?dgar Amador, el ejercicio de la autoridad
El nuevo secretario de Hacienda tendr¨¢ que mostrar car¨¢cter para contener a un movimiento m¨¢s propenso al mitin que a la ardua tarea de arrastrar el l¨¢piz y ce?irse a los dictados de la realidad

?dgar Abraham Amador Zamora, nuevo secretario de Hacienda, es consciente de que su labor principal como encargado de las finanzas de M¨¦xico es cuidar que el movimiento que acompa?a a Claudia Sheinbaum no le meta goles a la econom¨ªa nacional.
Amador Zamora es contempor¨¢neo de la presidenta y de algunos ultras de Morena. Los ha visto desde sus tiempos universitarios en la UNAM, y entiende que el n¨²cleo del r¨¦gimen desarroll¨® habilidades para la lucha por el poder, no necesariamente para ejercerlo.
De ah¨ª que su arribo a la primera l¨ªnea del frente Claudista suponga tanto un triunfo personal de alguien que, como su antecesor Arturo Herrera, s¨ª conoce las tribulaciones de la clase media, y el fortalecimiento de un muro t¨¦cnico en alianza con el Banco de M¨¦xico.
Las vueltas de la pol¨ªtica elevan hoy a la m¨¢xima responsabilidad hacendaria a otro alumno del fallecido Carlos Urz¨²a, primer secretario de Hacienda del sexenio pasado y el economista que con su renuncia diera un temprano portazo al radicalismo del expresidente tabasque?o.
Amador, al igual que Herrera y Gerardo Esquivel, forma parte de una camada formada tambi¨¦n en El Colegio de M¨¦xico, instituci¨®n donde igualmente estudi¨® Victoria Rodr¨ªguez, la gobernadora de Banxico desde hace tres a?os. Ella, claramente, es m¨¢s joven.
Hace un cuarto de siglo, el gobierno de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador en la Ciudad de M¨¦xico reunir¨ªa a varios de ellos.
Herrera fue nombrado titular de la secretar¨ªa de Finanzas del entonces Distrito Federal luego de los esc¨¢ndalos de principios de 2004, cuando Gustavo Ponce, hasta entonces el encargado de esa dependencia, fue exhibido apostando millonarias cantidades en Las Vegas, Nevada.
En esa pir¨¢mide burocr¨¢tica hicieron pininos Amador y Victoria Rodr¨ªguez, que desarrollaron una relaci¨®n de trabajo que dos d¨¦cadas despu¨¦s llevar¨ªa a la segunda a operar una especie de rescate del primero, al que nombr¨® como su brazo derecho en Banco de M¨¦xico.
Porque Amador se distanci¨® de Herrera y Esquivel. El enfriamiento lleg¨® a etapa cr¨ªtica en el sexenio de Miguel ?ngel Mancera (2012-2018), cuando se desempe?¨® como secretario de Finanzas capitalino. Por otro lado, de ese periodo viene su reencuentro con Sheinbaum.
La hoy presidenta y el entonces secretario de Finanzas de Mancera se llevaron bien a partir de 2015, a?o en que Claudia asumi¨® la jefatura de Tlalpan, desde donde ser¨ªa catapultada a candidata a gobernante de la Ciudad de M¨¦xico.
En la campa?a de L¨®pez Obrador en el 2018, Arturo Herrera y Gerardo Esquivel contribuyeron a dise?ar el programa econ¨®mico de quien ese a?o gan¨® la elecci¨®n. Herrera renunci¨® a su trabajo en el Banco Mundial y junto con el segundo se perfilaban a Hacienda.
Diferencias con colaboradores de L¨®pez Obrador y con el propio presidente electo provocaron que Esquivel no llegara a integrarse al gabinete que asumi¨® en diciembre de 2018, pero al a?o siguiente fue nombrado subgobernador del Banco de M¨¦xico para atemperar turbulencias econ¨®micas.
Dado que Mancera termin¨® pleg¨¢ndose a la causa del presidente priista Enrique Pe?a Nieto ¡ªy calificado de traidor a L¨®pez Obrador¡ª, Amador fue alcanzado por las suspicacias de los morenistas sobre ese sexenio caracterizado por la frivolidad y esc¨¢ndalos de corrupci¨®n.
Ahora Amador ha visto resurgir se?alamientos de irregularidades en la secretar¨ªa de Finanzas de la que fue titular. Pagar¨¢ con un manch¨®n el haber consentido entonces que subalternos suyos sirvieran, directamente, a otros factores de poder dentro del gabinete de Mancera. No por nada como jefa de gobierno, Sheinbaum persigui¨® judicialmente a algunos de esos exfuncionarios de segundo nivel.
