Renzi y Berlusconi ultiman una reforma electoral para gobernar Italia
El principal sindicato, la CGIL, convoca una huelga general el 5 de diciembre
Hay amigos ¨ªntimos que se re¨²nen menos que Matteo Renzi y Silvio Berlusconi. Con la cita de ayer, tras la que alcanzaron un principio de acuerdo en varios puntos clave de una nueva ley electoral que ¡°garantice la gobernabilidad¡±, el primer ministro socialdem¨®crata y el todav¨ªa l¨ªder de Forza Italia (FI) se han reunido ocho veces en lo que va de a?o. Pero a¨²n falta cerrar el conjunto del pacto. Se trata de encuentros con los que Renzi aspira a sacar adelante de una vez sus principales promesas a¨²n por cumplir ¡ªley electoral, reforma del Senado¡¡ª y Berlusconi pretende seguir desempe?ando un papel relevante en la pol¨ªtica italiana. Una alianza de intereses, e incluso una sinton¨ªa personal, que contrasta con la guerra sin cuartel, y la tirria mutua, que mantiene Renzi con la vieja guardia del Partido Democr¨¢tico (PD) y con su sindicato af¨ªn, la CGIL (Confederaci¨®n General del Trabajo). Su secretaria general, Susanna Camusso, anunci¨® ayer la convocatoria para el 5 de diciembre de una huelga general de ocho horas contra los presupuestos generales y la reforma laboral del Gobierno.
La de Camusso es una apuesta arriesgada. En primer lugar, porque las otras centrales sindicales ¡ªCISL, UIL y UGL¡ª no parecen estar tan convencidas de que sea el momento de lanzar un desaf¨ªo tan fuerte al Gobierno, sobre todo teniendo en cuenta que, justo ayer, la ministra de la Administraci¨®n P¨²blica, Marianna Madia, les hab¨ªa convocado, junto a la CGIL, para tratar de acercar posturas el pr¨®ximo lunes d¨ªa 17. Y, en segundo y nada desde?able lugar, los sindicatos son conscientes de que el primer ministro y l¨ªder del PD mantiene todav¨ªa buena parte del predicamento que lo llev¨® a superar el 40% de los votos en las pasadas elecciones europeas.
En parte por m¨¦ritos propios ¡ªsu capacidad de conectar con un amplio abanico del electorado no tiene nada que envidiar al Berlusconi de sus mejores tiempos¡ª y en parte porque se ha quedado sin rivales. El l¨ªder de FI bastante tiene con seguir descontando su condena por fraude fiscal ¡ªcada noche, una pareja de Carabinieri lo visita para comprobar que cumple con la obligaci¨®n judicial de pernoctar en casa¡ª y con mantener prietas sus desconcertadas filas. Y Beppe Grillo no solo parece haber perdido su capacidad para canalizar el hartazgo y la rabia, sino que sus declaraciones err¨¢ticas y a veces disparatadas echan por tierra el trabajo diario de los j¨®venes parlamentarios del Movimiento 5 Estrellas (M5S).
De tal forma, la ¨²nica oposici¨®n a Renzi es la del ala izquierda de su propio partido, el PD, y la de su sindicato tradicionalmente af¨ªn, la CGIL, el mayor del pa¨ªs con seis millones de afiliados. Susanna Camusso declar¨® ayer que conf¨ªa en que las otras centrales se adhieran a la convocatoria de huelga: ¡°Porque cada vez es m¨¢s evidente la predilecci¨®n del Gobierno por el bloque social representado por la patronal de Confindustria¡±. La fecha de la convocatoria de huelga, el viernes 5 de diciembre, justo antes del lunes 8, d¨ªa de la Inmaculada, llev¨® a ironizar a los partidarios de Renzi: ¡°El puente festivo est¨¢ servido¡±.
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