M¨¦dicos del Mundo recusa la patente europea de la ¡®cura¡¯ de la hepatitis C
Es la primera vez que una ONG sanitaria recurre a esta v¨ªa de reclamaci¨®n en la UE El precio de los nuevos f¨¢rmacos "ha equiparado a pa¨ªses ricos y pobres", dice un portavoz
El precio que los laboratorios han puesto a los antivirales de ¨²ltima generaci¨®n que est¨¢n llamados a erradicar la hepatitis C, una enfermedad que padecen cerca de 150 millones de personas en el mundo, ha hecho que, por una vez, los pa¨ªses ricos y los pobres se vean igualados en el acceso a los medicamentos. Los gobiernos europeos est¨¢n restringiendo los tratamientos con estos nuevos f¨¢rmacos que cuestan 41.000 euros en Francia, 44.000 en el Reino Unido o 25.000 en Espa?a. Ese es el precio de 12 semanas de terapia con sofosbuvir (de marca comercial Sovaldi), el m¨¢s controvertido. M¨¦dicos del Mundo ha anunciado que hoy presenta su oposici¨®n legal a la patente europea de este f¨¢rmaco, producido por el laboratorio Gilead.
Revoluci¨®n terap¨¦utica
Una revoluci¨®n como la de la penicilina. As¨ª recibieron los hepat¨®logos la llegada de los nuevos f¨¢rmacos antivirales que, combinados de dos en dos o usando tres a la vez, consiguen curar a m¨¢s del 90% de los casos de hepatitis C en un periodo de 12 o 24 semanas, dependiendo de la gravedad del paciente. Se les llama de segunda generaci¨®n porque suceden a los de primera generaci¨®n que llegaron hace un par de a?os: telaprevir y boceprevir, que mejoraron sustancialmente la tasa de curaci¨®n (del 40 al 70%) en el genotipo 1 de la enfermedad, el m¨¢s com¨²n. Eso s¨ª, estos nuevos antivirales a¨²n hab¨ªa que administrarlos combinados con los antiguos ribavirina e interfer¨®n. Este ¨²ltimo f¨¢rmaco provoca terribles efectos secundarios en pacientes graves que en muchos casos obligan a abandonar el tratamiento.
Los c¨®cteles actuales, con f¨¢rmacos de segunda generaci¨®n (sofosbuvir, simeprevir, daclatasvir...) permiten por primera vez combinaciones entre ellos sin interfer¨®n. Y con tasas de curaci¨®n alt¨ªsimas. De ah¨ª que se comparen con la penicilina. Son el primer paso, auguran los expertos, para erradicar el virus.
La decisi¨®n de la ONG sanitaria es inaudita: nunca antes una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro hab¨ªa presentado una reclamaci¨®n ante la Oficina Europea de Patentes (EPO, en sus siglas en ingl¨¦s) para tratar de facilitar el acceso de la poblaci¨®n a un f¨¢rmaco. Pero Gilead, asegura a EL PA?S Jean-Fran?ois Corty, director de operaciones de M¨¦dicos del Mundo, "est¨¢ abusando de su patente e imponiendo unos precios que los sistemas p¨²blicos de salud no pueden asumir". Con el caso de los f¨¢rmacos para la hepatitis C, a?ade Corty, "se equiparan los pa¨ªses ricos y los pobres". Y se abre un debate, al que su organizaci¨®n quiere contribuir con este anuncio, sobre la fijaci¨®n de precios de los medicamentos y el acceso a la innovaci¨®n.
La farmac¨¦utica que patenta un f¨¢rmaco tiene derecho a comercializarlo en exclusiva durante 20 a?os. Pasado ese tiempo, otros laboratorios pueden fabricarlo como gen¨¦rico y venderlo a un coste muy inferior. M¨¦dicos del Mundo ha optado por un recurso jur¨ªdico que consiste en impugnar o recusar la patente, de forma que, si tiene ¨¦xito, el f¨¢rmaco de marca en teor¨ªa podr¨ªa entrar en competencia con sus versiones gen¨¦ricas. Para ello, la organizaci¨®n ha recabado ayuda de abogados especializados en propiedad intelectual y de cient¨ªficos. Su reclamaci¨®n se basa en el hecho de que la mol¨¦cula llamada sofosbuvir no aporta suficiente novedad para justificar una patente.
Hace m¨¢s de un a?o, la ONG internacional con sede en Estados Unidos I-MAK (Iniciativa de Medicamentos, Acceso y Conocimiento), junto con la farmac¨¦utica de gen¨¦ricos india Natco Pharma, inici¨® los tr¨¢mites para recusar la patente de sofosbuvir en India. El mes pasado la oficina de patentes de este pa¨ªs les dio la raz¨®n y rechaz¨® la inscripci¨®n de Sovaldi por no ser lo bastante novedoso. Gilead ha recurrido. Aunque M¨¦dicos del Mundo ganara en su oposici¨®n a la patente europea, la posibilidad de que en Europa se fabriquen gen¨¦ricos de Sovaldi es a¨²n remota.
La organizaci¨®n ha recusado una de las m¨²ltiples patentes que tiene Gilead en Europa, la de un grupo de mol¨¦culas entre las que est¨¢ PSI-7977, conocida ahora como sofosbuvir, explica por tel¨¦fono C¨¦line Grillon, t¨¦cnica de M¨¦dicos del Mundo. Pero hay otra que cubre compuestos activos de sofosbuvir a la que Gilead tambi¨¦n puede acogerse para proteger su exclusiva. Los argumentos de la oposici¨®n que plantean se basan en dos puntos del Convenio sobre la Patente Europea, o Convenio de M¨²nich. Creen que le falta actividad inventiva, seg¨²n el art¨ªculo 56, porque el proceso por el cual la mol¨¦cula fue mejorada para penetrar mejor en las c¨¦lulas infectadas por el virus de la hepatitis C ya se conoc¨ªa. Grillon a?ade que fue descubierto por un equipo de la Universidad de Cardiff con financiaci¨®n p¨²blica.
Asimismo, y acogi¨¦ndose al art¨ªculo 100, seg¨²n el cual una patente solo puede proteger el contenido que inicialmente se reclam¨®, el equipo jur¨ªdico de M¨¦dicos del Mundo considera que Gilead pretende patentar unas mol¨¦culas registradas en 2008, cuando por aquel entonces la farmac¨¦utica Pharmasset ¡ªcomprada por Gilead en 2012 por m¨¢s de 11.000 millones de d¨®lares (8.000 millones de euros) tras demostrarse la efectividad del compuesto¡ª solo intu¨ªa su efectividad potencial pero a¨²n no las hab¨ªa estudiado.
"Nosotros no nos oponemos a la innovaci¨®n farmac¨¦utica ni al derecho de las farmac¨¦uticas de ganar dinero con sus innovaciones", subraya Corty. "Reconocemos que sofosbuvir supone un gran avance terap¨¦utico contra la hepatitis C, pero creemos que en este caso se ha abusado del sistema de patentes", a?ade. Su organizaci¨®n solo pretende "defender la universalidad del acceso a los cuidados m¨¦dicos", asegura, y poner sobre la mesa el debate sobre los precios de los f¨¢rmacos. Precisamente el Parlamento Europeo debate este mi¨¦rcoles sobre el acceso a los medicamentos en la Uni¨®n Europea. "Un pa¨ªs rico como Francia est¨¢ restringiendo el acceso a estos tratamientos, porque incluso aqu¨ª es dif¨ªcil asumir ese coste", se?ala Corty. ??
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