Hay que ser realistas
Aun sin reducci¨®n de emisiones obligatorias, el acuerdo de Lima har¨¢ a los pa¨ªses m¨¢s responsables y conscientes de la urgencia
El resultado de la cumbre del clima de Lima me recuerda a cuando nos dicen: ¡°Tengo buenas y malas noticias. ?Cu¨¢les quieres que te cuente primero?¡±. Y depende lo que escojamos, terminaremos m¨¢s o menos contentos. En este caso prefiero empezar por las malas y terminar por las buenas, para que nos quedemos con el mensaje positivo que, adem¨¢s, y en mi opini¨®n, es el m¨¢s realista.
La mala noticia es que ni el acuerdo de Lima ni el que ojal¨¢ se alcance en Par¨ªs el a?o pr¨®ximo servir¨¢n para asegurar que nos acerquemos siquiera a la limitaci¨®n de 2¡ãC de subida de las temperaturas globales. Y, por tanto, como ya nos vienen avisando desde hace tiempo desde el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Clim¨¢tico (IPCC), debemos prepararnos para adaptarnos a un clima m¨¢s c¨¢lido, con menos agua en Espa?a, y con mayor frecuencia de eventos meteorol¨®gicos extremos.
Pero, como dec¨ªa, tener que enfrentarnos a una realidad tan dura como esta no implica que el resultado de Lima sea negativo. En primer lugar, al fin se abre la v¨ªa para un acuerdo de todos los pa¨ªses para luchar, en la medida de sus capacidades y responsabilidades, contra el cambio clim¨¢tico. Esto era algo impensable hace tiempo para muchos de nosotros.
Es cierto que no hay reducciones de emisiones obligatorias. Pero, como dec¨ªa al principio y ha subrayado en Lima la secretaria ejecutiva de la Convenci¨®n de Naciones Unidas para el Cambio Clim¨¢tico, hay que ser realistas. Era irreal pensar que se alcanzara un acuerdo as¨ª, con reducciones obligatorias. En cambio, el compromiso alcanzado, aunque sea poco ambicioso, puede ayudar mucho a romper barreras y prejuicios, y a ponerse en marcha para lograr los objetivos a largo plazo, que son los que realmente importan.
Estoy convencido de que el acuerdo en s¨ª mismo har¨¢ a los pa¨ªses m¨¢s responsables y m¨¢s conscientes de la urgencia de enfrentarse al cambio clim¨¢tico, y tambi¨¦n de que hacerlo quiz¨¢ no sea tan caro como algunos dicen. Y esto puede generar una din¨¢mica positiva que, si no al l¨ªmite de los 2¡ãC, quiz¨¢ nos permita llegar a evitar la cat¨¢strofe ambiental y ¨¦tica a la que nos conduce el escenario actual.
En este sentido, conf¨ªo en que tambi¨¦n nos ayude a los espa?oles a entender mejor el problema y nos haga m¨¢s conscientes de la necesidad de decidir con rigor cient¨ªfico y consenso social nuestras estrategias de reducci¨®n de emisiones y de adaptaci¨®n frente al cambio clim¨¢tico.
Pedro Linares es profesor de la Universidad Pontificia Comillas y director de Economics for Energy.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.