Una mezquita y una sinagoga, atacadas en Cisjordania e Israel
El fuego, originado de madrugada, ha destrozado el templo musulm¨¢n y da?ado el jud¨ªo La Polic¨ªa ha iniciado una investigaci¨®n aunque no ha habido muertos
La ola de violencia que se vive en las ¨²ltimas semanas entre israel¨ªes y palestinos ha saltado esta madrugada a los templos. Una mezquita ha sido severamente da?ada por un fuego provocado en Cisjordania y una sinagoga del norte de Israel ha sido atacada con un artefacto incendiario, aunque los da?os en este caso han sido menores. Seg¨²n ha informado la polic¨ªa, el ataque m¨¢s grave se ha producido en la villa palestina de Al Maghir, cerca de Ramala, la capital de Cisjordania. Hacia las tres de la ma?ana se ha iniciado un fuego que ha calcinado las dos plantas centrales de la mezquita m¨¢s grande del pueblo, afectando a las estructuras esenciales del edificio, lo que podr¨ªa obligar a su demolici¨®n. Todos los libros sagrados han quedado inservibles.
El municipio se encuentra en un terreno con elevada presencia de colonos y esa es la pista esencial que sigue la polic¨ªa: que se trate de un nuevo ataque de price tag, algo as¨ª como ¡°el precio a pagar¡±, la etiqueta que usan los grupos de colonos violentos que, desde hace cuatro a?os, da?an intereses palestinos en una zona que consideran suya por derecho b¨ªblico. Bajo el tizne del fuego, indica la agencia Maan, podr¨ªa haber mensajes racistas pintados por los atacantes, que ya se est¨¢n investigando. Hace dos a?os, en el mismo lugar, se incendi¨® otra mezquita.
Gershon Mesika, el jefe del Consejo Regional de Shomron, a¨²n pide ¡°prudencia¡± para se?alar a los colonos como autores del ataque pero reconoce que el culpable ¡°debe ser condenado y pasar por la justicia¡±. En 2013, cuando se intensificaron los ataques a mezquitas en Cisjordania y tambi¨¦n a iglesias y conventos cristianos en Israel -en los que aparecieron mensajes ofensivos contra Cristo y se reivindicaba la expansi¨®n de los asentamientos-, el primer ministro Benjam¨ªn Netanyahu lleg¨® a decir que estos actos deb¨ªan ser catalogados como de ¡°terrorismo¡±.
Tambi¨¦n anoche, la sinagoga de Shfaram, un pueblo situado a hora y media al norte de Tel Aviv, fue la diana de un c¨®ctel molotov, que lleg¨® a prenderse pero cuyas llamas se apagaron r¨¢pido. Los da?os en el edificio son menores. Por el momento se desconoce qui¨¦n ha podido cometer la agresi¨®n. Como en el caso anterior, no hay detenidos. No lejos, en la ciudad ¨¢rabe israel¨ª de I?Billin, se ha atacado una gasolinera y en Beit Safafa, un barrio palestino de Jerusal¨¦n, han amanecido grafitis anti¨¢rabes y cinco coches con ruedas pinchadas, informa la polic¨ªa.
Los colonos jud¨ªos habr¨ªan pintado sobre una pared de la mezquita un grafiti con mensajes antipalestinos, seg¨²n recoge el diario israel¨ª 'Haaretz'
El diario israel¨ª Yedioth Ahronoth sostiene, citando fuentes policiales, que la ¡°violencia y la tensi¨®n¡± de d¨ªas pasados se ha reducido, pese a todo, en los territorios palestinos, en parte gracias al despliegue extra de 500 soldados en la zona de unidades de ¨¦lite como la Golani.
Esta ma?ana se ha conocido, adem¨¢s, el arresto de un polic¨ªa de fronteras israel¨ª, investigado por la muerte de dos menores palestinos el pasado mayo, durante unas protestas en el d¨ªa de la Nakba (cat¨¢strofe), que recuerda la creaci¨®n del estado de Israel y la di¨¢spora palestina. Muhamad Abu Al Thahir, de 15 a?os, y Nadim Nuwarah, de 17, recibieron disparos en el coraz¨®n cuando protestaban frente a la c¨¢rcel de Ofer. Un v¨ªdeo de la ONG Defence For Children International demostr¨® que ninguno supon¨ªa un riesgo para los agentes israel¨ªes, pues estaban desarmados y muy lejos de sus posiciones. Las familias y los m¨¦dicos denunciaron el uso de fuego real contra ellos, pero el Ej¨¦rcito sosten¨ªa que se hab¨ªan empleado balas de acero recubiertas de goma, algo habitual en las manifestaciones. Esta detenci¨®n ¨Cy la llamada a declarar de otro agente- reabre el caso.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.