De cualquier manera, con la llegada a partir del 2018 de sus excompa?eros a posiciones de Hacienda y el Banco de M¨¦xico, Amador parec¨ªa destinado a un exilio de la funci¨®n p¨²blica. Y durante un tiempo se dedic¨® a cuestiones editoriales, otra de sus pasiones.
El nombramiento de Victoria Rodr¨ªguez en 2022 al frente de Banxico signific¨® tambi¨¦n su reincorporaci¨®n a la burocracia. La gobernadora lo llev¨® a un puesto especial, y lo mantuvo ah¨ª hasta que en octubre fue invitado por Sheinbaum a ser subsecretario de Hacienda.
Amador es norte?o, dicho esto como cumplido. Su trato suele ser franco y accesible. Es m¨¢s dado a una carne asada que a los lujos que suelen caracterizar a los titulares de Hacienda. Tiene un par de hijos y la conciencia de los retos que enfrentan muchas familias con parientes entrando en etapa de cuidados.
Ese contacto a ras de piso con la realidad de la poblaci¨®n ser¨¢ una de las primeras diferencias entre la gesti¨®n de Amador y la de Rogelio Ram¨ªrez de la O, m¨¢s dado a montar su caballo en el H¨ªpico de la Ciudad de M¨¦xico y a encerrarse en el despacho.
Amador hereda un enorme reto luego de los excesos en el gasto de L¨®pez Obrador, particularmente en el ¨²ltimo a?o del tabasque?o. A ello hay que agregar, desde luego, el factor Donald Trump, quien tras asumir la presidencia en enero 20 ha emprendido un embate contra M¨¦xico.
El nuevo secretario de Hacienda se lleva bien con el titular de Econom¨ªa Marcelo Ebrard. Juntos han de trabajar en la elaboraci¨®n de las alternativas si se concretan los aranceles al aluminio y al acero, programados para ya, o de m¨²ltiples productos a partir del 2 de abril.
Suya ser¨¢ tambi¨¦n de alguna manera la responsabilidad de cuidar que la nueva aventura del Infonavit, que por atrabancada decisi¨®n del gobierno volver¨¢ a construir casas, no termine como en el pasado, con un despilfarro multimillonario, y encima de dinero de los trabajadores.
Pero sin lugar a dudas la tarea m¨¢s dif¨ªcil para el nuevo secretario ser¨¢ la de contener los ¨ªmpetus de aquellos que desde el propio gobierno se afanan en desmontar factores para la certidumbre de la inversi¨®n.
Tendr¨¢ que mostrar car¨¢cter para contener a un movimiento m¨¢s propenso al mitin que a la ardua tarea de arrastrar el l¨¢piz y ce?irse a los dictados de la realidad. Amador es de izquierda, sin lugar a dudas, pero le cuestionar¨¢n cuando se niegue a fondear ocurrencias.
Igualmente ha de aterrizar muy pronto a la presidenta Sheinbaum, quien parece estarse creyendo de m¨¢s los aplausos de una iniciativa privada que mansamente acude a cada evento a aplaudirle al tiempo que, sin embargo, escasea la inversi¨®n.
El di¨¢logo fluido que tiene con Victoria Rodr¨ªguez ser¨¢ una ventaja a?adida. Ambos podr¨¢n ayudar a Palacio Nacional a calibrar mejor la temperatura de la econom¨ªa a fin de que la presidenta pueda decidir, con la mejor informaci¨®n posible, qu¨¦ hacer con una econom¨ªa seca, as¨ª ella en la ma?anera diga medias verdades optimistas sobre la marcha de las finanzas nacionales.
Y juntos habr¨¢n de defender la autonom¨ªa de Banxico de cualquier intento de alg¨²n morenista extraviado al buscar fondos extra. Amador sabe, porque la conoce, que Victoria Rodr¨ªguez nunca actuar¨ªa en contra de lo que es debido.
Amador asume la titularidad de Hacienda con la enorme responsabilidad de ejercer, en primera persona, el rol de contenci¨®n de un grupo que se desborda en palabrer¨ªa en el Z¨®calo, y que no quiere reconocer en p¨²blico lo extremadamente vol¨¢til de la situaci¨®n econ¨®mica, por Trump, pero tambi¨¦n por los excesos de Morena al desmontar los contrapesos, y al ahuyentar la inversi¨®n con, por ejemplo, la descabellada elecci¨®n por voto popular del Poder Judicial.
Demasiadas medidas puestas en marcha por los morenistas para hacerse de todo el poder, y muy pocas para ejercerlo con eficiencia. Revertir esto ¨²ltimo es la tarea de Edgar Amador. Suerte en la encomienda. M¨¢s nos vale que le vaya bien.
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