguala

La Fiscal¨ªa de M¨¦xico ha reconocido ante las familias de los 43 estudiantes de magisterio desaparecidos en Iguala que han existido errores en el proceso de exhumaci¨®n de las primeras fosas halladas hace tres semanas. Los padres de los normalistas se han reunido este lunes con el ministro de Interior, Miguel ?ngel Osorio Chong, y el fiscal general, Jes¨²s Murillo Karam, quienes atribuyen este proceso err¨®neo a la Procuradur¨ªa del Estado de Guerrero, la encargada inicial de la investigaci¨®n.

¡°Lo que nos dicen, y lo que hemos corroborado con nuestros peritos, es un mal procedimiento para la exhumaci¨®n de la Procuradur¨ªa de Justicia del Estado de Guerrero y de todas las organizaciones estatales. Hicieron una intervenci¨®n inadecuada en el proceso de identificaci¨®n¡±, ha comentado a la prensa mexicana Vidulfo Rosales, integrante del Centro de Derechos Humanos Tlachinollan al salir de la reuni¨®n.

Unos 60 familiares de los normalistas acudieron en autobuses desde Ayotzinapa hasta Acapulco para conocer por primera vez los detalles de la investigaci¨®n tras la desaparici¨®n de los estudiantes hace casi un mes. Aunque Murillo Karam descart¨® el pasado 15 de octubre que los 28 cuerpos encontrados en cinco fosas en Iguala pertenecieran a los estudiantes, el fiscal general ha apuntado ante los padres que no es posible llegar a una conclusi¨®n hasta que los estudios forenses terminen.

¡°Nos dijeron que hay algunos detenidos que est¨¢n interrogando y que los est¨¢n acercando a los muchachos, pero nada m¨¢s¡±, ha relatado Felipe de la Cruz, un miembro del comit¨¦ de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, ¡°No confiamos en su investigaci¨®n porque no vemos resultados¡±. Las familias han asegurado que seguir¨¢n con sus labores de b¨²squeda independientes de las autoridades.

Han pasado 24 d¨ªas desde que los normalistas desaparecieron. La Polic¨ªa Municipal de Iguala los detuvo y supuestamente los entreg¨® a sicarios del cartel Guerreros Unidos la noche del 26 de septiembre. Los rostros de los 43 estudiantes han sido mostrados este lunes en un anuncio a doble plana en los principales peri¨®dicos de M¨¦xico. La Fiscal¨ªa ofrece una recompensa de 110.000 d¨®lares por informaci¨®n que ayude a encontrar a los normalistas o a los responsables de su desaparici¨®n.

Entre las voces que demandan una soluci¨®n pronta al caso se ha levantado la del sacerdote Alejandro Solalinde. El cura, que en los ¨²ltimos a?os ha trabajado ayudando a los migrantes centroamericanos que cruzan M¨¦xico, se ha presentado en la Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica para dar a conocer el testimonio de cuatro personas que hablaron con ¨¦l y le aseguraron saber el destino de los 43 estudiantes. Solalinde, vestido en h¨¢bito blanco, ha contado a los periodistas en las puertas de la Procuradur¨ªa que los estudiantes fueron asesinados en las cercan¨ªas de Iguala en un sitio donde la Polic¨ªa Municipal los llev¨® para prenderles fuego con ayuda de le?a y diesel.

Seg¨²n el relato del sacerdote, uno de los testigos le ense?¨® un mapa del sitio donde posiblemente estar¨ªan los cuerpos de los normalistas, al norte del Estado de Guerrero, no muy lejos del sitio donde fueron detenidos. Hasta ahora, las autoridades no han aceptado el testimonio del sacerdote pero han programado un encuentro entre el cura y el fiscal general para los pr¨®ximos d¨ªas. ¡°Este gobierno est¨¢ apostando por un control de da?os pol¨ªticos, m¨¢s que por una soluci¨®n o justicia¡±, ha criticado Solalinde.

Mientras tanto en su discurso el presidente mexicano, Enrique Pe?a Nieto, repite su promesa de resolver el caso y hallar a los estudiantes. Durante el fin de semana, el Gobierno asign¨® la vigilancia policial a las fuerzas federales en 14 municipios del Estado de Guerrero y en uno del Estado de M¨¦xico. Pe?a Nieto ha reconocido que en estas 15 localidades ¡°hay evidencia de infiltraci¨®n del crimen organizado¡± con las autoridades locales. ¡°Seguiremos trabajando para que, junto con los gobiernos locales, pongamos orden y evitemos que el crimen organizado se infiltre en las instituciones, sobre todo, encargadas de dar seguridad¡±, ha insistido.