Los drones ya patrullan la mitad de la frontera de EE UU y M¨¦xico

Casi la mitad de la frontera entre Estados Unidos y M¨¦xico est¨¢ vigilada con aviones no tripulados (drones) tipo Predator para prevenir la inmigraci¨®n ilegal en ¨¢reas remotas donde no llegan los medios de vigilancia tradicionales. El programa de drones se intensific¨® a partir de 2013 y desde entonces se han realizado 10.000 vuelos que han cubierto unos 1.500 kil¨®metros, principalmente en la frontera de Texas, seg¨²n datos divulgados este jueves por la agencia Associated Press. La nueva estrategia consiste en utilizar los drones para detectar aquellos puntos poco vigilados que est¨¢n siendo utilizados para cruzar la frontera y poder distribuir los recursos de forma m¨¢s eficaz.

Los aviones Predator de la frontera son los mismos que realizan las misiones en Irak o Afganist¨¢n, solo que no llevan misiles sino c¨¢maras. Toman im¨¢genes de alta resoluci¨®n desde una altura de entre 5.000 y 8.000 metros, de noche o de d¨ªa. Seg¨²n detalla AP, su tarea consiste en tomar im¨¢genes dos veces, con tres d¨ªas de diferencia, para intentar descubrir intentos de cruzar la frontera en lugares donde no hay agentes o torres de vigilancia. Unas huellas de coche o de animales pueden indicar que por ah¨ª ha pasado alguien. Solo en un 2% de los vuelos realizados han detectado restos de intentos de cruzar ilegalmente a Estados Unidos, lo que tiene como consecuencia reforzar la vigilancia en esos puntos concretos.

Estados Unidos y M¨¦xico comparten m¨¢s de 3.000 kil¨®metros de frontera. Est¨¢n vallados unos 1.000 kil¨®metros, sobre todo en la zona de California. Desde Yuma, al oeste de Arizona, hasta la costa de Texas, hay grandes extensiones de desierto tan peligrosas de cruzar como dif¨ªciles de vigilar con agentes sobre el terreno. Es la raz¨®n, por ejemplo, por la que durante la crisis de los menores indocumentados de principios de a?o la mayor¨ªa de los inmigrantes entraban por Texas, donde la frontera entre los dos pa¨ªses es un r¨ªo.

El programa de aviones no tripulados para vigilar la frontera se puso en marcha a mediados de la d¨¦cada pasada. Cada avi¨®n cuesta 20 millones de d¨®lares, y el gasto ha recibido cr¨ªticas en el pasado por ser demasiado caro para los resultados que da en comparaci¨®n con la valla o la patrulla tradicional, adem¨¢s de la preocupaci¨®n por el posible da?o a la privacidad de residentes en la frontera. En 2011, el Departamento de Seguridad Nacional public¨® que los vuelos de los Predator, desde su puesta en marcha en 2006, hab¨ªan permitido detener a casi 5.000 inmigrantes y casi 240 traficantes de drogas. La cifra era apenas marginal dentro de los 330.000 inmigrantes detenidos en todo 2011.

A mediados de 2012, EE UU ya se hab¨ªa gastado 250 millones de d¨®lares en el programa de drones en la frontera y contaba con nueve aparatos. Al mismo tiempo, desde el a?o 2000, seg¨²n datos de AP, se ha duplicado el n¨²mero de agentes de polic¨ªa de fronteras sobre el terreno hasta superar los 18.000. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se propone intensificar la seguridad de las fronteras como parte de sus esfuerzos por arreglar el sistema de inmigraci¨®n.

La nueva estrategia de drones del Gobierno federal es aplaudida por los republicanos de Texas. ¡°Ya no podemos centrarnos solo en defensas est¨¢ticas como vallas y torres de vigilancia¡±, afirma el congresista republicano Michael McCaul, presidente del Comit¨¦ de Seguridad Nacional, citado por AP. El gobernador de Texas, Rick Perry, se ha pronunciado contundentemente a favor de la vigilancia con drones. El Gobierno de Estados Unidos quiere trasladar este tipo de vigilancia a la frontera con Canad¨¢ a partir del a?o que viene.