¡°El pueblo conf¨ªa m¨¢s en la Fiscal¨ªa Anticorrupi¨®n que en los pol¨ªticos¡±
La justicia rumana ha condenado a m¨¢s de mil altos cargos p¨²blicos en 2014
Desde que hace 17 meses se puso al frente de la Direcci¨®n Nacional Anticorrupci¨®n de Rumania, parece como si Laura Codruta Kovesi no durmiera. La fiscal jefa del organismo que investiga los grandes asuntos de corrupci¨®n ¡ªlos que implican a altos cargos p¨²blicos o sumas de m¨¢s de 10.000 euros¡ª en uno de los pa¨ªses con mayores problemas de la UE ha abierto m¨¢s casos en su tiempo en el cargo que durante los tres a?os anteriores juntos. De fuerte apret¨®n de manos y sonrisa huidiza, esta mujer de 41 a?os, jugadora de baloncesto en su ¨¦poca universitaria, se ha convertido por ello en una de las personas m¨¢s temidas y odiadas del pa¨ªs. Las investigaciones de su departamento han derivado en la condena de m¨¢s de mil altos cargos en 2014; incluidos un ex primer ministro (Adrian Nastase), dos exministros o cinco parlamentarios.
Pero Codruta Kovesi elude presumir de sus estad¨ªsticas, entre las que tambi¨¦n est¨¢ el arresto del hermano del presidente Traian Basescu o, sin ir m¨¢s lejos, el de una de sus colegas: la jefa de la Fiscal¨ªa contra el Crimen Organizado y el Terrorismo. Nadie parece intocable. ¡°La lucha contra la corrupci¨®n es mucho m¨¢s eficiente ahora¡±, dice encogi¨¦ndose de hombros. Tampoco demuestra que le afecten las duras cr¨ªticas de quienes afirman que su departamento se asemeja a la Securitate ¡ªla temida polic¨ªa de inteligencia del dictador Nicolae Ceaucescu¡ª o, como lleg¨® a comentar el primer ministro Victor Ponta hace poco ¡ªcuando destacados socialdem¨®cratas se vieron envueltos en un esc¨¢ndalo en plena campa?a electoral¡ª, que se mueve por intereses pol¨ªticos. ¡°Algunos altos cargos nos han atacado cuando se ha investigado a miembros de su partido¡±, se limita a deslizar Codruta-Kovesi. ¡°Se puede criticar cuando un juez determina que nuestra investigaci¨®n no fue buena y exculpa a los implicados. Sorprendentemente la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n ha sido criticada a pesar de que se han dictado condenas relativamente altas¡±, dice.
Su labor, que desgrana en su despacho de la Direcci¨®n Nacional Anticorrupci¨®n, en el centro de Bucarest, no ha sido f¨¢cil. El Parlamento ha tratado de poner trabas a su departamento con leyes como la que contemplaba la amnist¨ªa de algunos casos de corrupci¨®n. O, simplemente, votando contra la retirada de la inmunidad de quienes ocuparon altos cargos en el Gobierno. Una ventaja, dice, inconcebible: ¡°Ese tipo de inmunidad no deber¨ªa existir. Cuando hay sospechas de que una persona es corrupta solo el juez deber¨ªa poder decir si es detenida o investigada. En ning¨²n caso un voto emitido en el Parlamento por pol¨ªticos¡±.
¡°No deber¨ªa haber inmunidad para quienes ocuparon altos cargos en el Gobierno¡±
Pero eso no parece f¨¢cil en un pa¨ªs en el que los ciudadanos se desayunan, un d¨ªa tras otro, con un nuevo esc¨¢ndalo; a cada cual m¨¢s severo. Como hoy, cuando el caso de su colega de la Fiscal¨ªa antiterrorista, Alina Bica, detenida el s¨¢bado est¨¢ todav¨ªa fresco. Pero pese a todo, Codruta Kovesi contradice los informes que muestran a su pa¨ªs como uno de los m¨¢s corruptos. ¡°El hecho de que hayan crecido los casos investigados y el n¨²mero de condenas, no quiere decir que en Rumania haya un nivel de corrupci¨®n mayor que en otros pa¨ªses¡±, se?ala. ¡°De hecho, la Comisi¨®n Europea [que supervisa el pa¨ªs en su lucha contra la corrupci¨®n y en su reforma de la justicia] ha clasificado a la Direcci¨®n Nacional Anticorrupci¨®n rumana como una de las cinco mejores instituciones anticorrupci¨®n de Europa¡±, dice.
La fiscal reconoce, sin embargo, que en el pa¨ªs ¡ªdonde la Administraci¨®n p¨²blica, la sanidad y la educaci¨®n son los sectores m¨¢s conflictivos, seg¨²n Bruselas¡ª la corrupci¨®n est¨¢ integrada en todos los escalones del sistema; no solo en el m¨¢s alto. El 57% de los rumanos, dice la UE en su ¨²ltimo informe, aseguran haberse afectados personalmente por este tipo de delitos; en su mayor¨ªa ¡°actos de corrupci¨®n menores¡±, como el pago o la demanda de regalos por agilizar alg¨²n tr¨¢mite, por una consulta m¨¦dica te¨®ricamente gratuita o por una gesti¨®n p¨²blica.
Codruta Kovesi asegura, sin embargo, que las cosas est¨¢n cambiando r¨¢pido: ¡°Las quejas de los ciudadanos han aumentado. Cada vez son m¨¢s los que denuncian que se les ha pedido un soborno o favores para firmar un contrato o resolver un problema. Y ese cambio de la mentalidad es clave en la lucha contra la corrupci¨®n en todas las escalas¡±.
Ahora, dice, es importante que tanto el nuevo presidente ¡ªKlaus Iohannis, elegido hace una semana¡ª, como el Gobierno dejen clara su postura contra esta lacra. ¡°Deben decir en p¨²blico si su prioridad es combatir la corrupci¨®n¡±, dice. Y a?ade: ¡°La lucha anticorrupci¨®n debe continuar, ser apoyada por las decisiones pol¨ªticas con miras a hacer modificaciones legislativas y que aseguren los recursos financieros y log¨ªsticos necesarios¡±.
De momento, pese a los insultos de quienes se han visto salpicados por los esc¨¢ndalos, Codruta Kovesi se siente arropada. ¡°M¨¢s de un 50% de los ciudadanos tienen confianza en nosotros, seg¨²n las encuestas; eso es un ¨ªndice mayor que el de cualquier pol¨ªtico en Rumania¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.