El gran basti¨®n dem¨®crata de Nueva Inglaterra se resquebraja

Los conservadores agitaron con fuerza el gran basti¨®n de los dem¨®cratas en Estados Unidos, hasta el punto de resquebrajarlo. La ofensiva de los candidatos republicanos fue intensa y les permitir¨¢ controlar el puesto de gobernador de Massachusetts y Maine, dos de los seis Estados que componen la regi¨®n de Nueva Inglaterra. El ajustado resultado final en Connecticut, Vermont y New Hampshire es otra evidencia del clima de hast¨ªo general que afrontan los liberales y puede dar alguna indicaci¨®n de por d¨®nde ir¨¢n las elecciones presidenciales de 2016.

Maggie Hassan, gobernadora de New Hampshire, fue la prueba de como el temido resurgir del Partido Republicano es m¨¢s que un serio toque de atenci¨®n. Su ventaja frente al aspirante conservador Walt Havenstein era muy c¨®moda hace unas semanas. Pero sus opciones se redujeron de golpe en las encuestas, lo que le oblig¨® a jugar a la ofensiva en la recta final de la campa?a para salvar su puesto en un Estado donde los independientes representan el 44% del total de electores.

La batalla fue a¨²n m¨¢s re?ida entre Dannel Malloy Thomas Foley, que repitieron el intenso careo que tuvieron en 2010 por el puesto de gobernador Connecticut. Entonces se impuso el dem¨®crata por la m¨ªnima. Esta vez, el liberal esperaba anoche mantener su cargo. Junto al reducido margen con el que se impuso Hassan, el desenlace del voto confirma el avance de la mancha roja en Estados que en las presidenciales se ti?en de azul y ahora se tornan inestables para los progresistas.

El tono de la campa?a fue especialmente agresivo entre el actual gobernador republicano de Maine, Paul LePage, y el aspirante Mike Michaud. Aunque es un Estado propenso a elegir presidentes dem¨®cratas, en las contiendas locales no les importa votar a un conservador. Y as¨ª lo hicieron otra vez al pasar por las urnas este 4 de noviembre. Maine era, adem¨¢s, el ¨²nico de los seis en la regi¨®n de Nueva Inglaterra con un republicano al mando. Ah¨ª se trataba de defenderlo.

La otra gran esperanza de los republicanos se concentr¨® durante la campa?a en Massachusetts, donde el empresario Charlie Baker lideraba en las encuestas a la dem¨®crata Martha Coakley. El voto confirm¨® los sondeos con la derrota de la actual fiscal general del Estado. Como en el caso de Connecticut, el margen de la victoria fue m¨ªnimo. Suficiente en todo caso para que los republicanos controlen la oficina ejecutiva de del Estado m¨¢s importante de Nueva Inglaterra.

Vermont pintaba azul oscuro. Pero pese a que parec¨ªa que los dem¨®cratas no corr¨ªan ah¨ª muchos riesgos, Peter Shumlin no conigui¨® al final el 50% y eso llevar¨¢ a intervenir al legislativo. Donde s¨ª parec¨ªa tener opciones los republicanos era en el peque?o Estado de Rhode Island. Tambi¨¦n ah¨ª todo era posible tras el cierre de las urnas. El conservador Allan Fung, sin embargo, cay¨® ante la liberal Gina Raimondo, que estuvo arropada Michelle Obama y Bill Clinton.

Algunos candidatos republicanos trataron de ofrecer durante la campa?a una visi¨®n alejada de las posiciones m¨¢s radicales entre los conservadores en cuestiones sociales para as¨ª tratar de ganarse a los votantes independientes. Baker se mostr¨® a favor del matrimonio gay y como Foley, que prometi¨® no tumbar la legislaci¨®n si llegaba a gobernador, apoyo el derecho al aborto. Todo esto combinado con un mensaje favorable a los negocios.

Malloy, por su parte, vio peligrar su cargo porque durante los cuatro primeros a?os de mandato elev¨® impuestos. Se le considera, adem¨¢s, el promotor de unas de las agendas m¨¢s progresistas del pa¨ªs. Esta combinaci¨®n le distanci¨® de los independientes, en un Estado como el de Connecticut donde los electores se definen socialmente de izquierdas pero conservadores en lo fiscal.

Senado y C¨¢mara de Representantes

Los republicanos de Nueva Inglaterra son tambi¨¦n escasos en el Senado, con solo dos de los 12 miembros. Hab¨ªa cuatro asientos en juegos en estas elecciones a medio mandato. Los electores en Maine ten¨ªan que elegir entre Susan Collins y la aspirante dem¨®crata Shenna Bellows. La conservadora logr¨® mantenerse sin mayores problemas, como los dem¨®cratas Ed Markey en Massachusetts y Jack Reed en Rhode Island. Pero donde se sinti¨® m¨¢s la tensi¨®n fue en New Hampshire, uno de los Estados cruciales.

El republicano Scott Brown ech¨® un jarro de agua fr¨ªa a las aspiraciones de poder de los conservadores al poco de comenzar la noche electoral, al no poder arrebatar el asiento de senadora a la dem¨®crata Jeanne Shaheen. Y no porque no tuviera opciones, porque al final les separ¨® solamente dos puntos porcentuales en el recuento. El exsenador por Massachusetts trat¨® de vincular a la exgobernadora con la gesti¨®n Barack Obama.

Si los republicanos de Nueva Inglaterra eran una excepci¨®n en las oficinas de gobernador y en el Senado de EE UU, antes del paso este martes por las urnas tampoco hab¨ªa un solo conservador con un asiento en la C¨¢mara de Representantes. Hab¨ªa seis asientos en total en juego en estas elecciones en Massachusetts, Maine, Connecticut y New Hampshire. Lograron dos, en Maine y New Hampshire.

Para los dem¨®cratas, estos resultados no son una sorpresa, porque las batallas pol¨ªticas suelen ser muy re?idas cuando lo que est¨¢ en juego son los intereses de cada distrito. Pero tambi¨¦n son realistas, porque la historia dice que en el caso de Maine no se eleg¨ªa a un representante republicano al Capitolio desde 1994, el mismo a?os que en Massachusetts.