El hijo pol¨ªtico de la Gran Recesi¨®n
Alexis Tsipras tendr¨¢ que demostrar si es un s¨ªntoma o el remedio de la crisis
Alexis Tsipras, de 40 a?os, licenciado en ingenier¨ªa por la Universidad de Atenas y sin ninguna experiencia de gobierno, est¨¢ a 24 horas de convertirse en el primer l¨ªder de la izquierda radical que alcanza el poder en un pa¨ªs de la Uni¨®n Europea. La victoria de su partido, Syriza, en las elecciones, algo que todas las encuestas aseguran desde hace meses, no solo jubilar¨¢ el sistema pol¨ªtico que ha gobernado Grecia desde hace 40 a?os sino que reverberar¨¢ en toda Europa como una advertencia pol¨ªtica insoslayable sobre el desprestigio de las elites y los estragos sociales causados por unas medidas de austeridad convertidas en dogma. Pero, a partir de este lunes, Tsipras, hijo mediterr¨¢neo de la Gran Recesi¨®n que azota su pa¨ªs desde hace un lustro, tendr¨¢ que demostrar si es un s¨ªntoma de la crisis griega o su remedio.
El nuevo h¨¦roe de la izquierda alternativa continental empez¨® su carrera pol¨ªtica siendo adolescente en las juventudes del Partido Comunista griego (KKE), de obediencia sovi¨¦tica m¨¢s all¨¢ de la desaparici¨®n de la URSS, que abandon¨® para unirse a Synaspism¨®s, una coalici¨®n de movimientos de izquierdas y ecologistas, de la que acab¨® siendo elegido presidente en 2008.
Dos a?os antes, Tsipras hab¨ªa sido su candidato a la alcald¨ªa de Atenas y, contra todos los pron¨®sticos, alcanz¨® el 10,5 % de los sufragios, impulsado sobre todo por el voto de los j¨®venes. M¨¢s tarde vendr¨ªa la fundaci¨®n de Syriza (Coalici¨®n de la Izquierda radical), de la que su antiguo partido es el grupo m¨¢s fuerte, y un ascenso electoral mete¨®rico en tres a?os ¡ªdel 5 % que reba?¨® en 2009 al 27 % que consigui¨® en junio de 2012¡ª que ha corrido en paralelo con una crisis que precipitaba d¨ªa a d¨ªa a Grecia en el infierno de los Estados fallidos.
Tsipras supo interpretar mejor que el resto de la clase pol¨ªtica el estado de ¨¢nimo de la sociedad griega, harta de un pa¨ªs dominado por la corrupci¨®n, el clientelismo y el inmutable poder de las grandes familias y supo tambi¨¦n decir lo que la gente quer¨ªa o¨ªr. Teleg¨¦nico, buen orador y mejor t¨¢ctico, aprovech¨® el colapso de las clases medias representadas hasta entonces por el centro izquierda del Pasok y se benefici¨® de la fractura del sistema de partidos entre los defensores de las medidas de austeridad impuestas por la troika (UE, BCE y FMI) como un mal necesario o sus ac¨¦rrimos detractores, de los que acab¨® erigi¨¦ndose l¨ªder indiscutible.
Sus palabras contra la ¡°humillaci¨®n¡± que inflig¨ªa Bruselas a Grecia por orden de la canciller alemana Angela Merkel y sus denuncias de la complicidad de las clases dirigentes nacionales en los males de su pa¨ªs, as¨ª como sus llamamientos a la recuperaci¨®n de la esperanza y la dignidad han ca¨ªdo como un b¨¢lsamo, m¨¢s a¨²n, un tonificante, para un pueblo psicol¨®gicamente con la autoestima por los suelos. Los griegos, que han visto como el PIB de su pa¨ªs se reduc¨ªa una cuarta parte en los ¨²ltimos cinco a?os y el desempleo se elevaba hasta el 25 %, llegaban al l¨ªmite de su resistencia y Tsipras era el ¨²nico que gritaba. ?Basta!
Un tipo ambicioso, narcisista y con rudimentarios conocimientos de econom¨ªa, seg¨²n sus cr¨ªticos, o una figura carism¨¢tica, inteligente y flexible, de acuerdo con sus partidarios, Tsipras, convertido desde hace dos a?os en el l¨ªder de la oposici¨®n en su pa¨ªs, ha sabido hasta ahora revertir en su favor los ataques recibidos tanto internacionales como nacionales.
Narcisista y con rudimentarios conocimientos de econom¨ªa para sus cr¨ªticos; inteligente y flexible, seg¨²n sus partidarios
El desaire de Angela Merkel de no recibirlo cuando ¨¦l le solicit¨® una entrevista en junio de 2012 u opiniones como la expresada por Jean-Claude Juncker, actual presidente de la Comisi¨®n Europea, un mes antes, neg¨¢ndole conocer los problemas de Grecia o ser el hombre adecuado para su pa¨ªs, as¨ª como la campa?a del miedo lanzada por su principal rival, Andonis Samar¨¢s, el l¨ªder de Nueva Democracia (centro derecha), acus¨¢ndole de falsedades como el ser partidario de que Grecia abandonase el euro o de querer retirar los iconos de las iglesias no han hecho m¨¢s que reforzarlo.
Nacido en Atenas pocos d¨ªas despu¨¦s de la ca¨ªda de la Dictadura de los Coroneles en 1974, hijo de un ingeniero de clase media y educado en el sistema p¨²blico de ense?anza, ha aprendido ingl¨¦s muy recientemente y vive en un apartamento alquilado en un modesto barrio de la capital griega con Peristera Baziana, su novia de toda la vida a la que llama Betty y con la que tiene dos hijos peque?os. Su ¨²nico lujo, una moto BMW de gran cilindrada.
Pero uno de los signos de su imagen ¡ªno se le ha visto nunca con corbata¡ª puede tener los d¨ªas contados. En las ¨²ltimas semanas, a medida que el poder parec¨ªa poder tocarse con la mano, Tsipras ha ido moderando sus mensajes y modulando sus gestos. Partidario de la separaci¨®n de la Iglesia y el Estado en un pa¨ªs donde representantes de la jerarqu¨ªa de la iglesia ortodoxa presiden los principales actos pol¨ªticos o hab¨ªa que declarar la fe religiosa en el carn¨¦ de identidad hasta no hace mucho tiempo, el l¨ªder izquierdista sorprendi¨® a propios y extra?os el pasado 6 de enero participando en una ceremonia de la Epifan¨ªa en el puerto de El Pireo con Jer¨®nimo, el arzobispo de Atenas. Tambi¨¦n ha declarado que su h¨¦roe es Franklin D. Roosevelt por su manejo de la crisis del 29 y ha eliminado un retrato del Che Guevara de su oficina.
Menos anecd¨®tico es el cambio de tono en asuntos europeos y econ¨®micos. Su intenci¨®n es ¡°cambiar Europa, no desmantelarla¡±, renegociar la deuda con los acreedores internacionales con objeto de aliviar la carga de los ciudadanos y que Grecia deje de ser un ¡°protectorado de Berl¨ªn¡± y vuelva a ser un pa¨ªs normal. Tambi¨¦n est¨¢ en evisi¨®n su plan econ¨®mico, el llamado Programa de Sal¨®nica, que contemplaba una generosa expansi¨®n del gasto p¨²blico. Habr¨¢ que esperar unos meses para saber si Alexis Tsipras es la soluci¨®n o parte del problema de la crisis de Grecia y de Europa.
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