Chapuza del espionaje alem¨¢n
El robo de unos grifos inunda la sede berlinesa de los servicios secretos
Estaba destinada a ser un s¨ªmbolo del reforzado poder¨ªo alem¨¢n y va camino de convertirse en el pitorreo nacional. La futura sede los servicios secretos del pa¨ªs, cuyo traslado a Berl¨ªn ha costado m¨¢s de 1.300 millones de euros, apareci¨® el martes inundada despu¨¦s de que alguien se llevara varios grifos de los plantas superiores. Lo peor no son los da?os millonarios ocasionados por el robo, sino la sensaci¨®n de rid¨ªculo que deja uno de los lugares que, como se?alaban ayer varios medios,deber¨ªa estar entre los m¨¢s vigilados de Alemania. La capital del pa¨ªs que ha logrado asociar su nombre a la imagen de eficiencia se enfrenta a una nueva chapuza cuando a¨²n colea el gran fracaso de Berl¨ªn: el nuevo aeropuerto, que deber¨ªa haberse inaugurado hace ya m¨¢s de tres a?os y cuyo sobrecoste ronda los 4.000 millones de euros.
¡°La nataci¨®n es a partir de ahora uno de los requisitos imprescindibles para trabajar en el BND [siglas en alem¨¢n del servicio de inteligencia]¡±, escrib¨ªa el mi¨¦rcoles un tuitero sobre el caso ya bautizado como el Watergate alem¨¢n. Las bromas inundan la Red. Un caricaturista dibujaba una vi?eta en la que un encorbatado funcionario y un esp¨ªa mantienen el siguiente di¨¢logo:
¡ª ?De d¨®nde viene toda esta agua?
¡ª De fuentes secretas.
¡ª Bien hecho. Contin¨²a as¨ª.
Pero m¨¢s all¨¢ de los chistes, el asunto es importante. Sobre todo porque a¨²n no est¨¢ claro si los que han entrado en el sanctasant¨®rum del espionaje alem¨¢n eran rateros de la calle o el robo destapado por el Berliner Zeitung tiene motivos pol¨ªticos. ¡°Estamos investigando en todas las posibles direcciones¡±, dijo una portavoz de la polic¨ªa. ¡°Si unos ladrones pueden actuar sin que nadie les vea, ?qu¨¦ otras cosas podr¨ªan hacer disimuladamente los servicios de inteligencia de otros pa¨ªses?¡±, se preguntaba el diputado de Los Verdes Konstantin von Notz, miembro de la comisi¨®n que investiga las escuchas ilegales llevadas a cabo por Estados Unidos.
El traslado de la agencia a la capital ha costado m¨¢s de 1.300 millones de euros
La hip¨®tesis del m¨®vil econ¨®mico parece poco veros¨ªmil si se tiene en cuenta que el valor de cada uno de los grifos ronda los 100 euros. Adem¨¢s, solo fueron sustra¨ªdos los de las plantas superiores, permitiendo as¨ª que decenas de miles de litros de agua circularan por los pasillos. Los da?os en el sistema de ventilaci¨®n y en la instalaci¨®n el¨¦ctrica ser¨¢n millonarios. Las autoridades no se atreven a anticipar si el robo tiene algo que ver con las quejas habituales por los bajos salarios y los retrasos en el pago en unas obras que han ocupado a miles de trabajadores. Todos ellos estaban vigilados por c¨¢maras y ten¨ªan que pasar unos estrictos controles de seguridad.
La mudanza de la sede actual, en la localidad b¨¢vara de Pullach, acumula retrasos. Seg¨²n las ¨²ltimas previsiones, el mastodonte de 100.000 metros cuadrados situado en una distinguida zona del centro de Berl¨ªn deber¨ªa entrar en funcionamiento a partir de 2017. No est¨¢ aun claro si el Watergate de los grifos obligar¨¢ a retrasar el traslado de los 3.000 empleados del organismo.
Este no es el primer esc¨¢ndalo en torno a la nueva sede del BND. La revista Focus ya foment¨® unas cuantas bromas hace cuatro a?os, cuando desvel¨® que los planos ultrasecretos del complejo hab¨ªan sido robados. Quedaron as¨ª al descubierto importantes zonas del cuartel general de la inteligencia alemana. Un elemento m¨¢s con el que alimentar la imaginaci¨®n de tuiteros y humoristas.
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